Las Aventuras De Un Reencarnado En Una Época ABO

Al frente mío estaba esa mujer (mi madre) un hombre mayor, y los dos hombres que estaban el día que desperté en este mundo

X: mi niño hermoso ¿ en dónde estabas metido en todo este tiempo? - yo tomo sus manos y comienzo mi mejor actuación

Sam: madre tuve que huir esas personas me estaban dando veneno si no lo hacía iba a morir - digo llorando desesperadamente - estaba asustado y tú no estabas a mi lado

X: ¿que personas trataron de matar a mi adorado nieto? - yo escondiendo mi rostro en mis manos señaló a las dos personas

X: ¿cómo te atreves a culparnos de algo como eso? ¿a mí que soy tu padre y crío hasta que te convertiste en un hombre?

Sam: ¿cómo se atreve a decir eso? Justo usted que me dijo que si me iba y no volvía me dejaría en paz, pero no cumplió con su promesa y mato a una de las personas más importantes para mí - trato de acercarme a ese hombre para descargar toda mi furia, pero Juan me sostiene impidiendo que lo golpee

X: no sé dé lo que hablas - yo miró a las dos personas sensatas del lugar, las personas que dicen quererme

Sam: Ustedes me creen? Yo no tengo razón para mentir - la mujer mira al hombre mayor y este solo asiente

X: Nathanael tal vez no sepas quién soy, ya que es la primera vez que nos vemos - veo como extiende su mano - soy tu abuelo el rey Damian Lawrence y yo me haré cargo de estás personas - dice para así tres guardias apresar a esas personas

Sam: No - me suelto del agarre de Juan - yo estoy aquí para matarlos yo mismo

Juan: Sam - me dice él preocupado

Damián: un miembro de la familia real no debe de ensuciar sus manos con la sangre de simples no...

Sam: eso me vale, yo me haré cargo de ellos deseo que mueran de la misma manera en la que murió mi padre - los hombres abren grandemente los ojos - atenlos a un árbol

Juan: ¿Sam que harás no actúes de manera precipitada?

Sam: Juan si no vas ayudar no estorbes - le digo veo como los guardias hacen lo que le digo

X: cariño que harás - yo si río al verlo como ya esta atados al árbol

Sam: los quemaré vivos - le digo a la mujer con una enorme sonrisa - Hugo haz los honores de calentar el lugar

Hugo: es todo un placer - se acerca a mi y le lanza sus llamas y estos se prenden sus gritos llamaron la atención de todos los cuales empezaron a acercarse a ver y aunque esto no me devolvía a mi viejito al menos me hacía sentir que hice justicia por su injusta muerte

Sam: Caín - este apaga las llamas al ver que ya los dos hombres están sin vida - siento el desastre causado Juan arregla el daño - Juan asiente y hace crecer el pasto y restaurar el árbol quemado - ya está listo nos vamos - me doy la vuelta para salir del lugar

X: ¿a dónde vas? - dice mi madre

Sam: ya tengo una vida en la cual soy feliz no deseo volver a ser un Santo así que me voy - tomo del brazo a Hugo - estuviste increíble - digo con una sonrisa enorme

Hugo: ah solo complazco a este pequeño niño - dice acariciando mi cabeza

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Desde ese día la princesa (mi madre) siempre manda guardias a buscarme para pedirme que regrese al castillo, la verdad es que a mí no me interesa ser un príncipe o un santo que solo va por allí sanando gente por qué me lo piden, lo hacía en el lugar en el que vivía solo porque deseaba practicar esa magia, pero ahora mismo no me interesa en absoluto estar atado a las reglas y exigencias de ser un noble

Juan: Y? Que te parece? - yo miró el lugar emocionado y abrazo a Juan

Sam: está increíble - Juan y Hugo habían comprado un enorme local de tres pisos arriba se encontraba nuestras habitaciones, el segundo piso se encontraba las salas VIP y abajo el bar - seguro que al señor Jacinto le gustaría mucho - él acaricia mi cabello

Juan: también creo lo mismo

X: Vaya!! - miró hacia atrás y veo a un hombre encapuchado al frente de la puerta no se le miraba el rostro, pero su olor lo reconocí de inmediato

Sam: ¿qué haces aquí? - el se acerca a mi, pero Juan impide que llegue más lejos

X: solo deseaba verte - yo arrugó el cejo su mirada se dirige a Juan el cuál cae de rodillas sin poder moverse - me molesta que se interpongan en mi camino - su mano acaricia mi mejilla - te ves muy bien Nathanael - le quitó la mano de mi rostro

Caín: Sam está todo bien? - pregunta entrando con las compras

X: diles que se vayan deseo hablar a solas contigo

Sam: yo no deseo hablar c...

X: acaso deseas que los mate - veo como levanta su mano, así que la sostengo

Sam: Caín, Hugo yo hablaré con él señor un momento - digo tomando su mano y llevándolo al tercer piso directo a mi habitación - ¿ya estamos solos que deseas? - él desabrocha su capucha y se la quita para luego ponerla en la cómoda, su apariencia me dejó sin palabras por unos segundos

X: solo he venido a recuperar lo que me pertenece - yo lo miro sin entender de lo que habla, él se acerca y acaricia mi mejilla y baja hasta mi cuello - este cuerpo es mío

Sam: ¿acaso eres Nathanael? - él niega con su cabeza - ¿Entonces habla claro y deja de estar dándole vueltas al asunto? - puedo sentir como el aire se llena de un delicioso aroma que hace que mi cuerpo se sienta extraño

X: Nathanael me ofreció ese cuerpo a cambio de sacarlo de este desprendible mundo - yo lo miro sin entender a qué se refiere, pero ante mi aparezco yo en mi actualidad y puedo ver cómo estoy pasando tiempo con mis amigos - vez el no quiso seguir aquí y se fue allá es más feliz al igual que tú lo eres aquí - me siento en la cama al sentir como todos me estaba dando vueltas y aunque es verdad que en ese lugar no era feliz lo único que me hacía bien era bailar y ni eso hacía bien, ya que no era un bailarín profesional si no un stripper. No podía aceptar que mi muerte fuera causada por unos locos que deciden quien vive y quien muere o que les pertenece

Sam: estás loco que aceptaré esta ridícula mierda - digo con mi respiración agitada y mi cuerpo calentándose cada vez más

X: no es necesario que aceptes es algo que ya está hecho - dice para luego desaparecer sin más (que hijos de put@ son estos dos, Nathanael por entregar un cuerpo el cuál claramente no iba a habitar y el otro por aceptar algo así sabiendo que sería otra alma quien cargaría con las consecuencias)