La vida de Oriol terminó en un instante, pero el destino le ofrece una segunda oportunidad. Al reencarnar en el cuerpo de Kenai, un hombre casado cuya pareja se ha ido de viaje con su amante, Oriol se encuentra atrapado en un matrimonio vacío. Sin embargo, mientras explora la vida de Kenai, empieza a descubrir un amor inesperado que desafía las reglas de la realidad. Pero cuando el esposo regresa, todo lo que ha comenzado a florecer corre el riesgo de desvanecerse.
¿Podrá Oriol cambiar el rumbo de su nueva vida antes de que sea demasiado tarde?
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Cap 19: Perdóname
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...AL DIA SIGUIENTE ...
La noche había pasado y Alicia no pudo dormir debido a las “pesadillas” y la sensación de ser devorada por esa marca que tenía en su cuello y brazo. Su visita al dermatólogo no le dió una solución inmediata, ya que el doctor no encontró una explicación a esa mancha negra por lo que le dió la orden para realizarse una biopsia.
ALICIA: Maldita sea, qué es esta maldita mancha _(frotando con fuerza el área)
La mujer tratando de calmar la incomodidad de ser devorada por dentro, se frotaba con fuerza hasta que la piel comenzó a sangrar. Aún así, esa desesperación no borraba de su mente la idea de acabar con Kenai y estaba molesta porque ese trabajador no la había llamado para informarle si había podido llevar a cabo la orden.
ALICIA: Más tarde llamo a ese maldito mugroso._( cansada)
La mujer estaba cansada, pues durante la noche intentaba dormir pero las sombras cobraban vida y se adueñaban de su mente torturandola mientras le recordaban el por qué de su sufrimiento. Asher por su lado, ha estado pensando la mejor idea para conquistar a Kenai, evitar el divorcio y que Hanza no se acercara a su esposo.
ASHER: Cuando regrese me encargaré de que no se aleje y lo volveré a conquistar.
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Kenai por su lado, estaba preocupado por lo ocurrido con Hamza, ya que el chico se había ido sin despedirse y además molesto con él. Después de arreglar algunos asuntos en la mina, viajó de regreso a la ciudad, apenas llegó, fue en busca del rubio.
HAMZA: ¿Necesitas algo, Lizardo?_(viendo a Kenai entrar a su oficina)
KENAI: Mi princesita, sé que estás molesto conmigo por lo que te dije y por lo sucedido con esa mujer. ¿Podrías perdonarme?
HAMZA: No tengo nada que perdonarte, por el contrario perdóname tu a mi por ser insistente e incomodarte.
KENAI: princesita, perdóname, sé que fui un idiota por tratarte mal y herir tus sentimientos..…. Muñequita te juro que ayer no sucedió nada con esa mujer, Estoy cumpliendo mi promesa._(rodeando el escritorio quedando de pie al lado de Hamza)
HAMZA: No me llames muñequita, no soy mujer.
KENAI: Está bien, mi muñequito precioso, perdóname ¿Si? Te prometo no volver a tratarte mal.
HAMZA: Bien te disculpo, pero no te vuelvas a acercar a mí.
KENAI: Princesita, sé que soy un idiota por no reconocer que me gustas, pero es un poco complicado admitir que me gusta un hombre, cuando siempre me han gustado las mujeres. Discúlpame por tratarte mal.
HAMZA: ¿Te gusto?_(viendo al chico a los ojos)
KENAI: Mucho._(acariciandole la mejilla)
HAMZA: Solo te gusto porque tengo rasgos femeninos.
KENAI: Me gustas porque eres mi princesita._(dandole un beso en los labios)
HAMZA: Oriol, no juegues conmigo.
KENAI: No juego contigo princesita, de verdad me gustas mucho y me gustaría que fueras mi novio.
HAMZA: No quiero.
KENAI: ¿Quieres ser mi prometido?
HAMZA: Tampoco.
KENAI: Entonces ¿Quieres ser mi esposo?
HAMZA: No.
KENAI: Princesita, no pensarás ser solo mi amante ¿verdad?
HAMZA: No, no quiero ser tu amante.
KENAI: mmm, muñequito precioso, ¿me permitirías ser tu luz? Prometo serte fiel y nunca tratarte mal o levantarte la mano._(recordando que Hamza le había dicho que era su luz destinada)
HAMZA: ¿De verdad quieres ser mi luz? ¿No te arrepentirás?_(levantándose de la silla para quedar frente a Kenai)
KENAI: De verdad quiero ser tu luz y no me arrepentiré por aceptarte como mi princesita.
HAMZA: Está bien, pero ¿Puedo decirte amor?
KENAI: Puedes decirme como tú quieras.
HAMZA: ¿Puedo darte besos?
KENAI: Todos los que quieras.
HAMZA: Podemos….
KENAI: No tendremos intimidad hasta que yo esté divorciado y nos hayamos casado.
HAMZA: ¿Por qué?
KENAI: Porque te respetaré como mi pareja y no te trataré como a un amante.
HAMZA: Te amo, príncipe.
El rubio pasó sus brazos alrededor del cuello de Kenai para darle un profundo beso.
KENAI: ¿Quieres ir a cenar?_(acariciandole el cabello)
HAMZA: Está bien.
Los chicos salieron de las oficinas y se dirigieron a un restaurante en el centro de la ciudad. Al llegar hicieron su pedido y se dispusieron a charlar.
HAMZA: ¿Ya encontraste a los trabajadores que te hacen falta?
KENAI: Varios han respondido al anuncio de empleo y yo hablé con un gemólogo y un ingeniero de Brasil, estoy esperando una respuesta.
HAMZA: Cuando contrates a los empleados, ¿te divorciarás?
KENAI: Ya el acuerdo de divorcio está redactado y firmado, solo falta la firma de ese idiota.
La charla continuó entre comidas, al terminar, Kenai llevó al chico hasta su casa.
HAMZA: Príncipe, ¿te quedarías a dormir conmigo?_(sosteniéndole la manga de la camisa y su cabeza agachada)
KENAI: Está bien._(sonriendo por la acción "inocente" de su princesita)
Entraron a la casa y fueron hasta la habitación para prepararse para dormir.
KENAI: Princesita, ¿Que sucederá con tu compromiso?
HAMZA: Le diré a mi padre que encontré a mi luz, así él no me obligará a casarme._(quitando su camisa)
Kenai observaba al chico y cuando este se quitó la camisa, Kenai pudo ver la marca negra en el brazo del rubio.
KENAI: Princesita, ¿Qué te sucedió en el brazo? ¿Te golpeaste?_(preocupado)
HAMZA: No me sucedió nada, amor.
KENAI: Me estás mintiendo, dime qué te sucedió._(tomándolo del brazo para ver más de cerca esa marca)
HAMZA: B-Bueno, tú me rechazaste en varias ocasiones y tuviste relaciones con otras, así que eso creó esa marca.
KENAI: Princesita, ¿me estás diciendo que yo te causé esto?
HAMZA: No sabías, así que….
KENAI: ¿Por qué no me dijiste nada?
HAMZA: Eso ya no importa….
KENAI: como que no importa, claro que importa, princesita, ¿Cómo se quita?
HAMZA: No sé, anteriormente no se quitaban.
KENAI: Lo siento, princesita._(dijo para darle un beso en esa marca)
HAMZA: No me preguntarás ¿cómo es que tus acciones me crearon una marca en el brazo?
KENAI: Cuando estés listo para decirme, me dirás, aunque creo que debe ser por eso de que soy tu destinado.
HAMZA: mmm
KENAI: Descansemos.