NovelToon NovelToon
Rompiendo Reglas

Rompiendo Reglas

Status: Terminada
Genre:Aventura de una noche / Amor a primera vista / Reencuentro / Poder equitativo / Apoyo mutuo / Amor eterno / Completas
Popularitas:1M
Nilai: 4.9
nombre de autor: Tamara Gallo

Un amor casi imposible, donde uno le huía por seguridad y el otro le seguía sin cesar hasta que se cansó.
El profesor de filosofía, serio y tranquilo, se dejó llevar por la pasión que despertó una torta afrodisíaca junto a su "Rusita" sin saber que hubo consecuencias. Al sentirse abandonado y buscarla, sin éxito; decidió disfrutar de extensos viajes para olvidarla.
Ella disfrutó la mejor noche de su vida, teniendo que huir en la mañana, llevándose consigo un pedacito de él. Pero por problemas familiares, demoró en volver a España.
Ahora deben bautizar a su ahijada e inevitablemente, volverán a verse... ¿Qué pasará? ¿Sus sentimientos seguirán intactos? ¿Qué dirá Isaías cuando sepa el secreto de Eliani?

NovelToon tiene autorización de Tamara Gallo para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.

Amenazas

Un día más, otro despertar, la misma acción y misma realidad, no hay mensaje.

Solo me queda suspirar con pesadez y esperar el tiempo que sea necesario, ya que hay pocas opciones; el destino la pone delante de mí o llegará alguien más. Pero, no volveré a buscarla, no debe ser así, ha sido un año sin descanso en su búsqueda con resultados negativos.

Paso mi mano por la cara y luego despeino mi pelo. Me levanto sin mucho ánimo y me dirijo a la ducha.

Algunos minutos más tarde, bajo con mi mochila a desayunar, pero esta vez no hay nadie en el comedor, por lo que me toca estar solo.

Una empleada trae café y lo bebo con tranquilidad. Al terminar, agarro mis cosas y voy a la moto, ya que debo ir a dar clases.

El camino parece casi desolado y es raro en un horario tan movido como es normal todos los días, puesto que muchas personas entran a estudiar o trabajar.

Freno en un semáforo que prohíbe el paso y espero hasta que me lo conceda, pero mi celular empieza a sonar en una llamada, la cual dudo contestar al no conocer el número, por lo que corto y sigo mi recorrido cuando el semáforo me lo permite.

Llegando al colegio, estaciono en mi lugar y me quito el casco para empezar a caminar. Sin embargo, el celular vuelve a sonar y al observar la pantalla, veo el mismo número anterior, pero esta vez decido contestar por su reciente insistencia.

📱¿Quién habla?— pregunto con el ceño fruncido.

📲¿Isaías Belmonte?— responde un hombre  con su voz gruesa y un acento ruso muy notorio.

📱¿Quién pregunta?— vuelvo a indagar.

Ni un ruso, por ningún motivo, debería de llamarme.

📲 No te imporrta— menciona haciendo énfasis en la "r" —Esperro que seas responsable con lo que te corresponde. Si no, ya verrás lo que te harré.

📱No sé de qué habla. Sea directo—pido mirando a diferentes puntos de las calles que tengo en frente.

📲 Cuando ella lo decida, lo sabrrás— vuelve a dejarme con la incógnita y corta la comunicación.

"¿Quién se supone que es ella?"— pienso.

Bueno, podría tomar en cuenta la obvia información; si el hombre es ruso y me amenaza, podría tener parentesco con mi rusa, aunque todavía no entiendo qué quiso decirme o de qué debo hacerme responsable.

Miró al cielo y guardo el celular en el bolsillo de mi pantalón, pensando una sola cosa...

"Rusita, ¿hay algo que deba saber?"

Un suspiro vuelve a salir de lo más profundo de mi alma y es una acción inconsciente tan recurrente que creo mejor cambiar mi vida para pensar en otra cosa, lo que sea, pero no en ella.

Aprieto con fuerza el casco que tengo en mi mano y sigo camino para ingresar al instituto.

—Buenos días, profesor Belmonte— saluda una de las mujeres más jóvenes aquí.

—Buenos días, profesora— digo educadamente aunque no simpático, y sigo de largo.

No recuerdo el apellido de la señora, pero tampoco me interesa. Quiero evitar malos entendidos o que piensen que he roto la regla del colegio.

Aquí, ninguna de estas mujeres, me llama la atención. Ni siquiera me han despertado un mal pensamiento.

Entro al salón, les doy clases normalmente y en hora de intervalo, descubro que la profesora está esperando en la puerta.

—Profesor...— dice sonriendo.

—Dígame, profesora— me cruzo de brazos esperando sus palabras.

—¡Dios!— exclama mirando esa zona.

—¿Disculpe?— alzo una ceja e inclino un poco mi cabeza. Me resulta increíble, irónicamente, que una mujer se sienta atraída por un chico que es diez años menor.

—¿Acepta un café?— se atreve a preguntar mientras muerde su labio inferior.

—Profesora...—hago silencio al no recordar ni siquiera qué materia da— No me permito simpatizar en mi trabajo.

—Iremos a la cafetería que está a tres cuadras de aquí— explica y niego con la cabeza.

—No romperé las reglas que impone mi trabajo y eso no solo es dentro, sino fuera. No me relacionaré con ninguna persona que trabaje aquí— aviso y ella asiente.

—Por eso me atraes— confiesa— Eres directo, serio, inteligente, sensual y todo un chico malo. —Me sorprende con cada palabra— Entonces, de ser así, me toca renunciar.

—No haga eso. Será inservible—digo con franqueza. La mujer no me parece bonita.

No es ella, no es mi rusa; no tiene ni un pelo igual.

—Solo tengo 35 años y tú, ¿qué? ¿25?— dice despectiva. Supongo que la he lastimado con mi rechazo.

—Lamento mis sinceras palabras—menciono sin retractarme— No me interesa su invitación, profesora.

No le diría cuantos años tengo, no sé si esa era su intención al preguntar, pero creo que sí.

Tener 23 años y ser profesor recién graduado, no me hace idiota. Puedo imaginar a donde podrían llegar sus invitaciones e insistencia.

No sería la primera mujer que se acerca a un Belmonte con ganas de ser importante y por eso es que nos gustan las complicadas, esas a las cuales hay que perseguir para conquistarlas.

—Recuerde mi nombre, profesor— se señala a sí misma enojada— porque le haré conocer el infierno.

La segunda amenaza en menos de tres horas, que bonito día.

—No lo recuerdo. Refrésqueme la memoria— digo sinceramente para hacerla estallar en furia.

No soy tan malo, pero tampoco soy un santo. Puedo tener una lengua filosa cuando es necesario y dar miedo en ocasiones. Como una vez que junté a todos los perros de la familia Belmonte y advertí a mis cuñados, Pascal y Antonio.

—Roxana Vidal— dice alzando su mentón— Profesora de Historia.

—Trataré de guardarlo en mi memoria.— sonrío de costado y ella se va, dejándome respirar.

Para mí desgracia, esa mujer ha tomado los pocos minutos que tenemos libres, para molestarme, así que los niños vuelven a su salón y les doy su segunda hora.

1
Nancy Scheherezada Perez Perez
Linda novela, un amor que lo supero todo. Felicitaciones autora, y la novela con la historia de Federico, como se llamara?
Nancy Scheherezada Perez Perez
Los señores y sus esposas bellos y la abuela una dama muy distinguida y bella. En esa familia todos son bonitos jajaja
Nancy Scheherezada Perez Perez
Parece muñeco, es hermoso
Nancy Scheherezada Perez Perez
Ha estado muy buena la novela, pero nos debes como comenzó H con Paola
Nancy Scheherezada Perez Perez
Estos dos parecen conejos, están recuperando el tiempo perdido jajaja
Nancy Scheherezada Perez Perez
No que bloqueó a esa desvergonzada? Como le manda mensajes entonces?
Nancy Scheherezada Perez Perez
Me encantan estas novelas donde hay muchos hijos y siguen la historia los descendientes
Nancy Scheherezada Perez Perez
Jajaja, es una buena oportunidad para disfrutar en familia
Nancy Scheherezada Perez Perez
Jajaja y se va a olvidar de Amadeo
Nancy Scheherezada Perez Perez
Pobrecito, se nota que no tiene experiencia. Lo hace todo muy lento jajaja
Nancy Scheherezada Perez Perez
Ay esos primos son de temer, son muy intensos jajaja
Nancy Scheherezada Perez Perez
Que rápidos y fogosos son este par jajaja
Nancy Scheherezada Perez Perez
Que pena autora, siempre que se va un ser querido nos deja un vacío emocional, pero siempre la tendremos en nuestro /Heart/
Nancy Scheherezada Perez Perez
Que pena por ti autora, siempre que se va un ser querido nos d
Nancy Scheherezada Perez Perez
Se ve muy bella. Ese bebé debe ser realmente hermoso
Nancy Scheherezada Perez Perez
La amenaza del ruso y los antojos son por el embarazo de Eliani. Ya es papá. Me gustaría haber leído la novela anterior o quizás lo hice pero no recuerdo
Maria Kupke Probst
Maravillosa como todas las otras que he leído tuyas. Con mucho humor y amor me encantó. Voy por más. Felicitaciones
Maria Kupke Probst
Para la ley Emilio sigue casado con Eliani Alvarado. Al ella cambiar de apellido no deberían anular ese matrimonio? Porque si se casan de nuevo él sería bigamo.
Maria Kupke Probst: Si. Me equivoque de nombre. Es Lady quien se casó con Emilio. Cuando me di cuenta no pude cambiarlo. Ya lo había enviado.
Batichica🖤 TG: Emilio nunca estuvo casado con Eliani... ese sería Isaías
total 2 replies
Tere Jimenez
gracias
Tere Jimenez
gracias por compartir tu novela
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play