Amelia , Mi Amada Cuñada

Amelia casi no pudo dormir esa noche, su tía Agusta la regaloneo llevándole el desayuno a la cama.

Tía Agusta- cariño pudiste dormir .

Amelia- muy poco, por más que lo intente.

Tía Agusta - a mi me paso lo mismo cuando me case, eran muchos sentimientos encontrados a la vez, amaba mucho al que sería mi esposo, pero tenía tristeza por dejar a mis padres y hermanos. También estaba muy nerviosa por la boda, todos estarían pendientes de mi, tenía miedo a caerme mientras caminaba al altar, pero también tenía mucho miedo y vergüenza de estar íntimamente con mi esposo, en esa época a una mujer no le decían mucho de sexualidad y uno por ignorancia llegaba muy mal preparada a ese momento.

Amelia- justamente así me siento yo tía, pero además temo que mis miedos producto del ataque de ese hombre me delaten.

Tía Agusta- tú decidiste no contarle nada a Rubén, ahora ya es tarde hoy te casas y debes seguir adelante. A lo mejor, no te sucede nada .

Amelia- el sacerdote y usted me dijeron que yo no era culpable de lo sucedido, pero igual siento que no hago lo correcto.

Tía Agusta - cariño, lo hecho, hecho está, así que ahora come porque te espera un gran dia y hay muchas cosas que hacer, te casas a las cuatro de la tarde y ya son las nueve de la mañana, tu madre está muy nerviosa y está en la cocina revisando todo.

Amelia- mi pobre madre ha tenido que trabajar tanto por mi culpa.

Tía Agusta - lo hace por amor, así que no te preocupes.

El dia transcurrió entre mucho nerviosismo y gritos, pero cerca de las tres de la tarde Amelia estaba vestida con su bello traje de novia ante su familia.

Madre de Amelia- hija estás preciosa, pareces una princesa.

Padre de Amelia- será un honor entregarte este dia, espero que tengas una vida muy feliz junto a Rubén .

Amelia- gracias padres por haberme cuidado todos estos años, por su cariño y por darme su amor.

Los tres se abrazaron muy emocionados casi llorando.

Tía Agusta - nada de llantos hoy es un dia de felicidad, vamos saliendo para la iglesia o llegaremos tarde.

Ana no se acercó a saludar a su hermana como lo hicieron su familia y sirvientes, se mantuvo distante Amelia en el fondo también se sintió más cómoda así, estaba tranquila porque ella sabía que Ana no amaba en verdad a Rubén, solo se encaprichó con él para hacerle daño.

La familia partió en dos carruajes, en el primero iba la madre de Amelia, Ana, Javier y la Tía Agusta. Diez minutos después salió la novia y su padre .

Cuando la familia de Amelia llego a la iglesia estaba llena de invitados, Rubén estaba tan nervioso que caminaba de un lado hacia otro.

Madre de Amelia- Rubén entremos Amelia llegara en unos minutos.

Rubén - está seguro.

Tía Agusta - vienen detrás de nosotros en otro carruaje, así que cálmate.

Madre de Rubén- entonces entremos a esperar a la novia.

Todos entraron a colocarse en su lugar .