Amara Brennan, heredera de Brentic Global, una empresa multinacional, criada para ocupar de forma cabal y capaz el cargo de presidenta cuando llegue el momento. Madre de un pequeño de apenas tres años de edad. Se encontraba siendo empujada a una situación difícil en su vida, enfrentando un divorcio por la infidelidad de quien era su esposo, haciendo frente a la disputa por la custodia de su hijo Martyn, una de las artimañas del hombre para obligarla a doblegarse ante él.
Sus problemas aumentan en el momento en que conoce a Rafael Castel, supervisor encargado del nuevo proyecto que realizaban en conjunto con Industrias Zhang un hombre quien se creía era Beta, surgió su Subgénero en el justo momento en que estuvieron frente a frente. Ahora Amara no solo debía enfrentarse a un divorcio y pelear por tener a su hijo a su lado, sino que también debe lidiar con un Alpha que no sabe controlar sus feromonas y quien es su pareja destinada.
NovelToon tiene autorización de Gabriela Kienzler para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Capitulo 13. Tomar responsabilidad
Amara podía escuchar clara mente los fuertes latidos de su propio corazón, sumado a los espasmos y reacciones que le producían las feromonas del hombre que la estaba envolviendo.
Toda su piel se erizó cuando el hombre le susurró al oído, en especial su cuello que era el sitio donde podía sentir la respiración y el calor del hombre.
- ¿Pero? – le dice el hombre al oído
- P… pero nunca le dije que pudiera hacer este tipo de cosas en público – le dice nerviosa – estamos frente a la empresa donde laboro – le dice tratando de contenerse
- Oh, es eso – dice separándose por fin de ella, Amara respiro aliviada, pero no le duro mucho el alivio – entonces es fácil de solucionar – le dice tomándola de la mano y comenzando a caminar halando de ella.
- Espere, ¿Qué hace?, ¿hacia dónde pretende llevarme? – le dice mientras intentaba resistirse, pero era inútil, el hombre tenía demasiada fuerza y por causa de sus feromonas Amara sentía su cuerpo débil ante él.
Caminaron hasta llegar al estacionamiento hasta que, Amara termino acorralada entre su auto y un hombre alto, corpulento que, liberaba sus feromonas a diestra y siniestras.
- Q… ¿Qué hacemos aquí? – le dice nerviosa, mientras sentía que su corazón saldría por su boca en cualquier instante.
- Usted dijo que me ayudaría con mi problema y no quiere que sea en público – se acerca pegando su cuerpo de la mujer – entonces si no quiere que la vean, solo debe abrir su auto – le dice acercándose a sus labios.
- Espero un momento yo…- no sabía que decir para salir de una situación en la que, ella sola por orgullo e impulso se había metido
- No puedo esperar más – le dice antes de besarla, lamiendo sus labios y saboreándolos
- Señor Castel, por favor trate de controlar un poco sus feromonas – le dice intentando mantener la cordura de la situación.
- Desde ayer es lo que he estado intentando hacer – le dice agitado – pero no dejo de sentir su dulce sabor en mi garganta, es insoportable el deseo de tener su aroma y querer tocarla – le dice besándola nuevamente.
- Espere – sus piernas comenzaban a flaquear, Amara sentía un inmenso de deseo y por igual, temor ante la debilidad que estaba mostrando por un simple Alpha, al cual no podía resistirse.
- Le dije que no puedo, mis esfuerzos por soportarlo se ven opacados ante el deseo de tenerla, usted inicio con esto ¿recuerda? – le dice en tono suave, causando un espasmo en Amara.
- Lo sé – le dice viéndolo a los ojos, el hombre tenía la mirada perdida, si respiración era agitada y su cuerpo se sentía caliente – me comprometí en ayudarlo y es lo que hare, solo deme un poco de espacio – le dice y el hombre se aparta, permitiéndole abrir la puerta del auto – súbase - le dice haciéndole un ademan con la mano.
De forma obediente el hombre se subió al auto y luego rápidamente tomo la mano de Amara al ver que esta cerraría la puerta.
- Tranquilo, no iré a ningún lado –le dice tomando la mano del hombre para apartarla – solo necesito subirme del lado del piloto para poder manejar – le dice logrando que el hombre la soltara.
- ¿Manejar? – le dice Rafael en cuanto la mujer se subió al auto – no entiendo, ¿A dónde quiere ir? – le dice tratando de resistirse a no irse sobre ella.
- La condición que tiene en este momento no es algo que se calme con un simple beso – le dice Amara, el hombre se veía que la estaba pasando realmente mal, podía notar sus manos temblando ante la resistencia que intentaba poner.
Saco su teléfono y llamo a su asistente.
- Dígale al personal de Zhang que la reunión ha sido cancelada – le dice en cuanto la mujer atiende el teléfono.
- Pero, señora ellos ya se encuentran aquí – le dice la mujer nerviosa.
- El supervisor Castel no – le dice Amara de forma cortante – lo sé porque en este momento estoy reunida con él – le costaba mantener su tono de voz en un estado normal – decidimos discutir los puntos del proyecto de forma directa, por petición del mismo ya que tiene otros asuntos que atender – le dice viendo como el hombre temblaba en el asiento de al lado.
- Bi, Bien señora – le dice la asistente
- También necesito que le notifique a la niñera de Martyn, que debe cuidarlo por unos días, ya que estaré atendiendo otros negocios - le dice tratando de sonar normal - Bien, la llamare luego para que redacte un acta con los puntos que fueron tratados – le dice antes de colgar la llamada, ya no podía resistir el seguir hablando sin sentirse agitada -
Amara condujo hacia el único sitio donde sabia podría ir y contar con la completa discreción del personal, el Hotel Imperial era uno de los más conocidos por su ostentosidad y lujos que, les proporcionaba a los clientes un alto nivel de estándares, por lo tanto, no era muy plagado por visitantes ya que el costo de las habitaciones era uno de los más elevados.
- Necesitamos salir y hacer la reservación – no podía pedirle a su asistente que le reservara, podría generar habladurías en la empresa, así que debía hacerlo ella misma – así que solo debe controlarse mientras lo hacemos, ¿Ok? – le dice mientras se coloca el collar para Omegas, algo que nunca espero tener que utilizar, pero dada la actual situación, se veía obligada. El hombre la miró con ojos de dolor, era obvio que ya se estaba resistiendo son todas sus fuerzas – le prometo que luego de eso todo estará bien – le dice tratando de darle algo de calma.
Salieron del auto y como si temiera perderla el hombre la tomó de la mano, caminando a su lado entraron al lugar he hicieron la reservación.
Subieron por el ascensor y caminaron por el pasillo buscando la habitación, al llegar Amara abrió la puerta con la tarjeta y entraron.
De inmediato el hombre se fue sobre ella sin control alguno, dejando salir sus feromonas impregnando todo el lugar.
Por suerte Amara era dominante, una cantidad de feromonas así, no sería fácil para otra Omega el resistirlo y mantener por lo menos la conciencia, aunque las reacciones de su cuerpo eran totalmente guiadas por las feromonas del hombre.
Sin poder hacer más que simplemente dejarlo hacer lo que quisiera hasta que apaciguara su estado, Amara recibió las caricias que el hombre repartía por todo su cuerpo y por las cuales no podía evitar emitir gemidos, era difícil vivir esa situación en la que no podía tener el control si quiera de su propio cuerpo, ya que comenzó a liberar sus feromonas reaccionando a las del hombre.
Al sentirlo entrar en su cuerpo era como si una llamarada de fuego la penetrara, invadiendo cada parte de su interior y tomando todo de ella en cada embestida hasta que perdiera el conocimiento.