Alejandra ha sufrido mucho y el dolor más grande es haber perdido a su único hijo y con el la posibilidad de volver a quedar embarazada tras tener una vida desafortunada al lado de su esposo Antuan, ¿La vida se encargará de poner todo en su lugar?.... eso lo veremos, acompáñame a ver cómo se desarrolla la historia.
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CAPITULO DIECINUEVE
Al regresar a la cabaña todo era un silencio total.
- niños - dije para romper el silencio - ¿desean algo especial para comer?-
- ¿sabes hacer la torta de carne que hacía mi madre?- dijo Dominic entre sollozos.
- no se si quedará igual, pero puedo intentarlo, ¿les parece?-
- si quieres te puedo ayudar, yo la hice muchas veces con ella - hablo Duvan, quien iba a pensar que detrás de ese niño tan bromista hubiese alguien tan noble que a pesar de su dolor hace lo que sea por sus hermanos.
- está bien, vamos y me guías por favor, si alguien más me quiere ayudar, bienvenidos entre más manos mejor-- dije con un toque de energía para lograr contagiar a los niños.
observé como David y Dominic se miraron y luego se pusieron de pie, Dominic limpio sus lágrimas con las mangas de su camisa y habló.
- yo me encargo de la ensalada, a mamá le gustaba como yo la hacía -
- está bien, me parece perfecto y así aprovechas para perfeccionarla y cuando tú mamá logré salir del hospital se la preparas - le dije y ví como sus ojitos se iluminaron de esperanza, Pero luego eso se esfumó.
- yo espero poder hacerlo - dijo
- mamá va a estar bien, ya verás, confiemos en que así va a ser- dijo David decidido.
- ¿y si no?- pregunto Dominic con la mirada perdida.
- pues los haremos sentirse orgullosos, y aprenderemos a hacer el mejor pastel de carne con la receta de mamá - volvió a hablar David.
Por un momento pensé que la situación se iba a salir de control y perder el poco avance que habíamos logrado, Pero gracias a David los ánimos regresaron y nos pusimos manos a la obra a preparar la receta favorita de Mariana
Afortunadamente e, tenía los ingredientes necesarios para preparar la receta de Mariana y nos pusimos manos a la obra, a pesar de todo lo que está sucediendo en estos momentos los niños hicieron su mejor esfuerzo y se ayudaron mutuamente para terminar el platillo, cuando ya estaba la torta de carne en el horno y la ensalada en la nevera nos pusimos a organizar la cocina,a lavar y a limpiar el desastre que habíamos ocasionado, Duvan como siempre haciendo bromas a sus hermanos logró sacarnos unas cuantas risas, eso ayudo a mejorar los ánimos, terminamos y yo saqué la torta del horno y mientras se enfriaba ellos fueron a tomar una ducha.
Cuando bajaron yo ya estaba acomodando la mesa para cenar, Dominic corrió a la cocina por la ensalada, mientras David traía los platos,Duvan trajo la bebida y luego yo fui a porcionar la torta de carne.
Nos sentamos a comer, pero de repente ví que Duvan agachó la cabeza y comenzó a llorar.
-¿estás bien, paso algo?- pregunté asustada
-lo siento, es que sabe tal cual como lo hace mi mamá -
Todos nos levantamos y nos acercamos a Duvan y lo envolvimos en un abrazo grupal, cuando pudo controlar el llanto cada uno volvió a su sitio y terminamos de cenar.
Los niños se sentaron en la sala a ver una película mientras yo iba a lavar los platos.
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Dos días habían pasado, Fernando no me había dado noticias, era poco lo que él sabía, Mariana estaba con pronóstico reservado, mientras que el resultado de la muestra que le habían hecho a Juan había salido, arrojó que había inhalado cloroformo, esa era la razón de porque David no escucho a su padre, la policía después de recibir los resultados me llamó para poder ver a los niños y tratar de hablar con ellos, yo les pregunté si estaban de acuerdo que la policía les hicieran unas preguntas, ellos no se negaron entonces nos avisaron que unos oficiales venían en camino para reunirse con ellos.
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-buenas tardes--me hice a un lado para darles paso a los dos oficiales a cargo.
- señora Alejandra Cadavid, cómo está- dijo uno de ellos.
- se puede decir que bien, por favor sigan y tomen asiento, ya les traigo algo de tomar mientras los niños bajan-
- muchas gracias - dijeron en coro ambos oficiales..
yo fui a la cocina y serví dos vasos de jugo luego regresé a la sala y les pasé a cada uno su bebida me senté en un sillón al lado de ellos en ese momento los niños bajaron, saludaron y se acomodaron en el sofa.
Yo me levanté y me disponía a retirarme para dejarlos solos pero los oficiales me dijeron que tenía que estar presente ya que los niños eran menores de edad y tenía que haber una un adulto responsable, entonces volví y tomé asiento, ellos comenzaron a preguntar sobre el día de los hechos uno a uno dio su versión de lo que vivieron ese día, David fue el que más habló respecto al incendio, lastimosamente ellos no pudieron ver el rostro de la persona asi que no había forma de que pudieran reconocer o ver de quién se trataba.
Después les preguntaron a los niños cómo habían hecho para que los vecinos se dieran cuenta del incendio a lo cual Dominic y Duvan que eran los que estaban en la puerta dijeron que escucharon a dos personas que iban pasando enfrente de la casa gritando y llamando a los demás en ese momento a vieron que corría hacia ellos Fernando, su vecino y él fue el que derribó la puerta sacó a los niños y subió a intentar rescatar a los padres pero solo pudo sacar a su madre, el no logró ver al papá.
Cuándo los bomberos llegaron fueron ellos los que encontraron al padre dentro de los escombros y es lo único que los niños dijeron que recordaban después de eso los recuerdos son borrosos.
Los oficiales agradecieron que los hubiésemos recibido ese día, no sin antes revelarnos que habían encontrado pistas alrededor de la casa como unas huellas de unos zapatos que no coincidían con la talla del señor Juan, por lo tanto, debían investigar el tipo de calzado y la talla al que pertenecía, lastimosamente como el lugar es una zona boscosa no había posibilidades de cámaras de vigilancia, eso limitaba un poco las labores investigativas pero los oficiales prometieron poner todo su empeño para dar con el culpable.