¿AMOR O DESEO?

Termino de hablar con las chicas y me quedo pensando en sus palabras, sé que tienen razón, sé que sufriré en medio de todo este acuerdo sin sentido, pero prefiero verlo de esta manera y no hacerme ideas de una relación inexistente, Rey a sido muy claro en que eso no sucederá y yo de cierto modo prefiero que sea así ya que entre más sé de él, más me convenzo de que es peligroso estar a su lado, pero no es como si me diera muchas opciones. El celular vibra en mi pecho sacándome de mi pensamiento. Miro la pantalla y es un mensaje de Rey, lo abro sin poder creer lo que veo. Mis ojos se abren como los de un lince al ver una foto de su erecci** en lo que parece un baño, no entiendo por que mandar algo así, me río de vergüenza y cuando estoy apunto de contestar su mensaje me entra una videollamada de él, contesto.

-Hola bombón, ¿qué haces? ¡¡ah!!-

*Me dice, lado se escucha agitado*

-Estoy en casa-

*Le contesto confundida por lo que escucho*

-Rey ¿qué haces?-

*Le pregunto ya que por la cámara no se ve nada*

-¡¡Ah!! ¿Quieres ver, Corderito?-

Me dice y coloca la cámara y veo como se esta masturba*** en un baño. Su mano sube y baja por su erecci**, está todo mojado, me quedo perdida viendo su movimiento, escuchando sus gemidos, su respiración agitada y veo como sale todo su jugo de placer de su pol**, mi entrepierna palpita de solo verlo mientras se toca, este hombre es tan ardiente parece que su fuego nunca se apagara. Me mira por la cámara, muerde su labio, me guiña un ojo y me lanzan un beso, limpia su sudor con la manga de su camisa y coloca el celular en una parte fija mientras deleito mi vista viéndolo como organiza su traje a la vez que me da miradas de picardía con su gran sonrisa de satisfacción.

-¿Te gustó, bebé?-

*Me pregunta sosteniendo el celular y lo acerca a su cara*

-¿Qué haces rey?, ¿estás loco?-

*Le digo con mi cara roja de la vergüenza, mientras muerdo mis uñas*

-Eso creo bombón, estaba en una reunión y me acordé de ti, por alguna razón imaginarte atada me hizo tener una erecci**, no lograba calmarme así que me toco hacer un receso de media hora y aquí estoy haciéndote responsable de tus actos-

*Dice entre risas*

-¿Perdón?, ¿mis actos?, yo no hice nada, ¿cómo podría tener la culpa?-

*Pregunto aparentando sorpresa*

-Me haz tenido reprimido, bebé, no te alcanzas a imaginar las cosas que te quiero hacer, pero... ¡¡Mierda!!-

*Jala la chaqueta de su traje con rabia*

-Solo no quiero asustarte y dije que haríamos las cosas con calma-

*Me dice con su rostro perfecto como siempre, acomoda su cabello y me manda un beso*

-Hablamos luego, bebé, tengo que volver y si termino temprano mi trabajo paso a buscarte en la noche ¿ok?-

-Ok y Rey... me gustó mucho-

Le respondo y cuelgo rápidamente. Este hombre está loco, como se le ocurre hacer esas cosas en medio de una reunión y tener el descaro de decir que tengo la culpa. Me rió como una niña dando vueltas en la cama mientras pienso en eso.

El tiempo se pasa muy rápido, ya va oscureciendo, me baño, cambio mi ropa y salgo a darle la mitad del dinero a Dolores. Por lo menos no tendremos de que preocuparnos por ahora. Mi viejita ha trabajado toda su vida lavando ropa ajena, cocinando para otros, aguantando humillaciones de muchas maneras, por eso siempre trato de no ser una carga para ella, hemos pasado tantas cosas juntas que no sé que sería de mí sin Dolores.

-Dolores, tengo algo para darte ¿donde estas?-

*Le pregunto a la medida que la busco*

-Acá en la cocina niña, ¿qué me quieres dar?-

*Responde mientras revuelve el arroz. Coloco el dinero en el mesón de la cocina y ella se sorprende al ver la cantidad*

-¿No me digas que ese es el efectivo del que hablaba el hombre que está afuera?-

*Dice sorprendida y vuelve a mirar el montón de dinero*

-Solo es la mitad, mamita, pero puedes comprar suficiente comida y dejar de preocuparte por trabajar al menos por ahora-

*Le digo y ella suelta el cucharón del arroz*

-Estrella-

*Me dice y su cara refleja preocupación*

-... Niña, dime que no estas haciendo esto por mí, por favor, dime que estas feliz con ese hombre y no te estas vendiendo para que tengamos una mejor economía-

*Me dice con tristeza sosteniendo mis manos y yo me pregunto, soy... ¿Feliz? realmente ni yo sé la respuesta a eso. La miro por unos segundos*

-Dolores, te puedo asegurar que cuando me enrede con Rey, no estaba pensando en eso-

*Sostengo sus manos mientras digo mis palabras*

-Seré sincera contigo respecto a mi relación con él-

*Sus ojos se llenan de lágrimas al escucharme*

-Yo sabía que había algo más-

*Me responde respirando profundo para calmar sus emociones*

-Solo te pido que no me juzgues... Se puede decir que él y yo llegamos a un... "acuerdo"-

*Hago las comillas con mis manos y sonrío un poco*

-...No somos novios o pareja, solo nos hacemos compañía-

*Ella parece en shock al escuchar mis palabras*

-Estrella, pero ¿como así? O sea, te esta pagando para que te acuestes con él-

*Me grita y busca para sentarse en una silla de la cocina*

-Mami, Rey es un hombre muy complicado y tiene ciertos gustos que yo no le puedo satisfacer-

*Le digo ayudándola a sentarse*

-Y menos en estos momentos, por eso... puede que lo sigas viendo con otras mujeres y aun así estar conmigo de vez en cuando-

*Coloca sus manos en su cabeza*

-¿Gustos complicados?, ¿como así?, Estrella, te pido el favor de que me expliques esta situación tan extraña-

*Me dice y yo me agacho a sus piernas*

-Es qué... no te puedo decir, solo te pido que confíes en mí, ¿si?, yo soy como su compañera fija, pero es difícil de explicar, por ahora quiero que compres lo necesario-

*Le digo besando sus manos*

-Con el resto vas a abrir una cuenta en el banco y guarda la plata, ¿esta bien?-

*Su mirada es de confusión al escucharme hablar*

-Esto no me gusta Estrella, no quiero aceptar esa plata y que parezca que te estoy vendiendo-

*Niega con su cabeza mientras habla*

-No lo estas haciendo Dolores, no pienses así, a mí en realidad me gusta, él me hablo muy claro y me explicó lo que me puede ofrecer y yo acepte, eso es todo. Rey no es un niño, tú lo sabes y él también-

*Coloco mi cabeza en sus piernas al terminar de hablar*

-O sea que estas bien con el hecho ¿qué te de dinero a cambio de tu cuerpo?, una niña de diecisiete años tomando tal decisión, ¿ese hombre esta loco o qué?-

*Se escucha enojada y yo no la quiero ver, por eso tengo los ojos cerrados y acostada en su regazo*

-Mami no, no es así, yo sé que solo tengo diecisiete, pero tú estabas embarazada de mi papá a mi edad-

*Le digo y la abrazo sin moverme de sus piernas*

-Y no intento compararnos o juzgarte, es solo que como tú misma me dijiste, soy joven y cometeré muchos errores-

*Levanto mis rostro y la miro fijamente mientras hablo*

-Por favor no me dejes sola, estoy tratando de pensar cada paso que doy, quiero que podamos salir de esto bien libradas las dos, me crees ¿verdad?-

*Le digo y su mirada se ve triste*

-Claro que te creo mija, solo que esta situación me da mala espina, no crees que es mejor que le devuelvas su plata y te alejes de él-

*Me rió entre dientes de lo que dice*

-Mami, ojala todo fuera tan fácil-

*Me levanto y me siento a su lado en otra silla*

-Pero tú sabes quién es Rey, si me alejo de esa manera solo buscará otra forma de tenerme y yo prefiero hacer esto por las buenas, además nos beneficia a nosotras también y esa gente es mejor no hacerla enojar, tú mejor que nadie lo sabe Dolores -

*Sus lágrimas corren por sus mejillas*

-Dios mio... pero sí, tienes razón esa gente es mejor no enojarla, aceptaré y guardaré el dinero, pero solo lo hago por ti-

*Me dice mientras limpia sus lágrimas y me mira seriamente*

-Lo haré, pero con una condición-

-¿Cual?-

*Le pregunto intrigada*

-Quiero que me cuentes todo lo que pase con ese tipo y quiero que le digas que venga a hablar conmigo, tú sigues siendo menor de edad, así que por lo menos que tenga la decencia de dar la cara y no solo mandar souvenirs, ¿ok?-

*Me dice algo enojada y triste y yo la abrazo*

-Sí señora, le diré y veré cuando puede venir-

*Le digo y ella palmea mi espalda*

-Me imagino que ya no necesitas ir a la cabina de la esquina a llamar, puedes comprar un celular y así también podre llamarte-

*Me dice y nos miramos y me quedo en silencio un minuto*

-Yo ya tengo un celular-

*Cubro mi rostro al decir mis palabras*

-Con qué así es la cosa, entonces me guardas el número en el cascaroncito de celular que tengo-

*Me dice levantándose de mi lado*

-Te compraré uno-

*Le digo y ella camina a la nevera*

-No, entre menos le deba a ese señor será mejor -

*Me responde mientras se sirve agua y con el vaso en la mano me dice*

-Ve hablar con él, yo terminare de hacer la cena, ¿Ese hombre de afuera también va a cenar con nosotros? Ha estado en ese auto todo el día-

*Bebe el agua y yo me levanto de la silla*

-Le preguntaré, Dolores-

...

Estando acostada de nuevo en la cama de mi cuarto pienso en todo lo que acabo de hablar con Dolores.

¿Hice bien en decirle la verdad?, o ¿debí preguntarle a Rey si podría no venir con mujeres al barrio?.... ¡¡ja!! Yo en serio a veces me paso de ingenia. Él claramente no hará eso, así que no le doy tanta vueltas al asunto y busco mi celular y le envío un mensaje a Rey.

《Ya hablé con Dolores, quiere verte lo antes posible, también le dije que solo somos compañeros, no pareja y que tenemos un acuerdo. Por favor no seas descortés con ella el día que vengas》

*El mensaje llega pero no lo abren, debe estar ocupado, me fijo que no tiene foto de perfil, no es de extrañar. Busco el número de Car y tampoco tiene foto de perfil, abro el chad y le envío un mensaje*

《¿Quiere cenar?》

*El mensaje llega y lo abren al instante, un minuto más tarde me llega un mensaje*

《Muchas gracias, pero pronto vendrá a relevarme el compañero nocturno, siempre y cuando usted no tenga pensado salir a ningún lado. Volveré a las 5: 00 AM. Estaba apunto de llamarla a informarle, espero no le moleste que lo haga mientras contesto su mensaje》

Que hombre tan formal, ahora que lo pienso, se nota que tiene buen cuerpo y también parece joven... puede que tenga algunos veinte años, me quedo un minuto meditando mis pensamientos y me pregunto en que momento me volví tan pervertida mira que mirar a Car de esa manera, sí Rey se entera creo que nos mataría a los dos. La vibración del celular me saca de mis pensamientos, veo la pantalla y es una llamada de Car.

-¿Si?-

*Contesto*

-Señora, disculpe, no respondió mi mensaje y pensé que le molesto que le informará  por ese medio-

*Lo escucho al otro lado*

-¿Ha?, no, no, como crees, solo me quede pensando en algo-

*Miro el techo mientras le contesto*

-Entonces, ¿Me puedo retirar?-

*Me pregunta*

-Sí y no necesitas decirme, Rey me dijo que si quiero salir tengo que avisarte con anticipación así que si no te digo nada puedes irte sin problemas y algo más, no me digas señora, solo dime estrella-

*Le digo cortésmente, él se queda en silencio un segundo*

-Como desee seño... Perdón Estrella, que tenga buena noche-

*Me responde y cuelga inmediatamente sin dejar que diga nada más*