La desgracia siempre había sido una constante en la vida de Riki. Pero esa vez fue diferente.
En un solo día, su mundo cambió por completo.
Acababa de descubrir que alguien lo había incriminado y humillado. Y al regresar a casa, enfrentó una desgarradora realidad: su hermana, su única familia, se había quitado la vida.
Cuando intentó denunciarlo todo a las autoridades, solo se encontró con más humillación. No era más que un perdedor.
Solo quedaba la muerte para él; mejor morir que vivir en medio de la miseria.
[¿Quieres vengarte?]
¿Eh? ¿Qué es esto?
[Únete al sistema que te ayudará a obtener justicia y riqueza.]
¿Riqueza?
[¿Aceptas?]
Pero, ¿no estaba Riki ya muerto?
Cuando despertó, una nueva vida lo esperaba.
Era el momento de la venganza.
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Capítulo 5
Cuando Riki despertó, ya estaba dentro de un pequeño apartamento.
Su cuerpo se sentía muy adolorido y tenía hambre.
[Has estado durmiendo durante varias horas]
[El estado de tu cuerpo es malo]
[¿Quieres gastar 1.000.000 para cubrir los costos de tu curación?]
Riki asintió reflexivamente y dijo 'sí' en su mente. Porque estaba demasiado cansado para hablar.
[El proceso de curación ha comenzado]
[Curación completada]
[Para recuperar tu energía, come la comida que Edwin ha preparado]
¿Edwin?
¿Fue él quien llevó a Riki a ese pequeño apartamento?
Riki salió de la habitación y observó su apartamento.
Aunque era relativamente pequeño, claramente era un apartamento de lujo.
Había un dormitorio conectado con el baño. Afuera había una sala de estar, una sala principal y una cocina que se fusionaban en una sola. Había un televisor grande en la sala principal, con un sofá grande que parecía cómodo.
En la cocina pequeña y limpia, había un refrigerador que contenía varias frutas, verduras frescas y bebidas enlatadas.
También había comida congelada que aún necesitaba ser calentada, a saber, pizza gratinada.
Riki metió la pizza en el microondas, luego intentó cocinar para que su cuerpo obtuviera buenos nutrientes para aumentar su energía.
Como no estaba acostumbrado a cocinar con ese cuerpo, solo podía cocinar algo fácil. Como huevos fritos y verduras salteadas.
En su vida anterior, Riki estaba acostumbrado a cocinar, porque en su casa solo estaban él y su hermana menor después de que sus padres fallecieron.
Ningún pariente quería cuidarlos.
Su pobre hermana menor, que descanse en paz.
Andre es realmente un cabrón.
La familia Anggara solo está llena de cabrones.
Merecen recibir un castigo justo.
Pero por ahora, Riki debe concentrarse en mejorarse a sí mismo primero.
Estaba feliz porque lo trasladaron a un nuevo apartamento, aunque primero tuvo que ser golpeado, no le importaba.
Lidiar con esa familia por más tiempo lo cansaba. Tenía que contener sus emociones todo el tiempo.
[Después de que recuperes tu energía, debes realizar una misión de ejercicio]
“Ah, cierto… tengo que hacer ejercicio”.
¿Qué hay del profesor de boxeo que mencionó Edwin? ¿Dijo que le rogara yo mismo? ¿Dónde está el lugar?
Riki regresó a su habitación, buscó su teléfono inteligente y luego vio los mensajes que Edwin le había enviado.
Había muchos mensajes, como que Riki debía cuidarse, que Edwin vendría cuando no estuviera ocupado, y luego resultó que también estaba la dirección del lugar del profesor de boxeo que Edwin había mencionado antes.
Riki sonrió ampliamente, estaba feliz porque el lugar no estaba lejos de ese pequeño apartamento.
Ah, sí, Edwin también envió 20.000.000 de rupias a su cuenta a través de la cuenta secreta de Edwin.
Estaba claro que Edward le había pedido a Edwin que ignorara a su hijo y no le diera ninguna ayuda.
Por supuesto, Edwin le tenía miedo a su hermano mayor.
Riki se sintió aliviado, porque aunque Edwin no era el mejor padre del mundo, todavía se preocupaba por su hijo.
Al menos, era un poco más responsable que el padre anterior de Riki.
[Misión de ejercicio iniciada, durante los próximos treinta minutos cada movimiento tuyo puede quemar grasa hasta tres veces más]
Después de arreglar su apariencia, Riki salió del apartamento.
Su apartamento estaba en el décimo piso, no usó el ascensor, sino que bajó las escaleras manualmente. Hizo eso por la misión de ejercicio.
Quería perder mucho peso rápidamente.
Por ahora, el cuerpo de Ricky no era tan pesado como la primera vez, ni tan redondo como antes. Su cuerpo se estaba formando lentamente debido a la misión de ejercicio que Riki realizó durante los tres días que vivió en ese pequeño apartamento.
Habían pasado tres días y su peso ahora era de 108 kg. Luego, su altura también comenzó a aumentar a 177 cm.
Fue un crecimiento muy rápido.
Durante tres días, Riki se centró en el ejercicio y en comer alimentos limpios. Sin comida chatarra, sin dulces, aumentó su ingesta de proteínas.
También siempre bajaba usando las escaleras y no el ascensor, aunque tuviera que bajar muchísimos escalones.
Después de lograr bajar todas esas escaleras, Riki descansó un rato en el parque, y luego continuó caminando por los alrededores.
Riki fue al lugar del profesor de boxeo que Edwin le había indicado, su nombre era Sr. Beni.
Hacía tres días que Riki iba a ese lugar, pero también había sido rechazado tres veces.
Hoy se encontró de nuevo con el Sr. Beni, él estaba regando las plantas en el patio delantero.
“¡Hola, Sr. Beni!”
Beni se giró hacia Riki, que estaba de pie con una amplia sonrisa.
“¿No te cansas de venir aquí, eh? No quiero ayudarte”.
Riki seguía sonriendo, luego tomó la regadera, “Déjeme ayudarle, puede relajarse, Sr. Beni”.
Beni no se lo prohibió, simplemente dejó que Riki lo ayudara.
La razón por la que rechazaba a Riki era porque era hijo de Edwin Anggara.
Relacionarse con esa familia no era algo bueno para él.
Beni era un boxeador nacional bastante legendario. Ya era viejo, tenía cincuenta años. Sin embargo, se había retirado desde los cuarenta y cinco años.
Cuarenta y cinco años se consideraba todavía joven, pero Beni se vio obligado a hacerlo porque en ese momento sufrió un grave accidente que le rompió la pierna.
Ahora su pierna estaba bien, pero cojeaba un poco al caminar.
Aun así, todavía podía enseñar a otros. Pero era selectivo.
No a todos podía enseñarles.
Solo los jóvenes buenos podían hacerlo. Beni no quería que sus conocimientos se usaran para cosas malas.
“Veo que tu cuerpo está cada vez más en forma, ¿te entrena algún profesional?” preguntó Beni.
Riki rio entre dientes al escucharlo, luego negó con la cabeza, “No, Sr. Beni, hago todo solo. Solo tengo una fuerte determinación. Hago ejercicio y cuido mi dieta”.
Beni asintió lentamente, observando el cuerpo de Ricky que mejoraba y se definía cada vez más. También era más alto.
No era de extrañar, ya que Ricky todavía estaba en edad de crecimiento.
“En realidad, querría entrenarte, pero como eres hijo de Edwin, no lo haré, así que puedes buscar otro maestro”.
Riki se giró de inmediato, mirando a Beni con una expresión difícil de interpretar.
Haciendo que Beni se sintiera culpable y agobiado.
“¿Porque soy de la familia Anggara?” preguntó Riki.
“S-sí… ellos fueron los que causaron mi accidente, para que la persona a la que ayudaban pudiera ganar el combate. Solo soy un ser humano común que no puede ocultar sus emociones. Quién no se molestaría si…”
“Ya sospechaba que había algo que le hacía reacio a ayudarme”.
Beni estaba muy confundido al ver la amplia sonrisa en el rostro de Riki.
“¿Por qué sonríes?” preguntó Beni.
Riki negó con la cabeza, “No, yo también odio a mi familia, ellos me abandonaron aquí. Jajaja, soy gordo y débil, así que me consideran una carga y muy vergonzoso. Pensé que aprender de usted y volverme más fuerte me haría sentir…”
“Está bien, ven mañana a las cuatro de la tarde, te enseñaré un poco”.
Los ojos de Riki se abrieron de par en par, “¿En serio? ¿Me va a enseñar?”
Beni no tuvo corazón para con Riki, así que cedió.
“Sí, no necesitas traer dinero ni nada, no necesito tu dinero. Solo dame dinero si logro entrenarte. Pero, ¿qué harás si logras volverte fuerte?”
Riki sonrió, “Si me vuelvo fuerte, podré defenderme de esa gente malvada. Quiero castigarlos”.
Beni supo por el brillo en los ojos de Riki que se vengaría. Sin embargo, Beni no dijo nada.
Aunque sabía que Riki se refería a su propia familia.
