TU AMOR ME DEVOLVIO LA VIDA

La noche ha caído, una delicada y delgada línea curva en la noche ilumina tímidamente la manada, en especial la ventana de Génesis Gold, duerme tranquila, es poseedora de una inigualable belleza.

A su lado en la cama, Darius, el Alfa, la observa con ansiedad, su corazón cada vez se acelera más. Acaricia el pelo de su amada, su cabeza de el pecho de él, se mueven al tiempo de su respiración.

Espera que despierte.

Génesis abre poco a poco los ojos, el aroma se su mate se hace presente, la felicidad llena por completo su corazón.

-- Es lo mejor música que puedo escuchar, los latidos de tu corazón.

Al decir esto sorprende al joven, le abraza con fuerza.

Darius comienza a llorar en silencio y le da muchos besos en todo su delicado rostro la chica, ella, cierra los ojos, se deja querer sonriendo. Cuando se detiene, limpia las lágrimas con sus besos.

--¡Ahora sólo seremos felices!

El chico la toma de las manos y las besa, después su rostro, por último da un delicado, suave, tierno y largo beso en los labios.

--¡Así será!

La luna es testigo, observa a sus hijos felices, se dan muchos besos, sonrientes, ve lo enamorados que están, ha cumplido su promesa, les permitio reunirse nuevamente para disfrutar de su amor y su reinado.

Darius toma Génesis de la mano.

--Vamos tengo muchas cosas que contarte, pero vamos a mi mansión.

--¿En dónde?

Génesis hacia un mapa mental, conocía la manada palmo a palmo y no daba con el sitio.

-- Yo te guío.

-- ¿Te sientes bien?

--¡Como nueva! Dame unos momentos, deja que me duche.

Darius le ayuda a ponerse de pie y la abrasa, por cintura.

--Podrías hacerlo en casa.

Hace un puchero, el futuro rey de los alfas, se muetra tierno con su amada.

-- ¡Vamos! ¿Y mi nana?

-- Ella te está esperando abajo.

De su clóset saca un abrigo, la cubre, aún está en pijama.

Le toma del pelo con cuidado, lo alisa con sus manos, se inclina, le pone el calzado deportivo y después el suyo.

Bajan tomados de las manos y irradiando felicidad por todos los poros.

Llegando a la sala, Génesis ve los cambios en la mansión, a sus seres queridos.

Se suelta de su agarre, los abraza a todos.

Cuando se acercan a saludar a Dylan y al Beta Osvaldo, se alcanzan a escuchar gruñidos amenazantes, estos bellos personajes lo hacen rápidamente, no tienen la intención de molestar a su Alfa.

-- Lo siento amigos, es mía, ya habrá tiempo de pláticas, ella está bien.

Sin dar tiempo a nada la toma entre sus brazos y sale con ella.

Todos sonríen, retirándose a sus deberes.

Al salir de la mansión toman su forma lobuna, la guía hasta el lago cruzan el puente colgante y se detienen a jugar bajo el árbol del "Amor eterno". Dando un suave mordisco, a jala por la pata, tirándola con suavidad. La gira para que quede boca arriba, Thanatos languetea el rostro de Brisa repetidamente, luego, con su cabeza le ayuda a ponerse de pie, aullando de felicidad.

Ambos saltan al lago, provocando enormes movimientos de agua, como olas, reflejan la pequeña luz de la luna, como si se moviera, más bien cómo se le sonriera solo a ellos, acompañándolos en su recorrido.

Al llegar a la orilla, le empuja con la cabeza ayudándole a subir, se sacuden el agua, caminan un poco más, descubre la mansión asombrada.

Ambos toman su forma humana.

Conforme avanzan, las puertas se abren solas. El interior es cálido. Las de los candelabros se encienden a su paso.

La luz tenue, que había iluminado el camino, ahora se proyecta sobre las paredes en interiores de tan encantadora mansión.

El Alfa la toma entre sus brazos, ingresa con ella, la lleva hasta su habitación acomodándose en una pequeña sala frente a la chimenea que ya se encuentra encendida.

Al costado de ellos, está un carrito lleno de bocadillos de todo tipo, se alimentan uno a otro en silencio sonriendo y dándose muchos besos de vez en cuando.

Abrazados observan el fuego moverse en una danza de colores hipnóticos. Algunas chispas rojas brincan de repente.

-- ¡Perdóname por no salvate!

La chica lo calla a besos.

-- ¡Olvídalo! Lo importante es que estamos juntos ahora.

-- Sí, pero morí contigo cada vez.

Las lágrimas profundizan el azul de sus ojos.

-- Así debería de ser.

-- ¡Esa malita Mariela pagará! Ha robado demasiadas esencias de lobo, gracias a que robó un dije de mi abuela.

Confundida abre los ojos más expectante.

-- ¿Cuéntame? Desconozco esa parte.

La tomó por la cintura y ambos se recortaron en el sofá, el musculoso cuerpo del Alfa la rodeaba, ella, recargóo su nuca sobre el amplio pecho.

Darius se perdió ante la danza del fuego, que se vio reflejado en los ojos de los enamorados.

Comenzo a relatar.

La madre de Mariela quiso ser la Luna de mi abuelo, en cuanto vio a mi abuela la reconoció como su mate, ella frustrada le robó una reliquia mágica familiar a mi abuela, e hizo un trato con una bruja, ella le concedió el poder de absorber la energía vital y confundir la mente de su víctima para que crea que ella es su amor verdadero, a cambio de absorber esas energías vitales, la bruja se mantenía joven, y ella robaría el corazón de mi abuelo, nunca le advirtió que si no lo lograba ella sería la primera que perdería la vida.

Al descubrir esta parte del hechizo, ella le reclamó, ya habia tomado muchas esencias. Así que una nueva negociación se dio y la bruja le dio tolerancia diciéndole que si lograba embarazase en la siguiente luna de sangre, al morir, su descendiente podría seguir siendo la guardiana de tal joya.

También absorbió su alma y su cuerpo.

Su cachorra, Mariela como sucesora debería obtener el amor de un Alfa, ella regresa a la vida y las dos lograrían la vida eterna.

Suspira profundamente toma las manos de su pareja acariciándolo con los pulgares y continúa.

Intentó embaucar a tu padre pero él ya tenía su mate, después a mi padre, no lo logro. En cambio encontró a su mate, por sugerencia de la bruja se escondió de él, si ella mataba a los hijos de esta pareja o sea tu y padres, el Alfa la tomaría como su luna. La naturaleza confabuló en su contra, en su último celo sú mate la reclamó y la embarazo así nació Naomi su enojo fue tanto, que lo mato. Así ya no podría reclamar a tu padre. Una noche le sacó el corazón a tu padre y lo regaló a la vieja hechicera, al comerlo rejuveneció, el poder fue tanto que desapareció. Lamentablemente por su descuido y dar a luz a su cachorra, sin su bendición, su hija no puede disponer de sus hechizos.

-- Mm. Y entonces. ¿Cómo me encontraste?

-- Te logré sentir en el vientre de tu madre, nuestros padres eran amigos, siempre ocurrió algo para que yo no te pudiera salvar. Mi corazón se rompió cada que te perdí. La diosa Luna se apiadó de mí, tanto dolor, cuando estaba por morir no lo permitió yo siempre había sido el protector de las manadas, un punto más a mi favor, hizo que ella me ayudara, me aclaró que cuando reuniera lágrimas sangre y huesos regresaria a ti, mientras me convertía en cenizas al pie del árbol del "Amor eterno".

La abrasa con más fuerza.

-- ¡Nadie nos separará! ¿Te unirías a mí?

--¡Sí te elegiré a ti!

-- ¿Y tus padres y tus abuelos?

-- Mis padres murieron en batalla defendiendo a la manada y mis abuelos viven entre los humanos, pertenecen al consejo mayor lobuno y se encargan de administrar los bienes de los lobos, aunque son muy viejos, no aparentan más de 40 años. Se encargan de proveer a las manadas económicamente y está, es administradas a su vez por los Alfas.

-- ¿Qué increíble historia no lo crees?

Ambos guardan silencio, analizando la información que acaban de compartir, se sienten reconfortados, por fin vivirán su amor.