La Trampa

Al siguiente día, estaban Aossi y su mamá platicando en la cocina cuando le comentó que la había estado llamando pero que nunca responde. Fue entonces cuando se acordó que desde que lo recibió nunca puso a cargar el celular.

Margarita: Hija, cuándo vas a tirar ese viejo teléfono, vamos al centro comercial y te compro el modelo más reciente de la marca que quieras…

Aossi: Ah, sobre eso… se me olvidó decirte que un tipo raro me tiró el otro día mi telefonito y se rompió, pero… (iba a decirle del nuevo equipo, aunque lo pensó mejor) Sabes qué… sí vamos a la tienda, así elijo uno a mi gusto y cancelamos el número anterior.

Al salir del Centro Comercial se encontraron con Fred, quien también le dijo que la había estado buscando por la fiesta en la playa, en cuanto su mamá escuchó las palabras “fiesta” y “playa” la animó a ir, la chica sabe que si su madre se empeña es capaz de llevarla ella misma al sitio, así que decidió seguir a su amigo.

Aossi: Dime la verdad… te mandaron específicamente por mí.

Fred: Sí, mi hermano es el mejor amigo de ese tipo y al parecer quiere proteger su reputación, así que me pidieron buscarte porque no te han podido localizar.

Aossi: (Suspira) Esta vez se los paso porque el celular se descargó y lo voy a dejar así, justamente vine con mi mamá a cambiar de equipo y número, no quiero tener más contacto con esa gente.

Fred: (Apenado) Amiguita, mi hermano me prometió conseguirme una cita con la persona que me gusta si te convenzo de que lo ayudes… por favor, por favor… por favooor.

Aossí: (Mirándolo con reticencia) ¿Qué me darás?

Fred: Seré tu esclavo por un mes. Si lo deseas haré tus tareas y conseguiré los materiales cuando se te olviden, por favor amiguita… es una cita… sabes que no puedo perder esta oportunidad.

Aossi: (Sabiendo cuánto sufre su amigo por ese amor no correspondido) ¿Tantas ganas tienes de tener una cita con esa persona?

Fred: Sí, por favor amiguita… Es más, no seré tu esclavo por uno, sino por dos meses… tres meses… pliiiiis…

Aossi: (Suspirando) Pero tu hermano tiene que pagar también, y de él lo quiero contante y sonante… así que avísale antes de que vayamos y si no acepta el pago entonces no hay trato.

Rápidamente Fred llamó a su hermano quien aceptó pagar la cantidad solicitada por la chica, así que acordaron reunirse en la entrada del estacionamiento cerca de la playa para que ella pueda entrar con Xante, pero les advirtió que hasta no ver que llega el pago no va a hacer nada.

En cuanto se vieron, Omar le pidió a la chica el código de su celular para poder hacer la transferencia del dinero y tras quedar todo listo llegó Xante, quien quiso tomar de la mano a la chica, pero ella le pidió su chamarra y tras ponérsela dijo que podían seguir, pero no aceptó el tacto del chico.

Como muchas fiestas de su tipo, hubo juegos y cosas en las que Aossi no participó porque no sabe jugarlas y tampoco le interesa mucho, pero tuvo que acercarse cuando Xante y sus amigos estaban jugando voleibol para simular un interés en su “novio”.

Estando en eso, llegó Aileen, su hermanastra, quien en cuanto vio a Xante se pegó a él como lapa, lo cual la ponía incómoda, pues si a esa chica le interesa su “novio” definitivamente no vale la pena, y lo que más le desilusionó es que él tampoco hacía mucho para apartarla, así que definitivamente es un tipo basura.

El resto de la tarde pasó igual, así que fue hasta donde estaba Fred y le dijo que devolverá el dinero a su hermano, pero ya quiere irse.

Su amigo conoce los problemas que las hermanastras así que fue a hablar con su hermano, sólo aclarando que debido al despliegue de amor entre Xante y Aileen, Aossi no piensa meterse en problemas ajenos.

Al darse cuenta de la situación, Omar les pidió quedarse una hora más y corrió a hablar con su amigo.

Omar: ¿Qué haces hermano? Aossi está por irse…

Xante: (Con cara de fastidio) Aghh. No me digas que se puso celosa.

Omar: No tienes la menor idea, ¿verdad? Xante, la diosa de la Escuela es la hermana de Aossi, ¿cómo crees que quedará ella cuando diga que es tu novia, pero has estado coqueteando toda la tarde con Aileen?

Xante: No inventes… (desesperado) dile que aguante una hora más. Voy a provocar a Johan para que se cumpla la condición de la apuesta y quede ya todo cerrado.

Omar: Bueno, pero no tardes más, yo creo que Aossi debe estar más que enojada y se va pronto.

Xante fue corriendo con Johan para sugerir cumplir la apuesta, así que dio inicio el juego de verdad o reto, por lo que llevó a Aossi a sentarse junto a él, aunque a su izquierda Aileen tomó asiento. Tras un par de rondas del juego les tocó el turno de participar.

Johel: Tienes cara de que te encanta la verdad… así que no te pondremos reto. Sólo debes decirnos ¿estás enamorada de alguien?

Aossi cerró los ojos, respiró profundo y, tras mirar al suplicante Fred, sólo dijo mirando hacia Xante: ¿Estás seguro de que debo decirlo en voz alta?

Esto dejó más que desconcertado a Xante, quien vio que la chica luce como una dulce y etérea hada que puede desaparecer si hace lo incorrecto. La chica tocó suavemente su mano y él sintió como si una corriente eléctrica recorriera su cuerpo, transportándolo a un cuento de hadas o a otra dimensión y no pudiera más que besar a ese dulce ángel.

Xante: Está bien, dilo.

Aossi: (Dirigiéndose al grupo) Bueno, creo que es más que obvio por quién estoy aquí. (Mirando hacia el chico) Te amo Xante.

Un grito fuerte salió de todos los presentes, aplaudiendo y diciendo que el muchacho es un crack. Pero a Aossi no se le pasó por alto una señal que Aileen hizo hacia Johan, quien volvió a girar la botella que, casualmente, esta vez apuntó hacia su hermanastra.

Johan: Vamos con la bella diosa de la Escuela de Negocios, a ti te pondremos un reto que muchos queremos ayudarte a cumplir… sólo tienes que besar por un minuto completo a un caballero de los presentes, elige al que más te guste.

Inmediatamente, Aileen sonrió y tomó la cara de Xante y le dio un beso en los labios, que poco a poco se fue profundizando más. Como si estuviera más que ofendida, Aossi simplemente se quitó la chamarra y se la arrojó al muchacho, quien solo se quedó viéndola, pero no apartó a Aileen de sus labios.

Aossi se fue corriendo del sitio, seguida por Fred, a quien le dijo que su hermano le debe volver a pagar y esta vez será el doble porque, tras de que tuvo que decir que le gustaba el payaso de su amigo, tuvo que soportar la humillación de ser dejada medio minuto después.

Fred hizo lo que la chica le pidió y se sorprendió de que su hermano realmente depositó el doble del dinero solicitado al inicio y le mandó un mensaje ofreciendo disculpas por todas las molestias y agradeciendo su ayuda. Ella sólo le respondió prohibiéndole darle su número de teléfono a su amigo y le aclaró que no quiere volver a verlos.

Un muy apenado Omar le aseguró que él no dará la información a Xante y sólo le enfatizó que él no es igual a su amigo. Afortunadamente, ambos cumplieron su palabra.

Lo malo es que Aileen cada que se encontraban –que afortunadamente no son muchas ocasiones—presumía que Xante está muy enamorado de ella y que la mima mucho. Sin saber, claro, que a Aossi le importa esa información tanto como que el día está soleado en Timbuktú, así que simplemente se mantiene en silencio y la deja ser.

.

.

.