capitulo 4

Me despierto, veo mi reloj y noto que son casi las 5:00 de la tarde, ¡wow! si que dormí bastante. Me siento en la cama y mi estómago hace un sonido anunciando que estoy muriendo de hambre por lo que me pongo de pie, primero voy al baño en dónde hago mis necesidades y luego me dirijo a la cocina.

La cocina del departamento que tengo es pequeña, pero suficiente para mí ya que vivo sola, a demás me gusta mucho sus colores que son morado claro y blanco. Desde niña el color morado al igual que el color azul celeste han sido mis colores favoritos, pero el morado es el superior, creo que desde el momento que pude ver los colores me enamoré del morado.

Busco en los estantes comida y descubrió que ya casi no tengo nada... suspiro y saco toda la comida que encuentro distribuida por la cocina, la junto en la pequeña mesa que hay en la cocina y empiezo a contarla para así racionar la y que logré durar hasta que consiga más dinero porque primero debo pagar la renta o si no me sacarán del lugar y será peor no tener un techo para dormir. Aunque en mi caso el no comer también es malo, si fuera solo por mi no importa si como o no pero estoy embarazada y mi bebé depende de lo que yo consuma y haga. No quiero arriesgar a lo único y más preciado que tengo en mi vida.

De la comida elijo una lata de atún, una pequeña tortilla, un poco de brócoli y la mitad de un aguacate que está pronta a dañarse. Con el aguacate preparo guacamole el cual aplico en la tortilla que cocine para que tuviera una textura más tostada, luego parto en trozos pequeños el atún y le agrego un poco de brócoli y listo quedó mi comida. Tomo un plato y pongo la tortilla, luego tomo un vaso que lleno de agua y voy a la sala para ver un rato la televisión ya que estoy aburrida.

Enciendo la televisión mientras como y agradezco realmente que no tenga náuseas ni haya tenido que salir corriendo a vomitar todo. Voy cambiando de canales en la televisión ya que nada me entretiene demasiado.

Recuerdo que cuando Tomas y yo éramos una pareja feliz el siempre sabía cómo animarme y entretenerme cuando me encontraba aburrida, ya fuera jugando o charlando... el siempre me hizo feliz pero ya no está a mi lado y nunca más lo hará... tocó mi vientre haciendo circulos mientras lucho para que las lágrimas que están empezando a llenar mis ojos no salgan, estás hormonas del embarazo cada ves se hacen más presentes en mi. Por una lado me emociona porque se que se producen porque llevo a lo más importante de mi vida dentro mío, pero por una parte no me emociona que mis hormonas se alteren ya que me pongo demasiado sentimental y con solo recordar que ya no tengo a nadie....

Sin poder evitarlo rompo en llanto mientras sigo cambiando de canales y si ya me sentía mal ahora peor porque justo están entrevistando a Tomas junto a Candelaria que se ven muy felices juntos, el reportero les está realizando diferentes preguntas que por ahora es sobre cómo la empresa a crecido favorablemente, hasta que llega uno de los peores momentos para mí

...En al entrevista...

-y para continuar con esto queremos hacerles una de las mayores preguntas realizadas por el público.- dice el reportero- Señor Tomas y señorita Candelaria ¿es verdad que son pareja?- los mira a ambos con una gran sonrisa pícara.

-sonrie- pues- dice Tomas tomando la mano de Candelaria y depositando un pequeño beso en esta- esta es la mujer que a robado mi corazón completamente y por eso- se levanta de su asiento y de repente sale una persona con un gran peluche con globos y atrás de esta viene un grupo grandes de mariachis. Las cámaras apuntan de nuevo a Tomas y esto me parte el último pedazo de mi corazón, el se arrodilla y saca una cajita mirando directamente a los ojos a Calendaria quien lleva las manos a su boca- Candelaria ¿quieres casarte conmigo?- lloro aún más que antes, quisiera cambiar de canal pero simplemente no puedo, no siento mis manos ni fuerzas para hacerlo.

-¡SI!- grita eufórica Calendaria mientras se abalanza sobre Tomas quien la alza dándole vueltas para luego ponerle un gran anillo de diamantes y terminar con un gran beso que desde aquí se nota lleno de amor. Los mariachis están tocando una bella canción y las personas presentes aplauden y los felicitan.

Cómo puedo apagó la televisión y no puedo parar de llorar, de verdad el ya no le ama crei que tal ves podría ser un error pero no. Recuerdo que cuando Tomas me propuso matrimonio fue algo super íntimo, solo los dos bajo la luz de la luna mientras nos encontrábamos acostados sobre una manta en el césped.

...Flashback...

-¿Andrea?- dice mi bello novio Tomas que se encuentra acostado a mi lado y yo me giro para verlo directamente a los ojos.

-Dime- pregunto sonriendo ya que hoy es nuestro aniversario y la noche de hoy es hermosa, con una gran luna y el cielo bañado de estrellas.

-¿quieres bailar?- me ofrece su mano y yo no dudo ni un segundo en tomarla.

-y ¿con que música?- pregunto graciosa, el saca su teléfono y parece buscar algo de pronto de el bolsillo de su chaqueta saca un pequeño parlante de color morado y lo enciende. Después de unos segundos suena la canción "Dusk till dawn- de la cantante Sia y Zayn" esa es mi canción favorita.- amo esa cancion- le digo y el sonríe.

-Lo se, por eso la puse- me extiende su mano y comenzamos a bailar bajo está hermosa noche de luna llena. Tomas me gira en cuanto empieza a sonar el coro de la canción me pega a él pero se separa un poco, me da la vuelta haciendo que quede de espaldas a el.

-¿que haces?- le pregunto curiosa y siento algo en mi cuello.

-Feliz aniversario amor de mi vida- susurra en mi oído y veo que hay en mi cuello y para mí sorpresa hay un bello collar con un corazón que lleva nuestras iniciales grabadas.

-Amor no debiste molestar...- digo mientras doy la vuelta y veo algo que me deja en schok.

-Andrea- dice Tomas mientras está arrodillado frente a mi con una pequeña caja en manos- todo este tiempo a tu lado a sido lo más bello de mi vida, pero sería más hermoso si tu...- abre lentamente la cajita y hay un bello anillo color morado con un pequeño diamante en el- ¿quieres casarte con...- no lo dejo terminar ya que me abalanzó sobre el gritando que si y dándole besos por toda la cara, el me alza y me da mil vueltas. Luego me baja y me pone el anillo, nos miramos a los ojos y nos besamos.

-te amo, me haces el hombre más feliz del mundo- me dice al separarse del beso, pero nuestras frentes se encuentran juntas.

-yo también te amo y gracias por hacerme la mujer más feliz- y sin más volvemos a besarnos y hacemos el amor y sellamos nuestro amor bajo la luna

...Fin del flashback...

Lloro sin poder más al recordar esto, quisiera morirme pero se que debo ser fuerte por mi bebé, asi me cueste. Pero es inevitable no llorar.

Llore tanto hasta que me quedé dormida en el sofá de la sala

Al otro día

Me despierto por la alarma de mi teléfono y noto que son las 6:00 AM, me levanto rápido con un poco de dolor en mi cuerpo pero rápido me dirijo al baño y me ducho lo más rapido posible. Salgo del baño y me pongo un pantalón color azul marino al igual que mi abrigo, me pongo una camisa de color amarillo y unos zapatos bajos de color negro. Me recojo el pelo con una cola de caballo, me agrego maquillaje más al natural y salgo del apartamento. Nos un antes tomar mi bolso.

Salgo empiezo a caminar directo a la empresa, estoy ansiosa por saber que trabajo podrán darme.

-mami ya tendrá un trabajo para darte lo que te mereces mi bebe- digo en vos baja mientras tocó mi vientre sonriendo.

.....

Después de un rato llego a la empresa, entro, saludo a todos y me dirijo al ascensor, noto mi reloj y aún estoy a tiempo cuando de pronto chocó con alguien.

-ay lo siento! iba distraída- levanto mi vista y choque con Leonardo, quien solo sonríe.

-no te preocupes, ¿cómo estás?- ambos entramos al ascensor y el unde el botón al último piso.

-Pues, ¿nerviosa?- respondo tímida ocasionando que Leonardo ría.

-tranquila, no debes estarlo, además espero que el trabajo que te conseguí te agrade.- yo sonrío al igual que el.

-asi será señor.

-nada de señor, nadie me llama así, no me gusta hace que me siente viejo y a penas tengo 25.- yo me quedo en shock y lo miro con mis ojos abiertos como platos.

-¿de verdad?- le digo y el me mira confundido.

-si, ¿por qué?, tan viejo me veo- exclama el en tono de broma y haciéndose el ofendido.

-no...no quise decir eso, lo que pasa es que, se ve demasiado joven y creo que era hasta menor que yo.

-pues déjame decirte que tú pareces una niña- lo miro- sin ofender- yo niego con la cabeza restándole importancia- pero es verdad te ves muy inocente, además que eres demasiado hermosa.

-puedo sentir como me sonrojo y bajo un poco mi cabeza- gracias- digo en voz baja y llegamos al último piso.

-acompañame para que veas el trabajo que puedo darte- me dice Leonardo saliendo del ascensor mientras yo camino atrás de el.

-Suerte- escucho las voz de una mujer antes de entrar a la oficina y me dirijo a verla y es Lucía- lo harás bien.

-Gracias- sonrío y entro a la oficina. Leonardo hace un gesto indicándome que me siente cosa que hago.

-Se que has estudiado lingüística y en estos momentos necesito una persona que me ayude con un grupo de personas de varias edades que llegara en dos días del extranjero y necesitan aprender cosas del lenguaje ¿podrías ayudarme?- me dice Leonardo haciendo que me emocioné, podré poner en práctica lo que estudie y además tendré trabajo para tener lo que necesito para mi bebé.

-acepto- respondo y Leonardo sonríe.

-perfecto, me serás de mucha ayuda, abra que ver cosas del contrato y listo.- asiento con mi cabeza y empezamos a organizar mi contrato.

Leonardo me dió unos papeles para que revisara las personas que llegarán y demás. No sé en qué momento ya era hora del almuerzo y Leonardo se acerca a mi y me dice.

-¿quieres ir a comer para celebrar?- me pregunta y yo sonrío- no acepto un no por respuesta.

-Esta bien

-les molesta si los acompaño- dice la voz de una mujer y cuando volteo a verla es Lucía.

-Claro que no- le respondo y salimos.

Llegamos a un bello restaurante, cada quien ordenó a su gusto, aunque ya que no había venido a este lugar Leonardo y Lucia me recomendaron un platillo que parecía rico entonces lo ordene.

-Felicidades- me dicen ambos alzando copas de vino y yo alzo la mía que esta llena de agua ya que no puedo tomar por mi embarazo.

-Gracias

Después de un rato llegan los platillos y el mío luce delicioso. Estábamos charlando muy a gusto cuando de pronto empiezo a sentirme muy mal y comienzo a ver borroso.

-¿te sientes bien Andrea?- escucho como dice Leonardo y de pronto todo se vuelve negro.

Hasta aquí este capítulo, gracias por leer. Hasta la próxima 👋😊

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