a veces siento que mi desconocido existe y me está buscando.
siento que hay alguien que me conose mejor que yo misma
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Fiesta de cumpleaños
"Pasaron varios años y la vida en la mansión continuó como siempre. Yo había crecido y me había convertido en una joven hermosa y astuta, siempre manteniendo mi secreto a salvo.
El duque era un excelente padre, le había dicho que quería pasar más tiempo con el, que no se fuera tan seguido, lo entendió y ahora somos inseparables. La duquesa me tenía vigilada, siempre sospechando que yo era más de lo que aparentaba. Y Sofía, era igual de tonta que siempre, bajo las faldas de su madre.
Mientras tanto, yo había estado entrenando, perfeccionando mis habilidades en esgrima y desarrollando mi poder. Era muy inteligente y había aprendido a controlar mis emociones y mis acciones. Con la esgrima, era muy buena, rápida y letal. Estaba lista para cualquier cosa que se presentara.
"Hoy era mi cumpleaños número 13 y la mansión estaba hecha un caos por los preparativos de mi fiesta. El duque quería tirar la casa por la ventana, quería que todo estuviera perfecto para su princesa. Los sirvientes corrían de un lado a otro, preparando la comida, decorando el salón y afinando la música. La duquesa y su hija, Sofía, estaban que echaban humo, sus rostros reflejaban la envidia y el resentimiento que sentían hacia mí. No podían soportar la idea de que el duque me tratara como a una princesa, mientras que ellas parecían ser relegadas a un segundo plano.
Me reí para mis adentros, disfrutando del espectáculo que estaban dando. Sabía que la duquesa y Sofía estaban celosas de la atención que el duque me brindaba, y eso me hacía sentir poderosa. Pero también sabía que debía mantener la guardia alta.
"La emperatriz... Me acorde de ella con cariño. es una mujer hermosa y dulce, con una sonrisa que iluminaba el salón entero. Me había invitado varias veces a su palacio, y yo había disfrutado de su compañía. Recordaba sus palabras de sabiduría y su sentido del humor. Es una mujer que sabe cómo gobernar con gracia y elegancia.
"La emperatriz me había confirmado que asistiría a mi fiesta de cumpleaños con su familia, lo que me hacía sentir emociona. Y no solo eso, sino que también estaría presente el príncipe Tomás, a quien iba a conocer por primera vez. Me habían dicho que era un joven apuesto y educado, pero no sabía qué esperar de él.
La duquesa y Sofía parecían estar alborotadas con la noticia, y no paraban de hablar sobre la importancia de causar una buena impresión en la emperatriz y su familia, que idiotas.
La fiesta estaba a punto de comenzar, y yo estaba lista para recibir a mis invitados. La música comenzó a sonar, y los sirvientes se apresuraron a ofrecer bebidas y aperitivos a los invitados. La emperatriz y su familia llegaron puntuales,
"El sirviente principal, vestido con su uniforme impecable, se adelantó y golpeó suavemente el suelo con su bastón. 'Su Excelencia, la Emperatriz y su familia', anunció con voz clara y fuerte.
La emperatriz entró majestuosamente en el gran salón, seguida por su esposo y su hijo, el príncipe Tomás. El sirviente continuó con las presentaciones. 'Su Majestad Imperial, la Emperatriz; Su Alteza Imperial, el Emperador; y Su Alteza Real, el Príncipe Tomás'.
La duquesa y Sofía se apresuraron a hacer una reverencia profunda, mientras que yo me incliné ligeramente, como me habían enseñado. La emperatriz sonrió y me besó en la mejilla. 'Querida, estás hermosa', me dijo.
El príncipe Tomás me miró con curiosidad, y yo le devolví la mirada. Era alto y apuesto, con ojos brillantes un como serio.
"Muchas felicidades, señorita Indira", me dijo el emperador con una pequeña sonrisa. "Oh, muchas gracias, Su Majestad", respondí con una inclinación de cabeza.
Emperatriz: "Cariño, estás tan grande y hermosa", dijo mientras me abrazaba. "Mira, deja que te presente a mi hijo, es Tomás, es la luz de mis ojos".
Me volví hacia el príncipe Tomás, que me miraba con una sonrisa.
Indira: "Encantada, príncipe Tomás", le dije haciendo una perfecta reverencia.
El príncipe se inclinó ligeramente "felicidades señorita Indira", me dijo con educación.
"Las mellizas no pudieron asistir, estaban un poco indispuestas", continuó la emperatriz, "pero te mandan sus saludos y besos". Me sonrió y me besó en la mejilla de nuevo.
La duquesa y Sofía parecían un poco molestas por la atención que la emperatriz me estaba brindando, pero traté de ignorarlas y disfrutar del momento.
'Mi padre me sonrió con cariño y yo le devolví la sonrisa.
duque: "Sus Majestades, es un honor que haya asistido a la fiesta de cumpleaños de mi hija", dijo el duque haciendo una reverencia.
La emperatriz sonrió y asintió con la cabeza. 'Es un placer, duque. Indira es una joven encantadora y nos alegra haber podido compartir este momento con ella', respondió.
El duque se enderezó y se acercó a mí, poniendo una mano en mi hombro.
"La duquesa se acercó con su hija, haciendo una reverencia ante sus majestades imperiales. 'Es un placer que estén aquí', dijo la duquesa. 'Ella es mi hija Sofía Blackwood ', añadió. Sofía hizo una exagerada reverencia."
"La emperatriz la miró por unos segundos e inclinó la cabeza ligeramente.
Emperatriz: "El placer es todo mío, no podía perderme la fiesta de cumpleaños de Indira', dijo mirándome con cariño.
