NovelToon NovelToon
“Historias De Caballeros Móviles: El Vuelo De Antonieta”

“Historias De Caballeros Móviles: El Vuelo De Antonieta”

Status: En proceso
Genre:Autosuperación / Reencarnación / Villana / Duque
Popularitas:463
Nilai: 5
nombre de autor: Aramisss

Antonieta, una joven noble de catorce años, vive atrapada entre las estrictas reglas de la alta sociedad y su pasión secreta: volar en un caballero móvil. Mientras se prepara para cumplir con su rol como dama y conocer a su prometido, entrena en secreto para dominar la tecnología que le permitirá surcar los cielos. Pero no todos están dispuestos a aceptar su sueño, y Antonieta deberá decidir si seguir las normas o romperlas para volar libre.

NovelToon tiene autorización de Aramisss para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.

Capítulo 19: “El Inicio del Silencio”

[Interior – Dormitorio de Richard – Noche]

Richard estaba en su cama, mirando el techo. No sentía culpa. Tampoco pena. Eran cosas que ya no le pertenecían. Él vivió su novatada.

Todo ocurrió años atrás, cuando ingresó por primera vez. Estaba en esa misma habitación, solo. Entonces, los alumnos mayores lo arrastraron hasta el lago. A diferencia de Antonieta, su generación tuvo que enfrentarse entre sí. Él recuerda cómo uno de los disparos, a pesar de ser controlado para no ser letal, falló. Desde ese día, aquella persona tuvo que caminar siempre con muletas.

Richard se sentó en la cama, observó a su alrededor y luego a su hermana, dormida, aunque su cuerpo aún temblaba por los espasmos de recuperación neuronal.

Richard (pensando):

—No importa cuántas veces lo recuerde... no siento culpa. ¿Puedo siquiera sentirla? Ni siquiera fui yo... solo dejé que se la llevaran...

—...creo que eso sí es culpa.

En ese momento, alguien golpeó la puerta. Richard se movió rápidamente, tomó el revólver oculto bajo su cama y se acercó.

Al abrir, encontró a Rosaria, seria, acompañada de Vasily, quien echó una mirada al interior del dormitorio, observando a la joven en la cama.

Richard:

—Rosaria…

Rosaria:

—Necesitamos hablar.

Vasily:

—¿Es tu hermana?

Richard:

—Sí.

Rosaria:

—Extraño…

Richard (indiferente):

—Cosas de Helior, supongo.

Salió del dormitorio cerrando con cuidado la puerta tras él.

Rosaria:

—¿Recuerdas al chico que terminó lesionado por un disparo durante tu novatada?

Richard:

—Sí.

Rosaria:

—Pues su hermano menor fue quien pilotó el Rusty que se enfrentó a tu hermana.

Vasily:

—Y también resulta ser un infiltrado de los rebeldes.

Richard (serio):

—¿Qué necesitan que haga?

Vasily:

—Hablar con él.

Richard:

—¿Dónde?

Rosaria:

—En su dormitorio.

Sin más palabras, Vasily comenzó a caminar. Richard lo siguió junto a Rosaria.

Rosaria:

—¿Dejarás que tus demonios te atormenten, Richard?

Richard:

—No.

[Interior – Dormitorio – Noche]

Hannibal custodiaba a un joven de cabello oscuro y apariencia frágil, encadenado a una silla. Mientras esperaba que despertara, buscaba entre sus pertenencias, sin encontrar nada revelador.

Joven (despertando):

—¿D-dónde… estoy?

Hannibal (sin dejar de revisar):

—En tu dormitorio.

Joven:

—¿Por qué revisan mis cosas?

Hannibal:

—Porque creen que eres un espía. Cuando te derribaron, quedaste inconsciente y encontraron una carta. Luego, en tu habitación, hallamos un libro con entradas bastante sospechosas…

Joven:

—¿Cómo cuáles?

Hannibal (serio):

—Bombas.

Joven:

—Debajo de mi cama… hay una caja negra. Casi invisible.

Hannibal dudó, pero se acercó con precaución. No era una trampa. Dentro encontró cartas. Reconocía esa letra: el mentor de su madre, el actual líder de la rebelión —Atlas Leford.

Joven (riendo débilmente):

—¿Impactado, hijo de la primera concubina?

Hannibal:

—¿Por qué mostrarme esto?

Joven:

—¿Por qué no? Lee la última carta cuando lleguen tus amigos. En voz alta.

Hannibal:

—¿Y por qué haría eso?

Joven:

—Créeme, esta vez... el enemigo no son los débiles al poder.

La puerta se abrió. Rosaria, Vasily y Richard entraron. Vieron a Hannibal con una carta en la mano, mientras el joven permanecía tranquilo, como si supiera que nada podrían hacerle.

Hannibal (leyendo):

—"Estimado príncipe Vasily y Hannibal.

Solo diré que no estamos del lado de la Cruz Negra, pero tampoco los dejaremos actuar libres. Propongo una alianza.

Si aceptan, Reginal O’Donnel les indicará qué hacer. Si no, tiene órdenes de resistir todo intento de obtener información."

Reginal:

—Yo tampoco estoy contento con esto, pero sabemos que, si dejamos a esas plagas seguir, tarde o temprano todos moriremos.

Rosaria:

—¿Confiar en un rebelde? Propongo matarlo. Lo que sepa, lo descubriremos igual.

Hannibal:

—Aceptar el trato sería más sensato… Hace horas acabamos con espías de la Cruz Negra. ¿Quién sabe si hay más?

Vasily:

—Es una carrera contra el tiempo. Mejor tener algo que empezar de cero.

Rosaria:

—Es una pésima idea.

Richard:

—Puede ser. Pero como dijo Vasily... tiempo es lo que no tenemos.

Rosaria:

—¡Nos arriesgamos a una traición! ¡Y si sabe tanto, por qué no lo dijo antes?

Reginal:

—Claro, como si pudiera entrar diciendo: “Hola, soy un rebelde con información de bombas estratégicamente colocadas. Necesito ayuda para desactivarlas”.

Todos lo miraron. Rosaria cruzó los brazos.

Rosaria:

—Explícate.

Reginal:

—Yo y otros cuatro estábamos investigando instalaciones vulnerables de la academia y buscando aliados. Encontramos a un espía de la Cruz Negra, lo neutralizamos… pero perdimos a uno de los nuestros.

Luego descubrimos que había más bombas, aunque no sabemos cuántos agentes siguen activos. Yo soy el único rebelde aquí.

Richard:

—¿Y tus compañeros?

Reginal:

—Silenciados en Lethermont. Uno logró activar la alarma antes de morir. Gracias a él logré llegar aquí como un simple estudiante.

Vasily:

—Lo hicieron para alertar… pero también para borrar a quienes sabían del plan.

Hannibal:

—¿Y por qué no detonaron las bombas cuando atacaron Lethermont?

Richard:

—¿Y si era para sembrar miedo?

Rosaria (consternada):

—La destrucción de Lethermont pondría a todos en alerta. Uno o dos días después, el instituto explotando… y luego otro…

Vasily:

—Un reino entero en paranoia, sin saber si serán los próximos.

Hannibal:

—Digamos que aceptamos… ¿qué nos asegura encontrar todas las bombas?

Reginal:

—Solo deben encontrar el lugar donde está el detonador principal.

Richard (seco):

—Necesitamos hablar con el director.

Nadie dijo nada más.

Este fue el inicio de una alianza silenciosa.

1
Maria Teresa Villarreal Rodriguez
Me ha gustado mucho tiene mucha imaginación. Lo que no me agrado es que esta en pendiente. Es como un cómic para niño pero muy interesante felicidades espero que sigas tu trabajo adelante no metas muchos personajes se pierde uno con muchos.
Maria Teresa Villarreal Rodriguez
pensé que eran aviones, grande imaginación
nombre re: Gracias por el comentario
total 1 replies
nombre re
Rumores en que historias no existen /Smile/
Himura Kenshin
Quiero compartirlo
nombre re: Adelante
total 1 replies
tao shin
Tu estilo es impresionante.
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play