Mariví #3 (Saga Hijos HM)

~Llegaron rápido.

- Mariví abrió, tenía la vista en el teléfono y pensó que eran los chicos.-

~No aprenderás a ver primero quien es?

- Mariví pego un salto y el teléfono cayó al piso.-

~Que te pasa?

- Agarró el teléfono, respiro al ver que no le pasó nada.-

~Ah quien esperabas?

- Damián pasó y se sentó en el sofá, vio como Mariví se dirigió a la cocina, se levantó la siguió y llegando la levantó sentandola en el mesón, la abrazo de la cintura.-

~Perdona, no debí actuar así, no tengo derecho.

- Mariví sintió decepción, por un momento pensó que diría otra cosa, pero ya sabía que eran y no podía esperar más.-

~No te preocupes, bajame que se me quema la lasaña.

- Damián la bajo.-

~Esperas a tus amigos?

- Mariví asintió.-

~Hicieron las pases con Armando.?

- ella pregunto abriendo el horno para sacar su lasaña.-

~Si, gracias por todo.

- Mariví sonrió, se acercó y le dio un beso corto, pero Damián no quería eso, necesitaba de sus besos, de sus caricias, la pego y profundizo el beso, hasta que fueron interrumpidos.-

~Perdonen, pero tengo hambre.

- Marilyn y Marlon entraron, Marlon no podía con las ganas de reír.-

~No entiendo porque Mariví abre sin ver quién es, Si ustedes tienen llave?

- Marlon y Marilyn se rieron.-

~Ella es así, su padre siempre le reclama por eso.

- Mariví volteaba los ojos.-

~Ya dejen eso para otro momento, vamos a comer.

-Marilyn se sentó y ayudo a servir, los cuatro comieron entre charlas, los chicos se chupaban los dedos de lo rico, Marlon y Marilyn se fueron a sus apartamento o solo a uno.-

~Me invitas a quedarme en tu cama?

- Mariví sonrió, ahora pedía permiso cuando antes empezaba todo sin palabras.-

~Claro, es muy espaciosa la cama.

- Mientras lavaba los platos, Damián se acercó y le hablo al oído, con su voz sensual y tocando sus piernas.-

~Quiero jugar.

- Mariví se dio vuelta paso sus manos por su cuello.-

~Ah que quieres jugar? Al ciego, inmovilizado, juego de roles, temperatura?

- Ella enumera cada una, pero Damián quería hacer algo que no hizo la primera vez.-

~No, Hoy serás virgen, toda una inexperta, yo te enseñare donde tocar, acariciar y besar.

- Mariví se quedo viendo sus ojos, esa intensidad con la que se veían, esa conexión.-

~Esta bien, que tengo que hacer mi señor?

~Te are un masaje primero y tú a mi.

- Beso sus labios y se fueron a dar un baño, donde Damián fue tocando a Mariví, su pierna con sólo un dedo, daba círculos cerca de su parte intimidad.-

~No tienes permitido hacer nada, recuerda que no sabes nada y es tu primera vez.

- Ella sonrió, le encantaba cuando Damián dedicaba tiempo a su cuerpo, sabía lo impaciente que era, pero con ella y los juegos aprendió aguantar y disfrutar de esa sensación de querer y no poder, Damián besaba su cuello, su abdomen, bajaba a sus piernas donde ella trataba de cerrarla, era sensible y Damián sonrió al darse cuenta que no sabia esa parte de ella, uso sus dedos para acariciar desde su cuello hasta su intimidad, tocó y acarició y con sus dedos la hizo tener su orgasmo.-

~Aah, esto no es nada parecido a mi primera vez, ambas me encantan.

- Damián recordó esa noche, no fue nada compasivo.-

~No tuve toda la culpa.

- Mariví lo tiro a la cama, y era su turno en jugar y ella si conocía el lado sensible, se daba cuenta cada vez que tenían relaciones.-

~Me toca cariño.

- Damián quiso protestar, pero Mariví lo amarro a la cama.-

~Yo no te amarre, eso es trampa.

~Asi no te moverás y seré yo quien mandé, se bien que eres posesivo y no dejas que yo guíe el acto, ese será tu castigo.

- Le sonrió con burla, busco unos aceites y empezó a darle masaje en el pecho, bajo a su bien erecto amigo, lo acarició como si le diera masaje, sus piernas-

~Aah ya Mariví, este no era el juego.

- Ella siguió con sus toques, sus besos, Damián tenía las manos rojas de la fuerza que hacia.-

~Me encantas así, molesto y excitado a la vez.

- Damián desviaba la vista, ya no aguantaba la tortura de no hacerle el amor salvajemente, Mariví se sentó introduciendo la intimidad de Damián en ella, lo cabalgaba suave con su cabeza atrás.-

~Aah Mariví más rápido.

- Ella sonrió, se movía rápido y solo gruñidos con gemidos salían de la boca de Damián hasta llegar ambos al límite, pero Mariví volvió a hacer el mismo método hasta ver su notable erección.-

~No te molestes, está vez te soltaré.

- Lo soltó y Damián la agarró la tiro y la puso en cuatro, pego su boca a su oído.-

~Vas a Gritar que pare nena.

- Entró en ella duro, sacando un fuerte gemido de Mariví, así pasaron la noche en una inolvidable noche.-

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~Vez la diferencia entre los dos?

- Mariví despertó y Damián estaba a un lado de ella, acariciaba su cabello.-

~mmm Auch, cuál?

- Se quejaba por el dolor en las piernas.-

~Te duele mucho? Bueno, yo no te abandoné al siguiente día como tú, siempre me dejas solo y con una nota.

-Haciendo puchero-

~Jajaja, que gracioso eres, no solo las piernas, que salvaje? Ayudame a llegar a la bañera.

- Damián la llevó se bañaron, comieron, se arreglaron y salieron a la cita con la psicóloga.-