Forzada Por Mi Jefe Inválido.

Cuando llego a la casa que pronto no será más mi ojo, todo a mi alrededor me siento nostálgica... Me veo entrar aquí por primera vez con Louis sosteniéndome en sus brazos porque él insistía en que teníamos que entrar así para dar suerte, desafortunadamente no lo hizo.

También recuerdo cuando nos asustamos cuando cumplimos tres años de casados y pensamos que estaba embarazada, pero al final fue solo un retraso menstrual común causado por el estrés, ya que yo estaba enfrentando dos turnos en el hospital para acelerar la compra de la casa y tuve que parar cuando enfermé.

Y desafortunadamente me acordé del momento en que yo misma puse el mal dentro de mi casa pensando estar haciendo el bien... Pero no puedo culparla 100%, pues ese canalla confesó otras traiciones. Pero ella fue el punto final y confieso que también la peor de las tradiciones, puesto que es mi prima, mi sangre.

Sigo perdida en los recuerdos hasta que siento una mano en mi hombro y pienso que soy Rolly, dejé la puerta apoyada para que ella pudiera entrar... Pero al levantar mi rostro me levanto rápidamente y corro lejos. 

- ¿Qué estás haciendo aquí? ¡No he retirado la medida de protección! ¡No puedes acercarte a mí! ¿Quieres ir a la cárcel?

— Yo fui un imbécil... ¡Solo quería verte y ver el lugar donde fui feliz y no lo sabía! Quería tanto que me perdonaras y me dieras otra oportunidad... ¡Te amo tanto, Maya!

- ¡No te me acerques! ¡Escuchaste a la policía, ella dijo que la próxima vez te caería un año o más!

- ¡Es una pena que lo que hice esa noche no fuera suficiente para que te quedaras embarazada de nuevo! ¿Pero siempre hay una oportunidad? ¿No es así, amor?

— ¿Louis, tienes un arma? ¿De dónde sacaste esa arma? ¡No hagas algo que vaya a empeorar las cosas! - ¿Ya está cerca de mí? Mirándome a los ojos dice mientras pega los labios a los míos;

- ¡Aunque sea mi último momento contigo, quiero que sea el mejor! ¡Especialmente si es aquí donde fuimos una familia... ¡Tan felices!

Cuando mi desesperación grita desesperado escucho la voz de Rolly;

— ¿Hola? ¿Eres de la policía? ¡Sí, quiero denunciar una invasión seguida de acoso y violación de medidas protectoras! ¡El nombre del tipo es Louis Brandon y está armado aquí en la casa de mi amiga que es su ex esposa!

- ¡Tú, desgraciada, entrometida!!! ¡Eso no va a quedar así! - Miro a Maya y digo; - Nos encontraremos de nuevo, amor!

Veo a Louis correr como un loco y me caigo al suelo mientras mil cosas pasan en mi mente, grito de agonía y desesperación... Rolly corre hacia mí y me abraza diciendo:

- ¡Calma, amiga! ¡Él ya se fue! ¡Tenemos que hacer lo que vinimos acá para hacer, quédate de pie porque sé que tú eres fuerte para eso!

- Tenemos que hablar.

Le hablo mientras me limpio las lágrimas de la cara. 

— Bruce, se ofreció a prestarme el dinero de la compra del apartamento y yo podré pagar por mes hasta que el dinero de la venta de la casa salga y yo pague el resto. ¿Qué te parece eso?

- ¿Cuándo vas a darle una oportunidad a este hombre, Maya? ¡Porque no soy idiota y ya me dijiste que le gustas y vas a tener que casarte con él!

— ¡No quiero hablar de eso! ¡Respóndeme lo que te pregunté! - Lo digo mientras me alejo de ella para montar la primera caja y empezar a empacar mis cosas.

— ¡De acuerdo! Podemos pagarle juntas mientras el dinero de la venta no salga... ¡Voy a respetar tu momento, pero quiero que sepas que si esperas demasiado vas a perder a ese hombre que parece ser un ángel enviado del cielo!

— Te diré algo que oí decir a mi madre una vez cuando tuve mi primera pelea con Louis y pensé que no volveríamos... Lo que tiene que ser tuyo, puede pasar el tiempo que sea tuyo, ¡Si Dios quiere! ¡Lo único que puedo decirte ahora es que no estoy lista para entregar mi corazón a nadie! Quiero juntar mis pedazos sola, quiero pegarlos y arreglarlos uno a uno yo misma para cuando llegue al frente poder mirar atrás y decirme a mí misma... ¡Lo hice! ¡Gané! ¡Sin tener que apoyarme emocionalmente en nadie!

— No estoy de acuerdo... ¡Pero te admiro! ¡Te voy a dar fuerza incluso si no está de acuerdo! ¡Vamos a trabajar y chismorrear porque eso es lo que tenemos que hacer! ¿Cómo van las cosas en la casa del guapo?

- ¿Rolly? - Me mira y se ríe... 

- Pasó algo. - Digo envolviendo mi lámpara favorita que era de mi madre.

- ¿Me vas a matar de curiosidad, Maya?? ¡Habla ya mujer!

- ¡Solo 1 minuto! ¿No estabas en una llamada con la policía cuando llegaste aquí? ¡Van a llegar y ya se fue!

— De hecho... ¡No había marcado nada! ¡Sé que fue arriesgado, pero cuando lo vi pasar el arma sobre ti me puse nerviosa y con miedo de que me tomara mucho tiempo contestar y tuve que intentar algo! ¡Qué bueno que funcionó!

- ¿Sabes que él puede estar ahí afuera ahora esperando una oportunidad para entrar, no? - Mientras hablo corro hasta la puerta y la cierro con todas las cerraduras que tiene.

- ¡Puede que esté ahí fuera, pero voy a dejar el número de la policía en la marcación rápida de mi teléfono! - Dice Rolly parpadeando para mí.

- ¡Ven loca, vamos a empacar porque tenemos que hacer lo mismo en tu casa todavía! - Y ella viene agitada a mi lado y habla;

— ¡Ahora puedes decirme qué pasó en la casa del guapo o voy a hacer huelga de empaquetado! - Me siento en el sofá y cruzo los brazos y piernas haciendo un enorme pico y ella sonriendo se sienta a mi lado y comienza a hablar;

— ¡Dormí en la cama de Bruce otra vez! ¡No vengas pensando tonterías! ¡Creo que soy sonámbula! Dormí en el sofá y me desperté en su cama... ¡Juro que estoy tratando de entender lo que pasó!

- ¡Incluso tu subconsciente sabe que él es lo mejor para tu vida y tú no, Maya! ¿Pero, qué pasó? ¿Dijo algo?

— ¡Gracias a Dios, no! ¡Le di un remedio para el dolor que lo deja somnoliento y creo que unió el cansancio de los ejercicios de fisioterapia con el efecto secundario de la medicina y lo hizo dormir duro! No se da cuenta de que me acosté con él... Y en realidad me sentí cómodo y dormí muy bien.

- ¡El deseo de golpearte es grande! Amiga, desearía que pudieras ver con mis ojos lo que veo en ti.

- ¡Rolly, no sé de qué estás hablando! ¡No pongas cosas en mi cabeza!

- ¡Sigue mintiéndote entonces, Maya! 

Volvemos nuestra atención a las cajas y pasamos el resto de la noche envolviendo y empaquetando cosas.