El Precio De Tenerla

— Entiendo señor! y esta en todo su derecho!

— La otra cosa que quiero tratar, es que tengo un familiar aquí, mañana llega, si trata de ser grosero me dice y lo pongo en su lugar...

— ¿Por qué sería grosero conmigo?...

— Porque me odia! y se que me molestará contigo... — Dijo Bruno con expresión seria

— Bueno, trataré de ser amable señor... — Ella se sonrojó y Bruno sonrió

— Por otro lado quiero comentarle algo sin el afán de ofenderla...

— Claro, dígame

— Estamos en un bufete y si ama tanto la carrera y tiene tan buenas calificaciones debieron explicarle que también la imagen es importante...

— Entiendo señor...

— No estoy diciendo que se vista mal, al contrario, pero para un bufete si es muy importante... además mañana tendremos un cóctel aquí mismo, vendra un abogado muy importante de Milán y le haremos un pequeño recibimiento será a las 8 de la mañana...

— Claro señor, yo pondré todo de mi parte para venir de lo mejor...

— Bien, quiero que apoye mucho a Angelo, mañana es de esos días en donde está más estresado...

— Si señor...

— Eso era todo señorita, muchas gracias!

— Con permiso — Dijo ella tímida y salió

Al salir él se quedó muy confundido en su interior, estar cerca de ella le provocaba algo muy raro...

Paso el día y ella se despidió de Angelo y de los cercanos, intento despedirse de Bruno, pero no le pareció apropiado entrar a su oficina solo para eso, además Simón ya estaba afuera esperándola...

Después de unos minutos Bruno salió, iba con un abogado y se percato que ya no estaba Amalia...

— ¿Y la señorita Amalia? — Preguntó a Angelo aún con el otro abogado hablando...

— Ella ya se marchó señor...

— ¿Sin despedirse de mí? — Dijo Bruno levantando la ceja, cosa que escuchó Anna y no le pareció para nada

— Bueno señor, usted estaba en su oficina, además su esposo la estaba llamando aquí a la oficina, ya la estaba esperando... — Respondió Angelo confundido

— Ah, vino su esposo por ella — Dijo Bruno desanimado

— Claro! y es lo mejor, ella no puede andar sola por la calle a esta hora... ¿Es todo señor? — Preguntó Angelo tratando de cambiar el tema, ya que Anna estaba escuchando y él abogado que iba con él se quedó sorprendido

— Sí...

Bruno salió y dejó desconcertado a todos...

Por otro lado Amalia iba en el auto con Simón, él se le quedó viendo raro...

— No me parece nada esto! pero no puedo hacer otra cosa! — Dijo Simón molesto

— Todo estará bien, pero me comentó que te hará un contrato...

— Ya lo imaginaba! no se podía quedar así! maldita sea! — Dijo Simón golpeando el volante

Al llegar Amalia llegó como siempre a su infierno, tuvo que hacer de cenar a pesar de que estaba cansada, pero si pudo notar que al trabajar no tendría que estar tanto sometida con él...

Bruno llegó a su departamento cansado, se acordó de Anna pero también de Amalia, el que no se despidiera de él hizo ponerla a pensar en ella, además recordaba mucho sus ojos y sus labios, Bruno cerraba los ojos y trataba de olvidarse de eso, se aflojó la corbata sentado en el sofá y decidió irse a bañar...

Al día siguiente Amalia se paro temprano y entre sus cosas comenzó a buscar cosas que Simón ya no le permitía ponerse, él se le quedó mirando...

— ¿No pensarás poner eso verdad?... — Dijo enojado

— Hay un cóctel y tengo que ir así, me dijo el señor Darcy...

— Pero ese maldito que se cree?, que va a poner disponer de mi esposa como se le antoje!!! no no irás!!

— Está bien no iré... — Dijo Amalia dejando la ropa

Sin embargo sabía perfectamente que Amalia tenía que hacerlo...

— Está bien, pero escúchame bien! — Dijo el jalandola y apretando su cuello... — Si me entero que lo que quieres es coquetear con alguien, sabes lo que le pasará a tu familia! y no habrás la boca con el tema mío! no digas absolutamente nada de mí! — Dijo apretando aún más su cuello

— No haré nada de eso por favor suéltame! — Respondió Amalia desesperada

Él la soltó y Amalia después de calmarse finalmente se arregló, ella era muy bella y muy sutil, Simón se la quedaba viendo no muy feliz y mucho menos de acuerdo pero no tenía más remedio...

Anna llegó temprano para esperar a Bruno, quién llegó con traje y muy elegante, Angelo ya había llegado para tener todo listo...

— ¿No ha llegado la señorita Amalia?... — Preguntó Leonardo acomodándose la corbata

— No señor, pero la cité a las 8...

— Está bien...

— Bruno! — Dijo Anna

Él sonrió de verla tan bonita, ya era costumbre de Anna ser tan bella...

[ANNA]

[BRUNO]

Simón dejo a Amalia y antes de irse le apretó de la muñeca como gesto de que recordara lo que tiene que hacer...

Ella se tranquilizo para tratar de no llorar, respiró profundo y entro al bufete, inmediatamente vio a Angelo y fue hacia él, Bruno le aviso a todos que ella iba a estar de ayudante, solo Angelo y Anna sabían el verdadero motivo, pero los demás no...

Angelo sonrió e inmediatamente notó lo bella que era...

— Waoh Amalia, ¡Que hermosa estás!

— Gracias!

Al haber llegado ella causo mucha sensación entre los abogados, y entre el persona masculino, los meseros ya estaban entregando copas, Bruno y Anna estaban en la orilla junto a otras personas...

Miró a Amalia de lejos con Angelo, la vio tan hermosa y su mirada se perdió en ella...

[AMALIA]

Tanto que Anna pudo notarlo...

Angelo y Amalia se acercaron con Bruno...

— Señor ya está por llegar el abogado...

— Sí... — Dijo Bueno mirando a Amalia y ella se intimidó

— Buenos días! — Dijo Amalia tímidamente

— Buenos días! — Respondió Anna seria y el otro abogado respondió amable ..

— Hoy le presentare a nuestra psicóloga Aurora — Dijo Bruno a Amalia sin dejar de mirarla

— Si señor ...

Mientras que Angelo sonrió al notar esa mirada de Bruno hacia Amalia...

— Me quedaré con Amalia a recibir al licenciado Aldama — Añadió Angelo

— Sí... esta bien...

— Con permiso! — Dijo Amalia

Ellos se fueron y los ojos de Bruno se fueron con ella...

— La señorita Amalia, o deberíamos decirle señora Clark?... porque ya está casada! y ese es el apellido de su esposo

Dijo Anna y eso hizo que Bruno saliera del trance

— Bueno, yo preferiría decirle señorita, es muy joven aún...

— Hoy se ve muy diferente, ¿Verdad?... se ve muy bonita — Dijo Anna

— Sí, hoy se ve muy diferente — Respondió Bruno sin dejar de verla y sonrió

Anna estaba muy celosa, y cruzada de brazos desearía que Bruno no se la hubiera traído a trabajar

Amalia y Angelo estaban en la entrada recibiendo a la gente que faltaba, en esos momentos llegó Marco y claro inmediatamente notó la presencia de Amalia...

— Señor Marco...

Dijo Angelo

— Hola Angelo, ¿Tenemos nueva abogada?...

Dijo sonriendo coquetamente

— Ella es la señorita Amalia...estará ayudándonos aquí en la oficina y ya después él señor decidirá si le da una oportunidad como abogada...

— Ah, entonces si estudió derecho?...

— Si señor! — Respondió Amalia tímida

— Pues bienvenida, hace mucho tiempo que la empresa no tenía una bella mujer! — En esos momentos que Marco dijo eso, Bruno se acercó con Anna y escuchó todo, cosa que a Bruno no le pareció...

Marco le dió un beso en la mano a Amalia y ella sonrió ladeado un poco incómoda

— La señorita Amalia esta casada, se un poco más respetuoso! — Dijo Bruno

— Mira nada más a quién tenemos aquí, a mi querido primo! — Respondió Marco dándole una palmada en la espalda a Bruno, mientras que Bruno se veía con un aura oscura que todos pudieron notar...