Amor Y Mafia. (Segundo Libro)

RIVER VERAX.

Mi novia me llegó a comprar ropa para mi cita con Valquiria, honestamente no quería, pero mi novia me estuvo insistiendo en que aceptará, no tuve otra alternativa más que aceptar, es a las 8 y sus escoltas pasaran por mí es algo que no tengo quejas, me arreglo y me preparo lo más elegante que puedo no quiero decepcionarla y dando la hora la camioneta con 2 personas ya está afuera de mi casa, me subo en la parte de atrás y arranca al rumbo no se a donde y también se ven muy serios para preguntar, le omití al decirle que ella me regaló el teléfono, tuve que decirle que lo saque a pagos. Me ha ido bien en la agencia y eso me ha dado el placer de darme uno que otro lujo, ya no me preocupo por mi título ni cédula ya lo tengo contemplado todo y es algo que me tiene tranquilo, llegó al sitio que es un restaurante muy lujoso y no me sorprende de ella me puedo esperar cualquier cosa, me guían a la mesa que el último piso que tiene y cuando llegó está prácticamente sola, cuando me ve se levanta y trae un vestido rojo con escote en corazón y es pegado a su figura que la resalta más y abierto en la pierna derecha hasta un poco más arriba de la zona V dando a entender que posiblemente no tenga ropa interior abajo.

- Buenas noches, River.

- Buenas noches, Valquiria.

Me indica que tome asiento y así lo hago, hay escoltas en la parte de la entrada y adentro solo somos nosotros, nos dan la cara para escoger y la verdad no tengo hambre así que pido algo liviano para tener algo en la mesa ella pide un vino le dice que solo la venden por botella y la pide, se van y su mirada penetrante me observa y no ya como descifrar la mirada que me echa logrando ponerme nervioso.

- Que tal el trabajo River.

- Bien algo atareado, pero bien y tú.

- Me alegro mucho, bien ocupada y tuve que mover algunas para estar aquí.

- Entonces me debo sentir importante.

- Siempre debe de ser así.

Empezamos a hablar como una conversación normal y tranquila de dos personas que intentan conocerse me habla de su familia; sin embargo, no habla de Malakai ni mucho menos de su mamá, habla más de su tía Emily y sus primos e hermano que ellos si son conocidos en el mundo estrella, me pregunta por mí y pues no tengo mucho que contarle que soy un persona mortal a lado suyo. Me sorprende cuando me saca el tema de la ingeniería que estoy por concluir y como niño con juguetes me desplazo contando hasta lo que no y vez en esto su risa me atrae demasiado, esto me pone a dudar de si en verdad me gusta mi novia obviamente no hay comparación alguna mi pareja destila dulzura, inocencia y ella la mujer que tengo enfrente destila todo lo contrario, maldad, egoísmo y sobre todo genera el miedo en las personas, no cualquiera le habla, todos deben de ser algo meramente importante para poder hablarle a una mujer como ella.

- Me gusta como le pone desempeño a tu carrera, mis primos tienen una empresa dedicada a eso, si gustas y me lo permites cuando salgas te puedo conseguir un lugar, créeme cuando te digo que no hay mejor opción con ese.

- Eso sería abusar de su confianza y la verdad no me gustaría que después me eche esto en cara.

- ja, ja,ja como crees, yo las oportunidades que doy no las echo en cara nadamas te voy a conseguir un lugar tú debes de desempeñar él lo que en realidad amas.

Lo pienso, sería muy buena oferta de trabajo y se que conviene estar en la empresa de sus primos son los mejores en cuestiones del mundo y ganaría bien para ayudar a mi familia.

- bueno, está bien aceptaré dígame qué va a querer a cambio, sé que este favor no será gratis.

- Tu mismo lo has dicho, gratis no será y no quiero a cambio un regalo o tu agradecimiento más arriba, quiero otra cosa que no hablaremos aquí, sino cuando tengamos más confianza, cuando tengas tu puesto yo te pediré que es lo que realmente quiero.

- Va a querer mi cuerpo a cambio del trabajo.

- Puede que sí, puede que no, solo espero que cuando llegues a ese punto estés sin novia soy muy celosa con mis cosas y no pretendo querer compartir lo que es mío con otra.

Me queda helado, yo pensé que estábamos bromeando, pero ya vi que no y eso me tiene angustiado, no sabía que por un buen trabajo porque viéndolo bien es una oferta que jamás se va a desperdiciar y me conviene y si es dar el cuerpo, pues que más da hay que sacarle provecho de vez en cuando, seguimos con la cena, traen el vino y lo disgusto no soy experto, pero tampoco soy menso y este tiene un dulce muy peculiar, sé que esto conlleva a terminar con mi relación, esto es una balanza que si o si tendré que escoger una, ya que su amenaza no es cualquier cosa se lo va a tomar en serio. Su carácter demuestra que no dice las cosas dos veces y aún tengo tiempo puede que en futuro se arrepienta así que no me voy a hacer ilusiones vagas con esto, tema la cena y me dice que me va a llevar a mi casa, subo después de ella a la camioneta y arranca a mi casa.

- Si decides aceptar el trabajo lo que pediré será bajo mis reglas nada debe de salir mal no me conoces ni de lo que soy capaz.

- Aceptaré el trabajo, solo dígame que tengo que hacer.

Su sonrisa me tiene en un limbo es una persona muy hermosa aunque por dentro tenga miles de gusanos que la comen, rompe en poquito espacio que había entre nosotros y nuestras miradas se encuentran y puedo ver sus ojos más a detalle son bellos nunca había visto algo igual, coloca su mano en la parte de atrás de la nuca y se empieza a cruzar nuestra respiración.

- Me gustas River.

- Se nota mucho.

- ¿Si?

Lo dice con ese aire coqueto que me deja congelado al mismo tiempo que nuestros labios chocan mi cerebro me dice que me detenga, pero por otro lado dice que lo disfrute y me deje llevar, me empieza a besar con esa forma de que a ella le gusta ser la que lleva el control de las cosas, nuestras lenguas jueguen y alguien de afuera lo vería como un beso succiona almas y yo lo veo como un beso con hambre, que ya lleva tiempo deseando esto.