Ciertos días se organizaban algunas competencias entre los jóvenes en un claro del bosque, este mismo estaba equipado con algunas construcciones para que no faltará nada en medio del partido, había: tiendas, bancas, césped para barrerse a libertad y un cuarto con llave para guardar todos los equipos para los juegos.
Estos días se había planeado jugar un juego de fut-beis, claro estaba que se jugaba por un premio, también era opción el participar, de la misma manera podían ir a ver el juego las personas que así lo desearan, eso último pareció más una orden en esta ocasión, casi todo el pueblo asistió, niños, jóvenes, adulto, viejos, incluso el granjero José fue a verlo, ese viejo cáscara rabias casi nunca sale de su granja.
En todo caso, el día esperado llegó, el pueblo tenía trajes de todas las medidas preparadas para ambos equipos para estas ocasiones, el color del traje siempre es opcional, está hecho de un tinte especial que se quita con cierto líquido que se consigue con facilidad y así poder decorar el traje a su gusto.
El primer equipo llegó, Mark lideraba este mismo, su traje completo de rosa destacaba en el campo —¿¡Por qué el traje rosa!? —se escuchó una voz gritar entre la multitud.
Wilbert volteo hacia la multitud y grito —lo dejamos a la suerte, que esto les sirva de lección de no dejar a la suerte las cosas.
El segundo equipo liderado por, Camila, llegó con un short de café bajo y una playera de café fuerte, otra voz se escuchó desde la multitud —¡Ya llegaron los hongos!
Una joven entre este equipo pregunta —¿Somos un equipo de setas?
Nahum le contesto a la joven —pues somos parecidos, aunque no todos los hongos son cafés, lo más parecido creo que son los champiñones.
—¿Quién fue el de la idea de venir de este color? —pregunto, Alexander.
—No entremos en detalles de eso ahora —menciono, Luis Carlos.
—Él mismo fue el que lo había dicho —delato, Christopher.
—Paren un momento sus cabales, en todo caso, todos aceptamos este color —exclamó, Ramón.
—Por lo menos no somos los únicos retrasados que hicieron mal la elección del color del uniforme —menciono, Samuel, entre risas en el otro equipo.
De nueva cuenta otra voz se escuchó entre la multitud —¡Mejor no opinen, ustedes son el equipo batido de fresa!
El otro equipo se empezó a reír —en ese caso ¿Somos fresas con leche? —pregunto, Azael, con duda.
—Pues podemos, las chicas son las fresas y los chicos la leche —exclamó, Aurelio entre risa.
Raúl echó un vistazo rápido a su equipo —pues… hay muy pocas fresas en este equipo —menciono.
Christopher miró su equipo de forma rápida —tiene razón ¿Por qué somos tan pocos hombres?
—No lo sé, pero en todo caso no venimos a decir él porque está así este asunto —exclamo, Ramón.
—Es que muchos no quisieron participar, por eso solo somos: 6 hombres y 8 mujeres —menciono, Nahum —incluso aceptamos uno menor que nosotros para completar el equipo.
Este equipo solo asintió sabiendo que era verdad.
Los equipos tiraron un volado para saber quién podría empezar… Mark empezará, el equipo de, Camila se dispersó por todo el campo, los hombres que se sabía que tenían buena capacidad para correr estaban hasta el final del campo.
Empezaron las entradas, el equipo, batido de fresa, empezó con todo, las pelotas volaban con fuerza hasta el final del campo, pero, esto ya se esperaba esto, los ponches se hicieron de forma consecutiva.
Se acabó la primera ronda y hubo cambio. El equipo champiñón entró de forma inadvertida, Camila tuvo el honor de empezar, está los agarro por sorpresa, al ser mujer pensaron que sería un golpe leve, no, esa pelota fue demasiado rápida, hubiera seguido aún más si no fuera porque Rodolfo lo “atrapo” con la cara, pobre de él, casi cae noqueado y de forma inútil porque aun así logro hacer una carrera.
Esto continúo con tres personas más hasta que al final se pusieron las pilas y lograron frenarles los pies, lograron un total de 5 carreras.
Esto continúo, varios trucos empezaron a salir, de parte de varios integrantes de ambos equipos, curvas, toques, cosas extrañas, juegos con la pelota, incluso hubo algunos que se volaban la barda y tenían que ir a buscarla, otros hicieron barridas estratégicas para evitar la pelota, de la misma forma hubo algunas accidentales que les salvó.
Estamos en la última entrada, la mayoría de los integrantes están cansados, el marcador está 20 carreras de parte de, Los champiñones y 18 carreras el equipo, Batido de fresa.
Toda la multitud estaba emocionada ante este juego, ningún equipo daba su brazo a torces.
Es turno de, Batido de fresa, Emily se acerca a la base y golpea la pelota con tal fuerza que llega hasta lo último, esta se queda en segunda base por precaución.
Aurelio se acerca a la base y le da un toque, esto hace que lo ponchen, pero, Emily logra llegar a tercera, todo el campo está en tensión, saben a la perfección que planean, pero, no saben si podrán evitarlo.
Wilbert se acerca, da un tiro largo y alto, esta es atrapado por lo cual es ponchado, pero Emily logro robar la base y es carrera.
Andrick se acerca en busca de una carrera, la pelota rueda hacia él, le da una patada con toda su fuerza, la pelota sale con una fuerza increíble a las manos de Camila, esta no es capaz de atraparla así que se ve obligada a tirar hacia arriba hasta la altura de las copas de los árboles, de forma rápida todos se amontonan en el sitio donde caerá, pero al hacerlo causan un gran choque entre todos, de forma inesperada alguien utilizo a los que estaban en el suelo como trampolín, salto sobre ello y logro atrapar la pelota con éxito, Andrick fue ponchado.
Durante un breve segundo todo fue felicidad, más, sin embargo, no pensó bien el cómo caer, ya se encontraba en caída libre, buscaba una forma de poder solucionar su problema, pero no puedo encontrar ninguna, cuando estuvo por tocar el suelo sintió dos tirones en su camisa que la volvieron a subir hacia arriba, pero esta vez con menos fuerza, para al final aterrizar en los brazos de, Nahum y Ramón.
—Nada mal niña, gracias a ti nuestro equipo ganó —exclamo, Nahum mientras le sonreía.
La joven estaba sonriendo —en ese caso el equipo de setas ganó, que bien —menciono.
—¿Qué no éramos hongos? —pregunto, Ramón.
—¡No!, éramos champiñón —exclamo, Nahum.
Pensamientos:
Nahum
Debo de encontrarlo… ¿Dónde está?… Esto es aquel trofeo ¿Por qué tengo lo tengo yo? Jamás me lo pregunté ¿Por qué me lo habrán dado a mí? Camila fue la líder, Ramón y Alan hicieron grandes contribuciones en ese partido, sobre todo también está la que hizo ese último ponche…
No logro recordar su nombre, ¿¡Cómo soy capaz olvidar el nombre de uno de mis compañeros!?
¿Qué es eso? Hay una foto… son todos los que participamos en ese juego, también está el equipo rival, creo… que esa fue la última vez que me divertí así en un juego.
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 65 Episodes
descargar
¿Te gustó esta historia? Descarga la APP para mantener tu historial de lectura
Comments