Todo Comenzó

Llego a la oficina, hoy elegí un vestido negro con una Chaqueta entallada roja y zapatos rojos, he bajado un poco de peso ya que en estos meses he trabajando mucho y no tenía tiempo de comer bien.

Me dirijo a su oficina a entregarle unos papeles, golpeó y espero a que me de permiso a pasar.

-Adelante

Me dirijo hacia Él, se encuentra parado en medio de la oficina, sin saber cómo me doble el tobillo, me estoy cayendo pero siento unas manos firmes sobre mi cintura que impide que me caiga, atrayendome a su pecho musculoso. Estábamos tan juntos que pude sentir su aliento a menta y su perfume embriagador, creo que pasamos una eternidad mirándonos a los ojos.

-l..o si..ento Se..ñor.. tartamudeo como tonta alejándome de su agarre.

- No te disculpes Emma te encuentras bien?

- Si señor muchas gracias..

- No, mira tu tobillo se está hinchado y se está poniendo rojo. Siéntate en el sofá, traeré hielo para ti..

- No Señor Alejandro estoy bien..

- Deja de ser terca y siéntate ahí y hazme caso.

Me sente, y Él trajo un poco de hielo en una bolsa de su bar privado y la colocó cuidadosamente en mi tobillo, la verdad que me dolía horrores.

-Te encuentras bien?, se te paso un poco Emma?

- La verdad que no, no puedo mover bien mi tobillo.

-Ven, te ayudaré a acostarte en la sala de descanso de mi oficina, le diré a César que llame al doctor así puede revisarte.

Entramos en la sala de descanso había una cama king, en la sala predominaba el blanco, gris  y negro. Hay un baño y un pequeño bar con refrigerador. Me ayudó a acostarme, ya que no podía ni caminar,  la verdad que me dolía mucho. Hice mal en elegir estos zapato tan altos y mis kilos de mas no me acompañan..

- Perdón por molestarlo Señor..

- Ya te dije Emma que no te disculpes fue un accidente, a cualquiera le puede pasar. No soy tan malo como parezco para molestarme por esto. Descansa. César me dijo que en 20 minutos vendrán el doctor.

Salí de la sala, cerré la puerta para darle espacio a Emma y que no se sintiera incómoda. Estoy en mi escritorio esperando al doctor. Pasaron 30 minutos y el doctor que no viene.. Golpean la puerta, le ordenó que pase, era César  con el doctor. Frunci el ceño al verlo.

-Porque se tardaron tanto?. le digo

- Disculpe Señor había mucho tráfico.

Me dirijo a la sala de descanso para avisarle a Emma que estaba el doctor, para así dejarlo pasar, me acerco a la cama y la veo dormida,  me acerco un poco más y admiro lo hermosa que se ve, parece un Ángel me acerco un poco más y  no puedo evitar mirar sus labios muy tentadores a mi parecer.

Veo que ella abre los ojos, yo aclaro mi garganta y trato de tragar saliva con dificultad y me alejo lo más rápido que puedo.

-Emma el doctor a llegado lo dejaré pasar

-Bueno Señor muchas gracias..

~ porqué se habrá acercado tanto así, tengo algo en la cara?.. que vergüenza~

-Señorita tiene un esguince en el tobillo tiene que estar 3 días en reposo le voy a vendar el tobillo, utilice compresas de hielo para disminuir la hinchazón y tome esta receta para que compre estos analgésicos..

Cuando iba a agarra la receta El Señor Alejandro la agarró primero hablo un poco más con el doctor cuando caminaban hacia la puerta de la oficina..

- Tienes que hacer reposo Emma, tienes que estar en cama y no levantarte ya que el doctor me dijo que tienes muy hinchado y morado el tobillo y si en esos día no has mejorado pedirá un diagnóstico de imágen.

-Pero señor tengo que trabajar no puedo dejar de hacerlo se van a acumular las cosas y no hay nadie que me reemplace.

- Quién es el jefe aquí?

-Usted, pero...

-Pero nada Emma deja de ser tan terca. Te quedarás acostada aquí cuando termine de hacer un par de cosas te llevaré a tu casa..

Salió de la sala de descanso sin darme tiempo a decirle que me iba en un taxi por mi cuenta..

Dormí un rato ya eran pasado del medio día, me sentía un poco incómoda, no me sentía bien en este lugar, era hermoso pero me daba vergüenza estar aquí. Siento que abren la puerta y entra el Señor Alejandro con una bandeja con comida.

- Bien.., pudiste descansar algo? te traje algo de comida de seguro que tiene hambre.

- Si gracias.., no se hubiera molestado..

Me acomodé un poco en la cama traté de sentarme y no mover tanto el pie porque me dolía, me dio la bandeja y la verdad que se me quitó el apetido no podía comer ya que el me miraba fijamente.

- Bueno prueba esto, esta riquísimo es una de las comidas más ricas que hacen en un restaurante que me gusta.

Comi con mucha vergüenza, estaba delicioso.

Le volví agradecer por su gesto y era obvio que estaba roja.

- Bien termina y después te llevaré a tu casa. Ya terminé mi trabajo y aplace alguna reuniones para la semana que viene.

- Bueno no sé moleste puedo irme en taxi.

- Emma Ya basta te dije que te llevaba,  te lastimaste en mi oficina tengo la responsabilidad de llevarte a tu casa y saber que estás bien ..

Terminé de comer,  me ayudó a levantarme, me puse mis zapatos y me miró fijamente.

-Ya veo porque te torciste el tobillo, no quiero que uses estos tipos de zapatos tan altos.

- emm sí..

Me sorprendí como me miró y de su exigencia. Qué le pasa? estaba raro no solía ser tan atento.. Se sentirá bien,tendrá fiebre?. Salimos de la oficina el agarraba fuerte mi cintura y mi brazo. Subimos a su ascensor, eran contadas las veces que subía ya que usaba el de los empleados, llegamos al estacionamiento subterráneo, nos dirigimos a su Mercedes Benz. Lamenté tanto esta situación porque cuando estaba subiendo en la parte trasera del auto, un grupito de empleados nos vieron y empezaron a hablar entre ellos..

Él se subió y se sentó a mi lado, antes de subir le dio las llave a César para que el conduzca..