Negocios Con El Destino

Beatriz entro en la habitación y puso una silla detrás de la puerta…

[bien, asi asegurare la entrada, aunque, pensándolo bien ¿que podría hacer esta pequeña silla frente a esas manos del general? o sea… un solo empujón a la puerta y desarma todo… tenia que haber pensado mejor las cosas… pero, bueno como decían en el campo, los trabajadores del abuelo, ya estoy montado en el macho, asi que a enfrentar todo… ¡ahhhh! pensar que un par de metros mas allá, hay un hombre tan guapo, seguro, con voz varonil y una maldita coqueta sonrisa, es que es como esos villanos que salen en las historias, con una mirada tan azul ¡ahhhh! Bea respira… vinimos aquí a hacer historia, para hacer un negocio en otro imperio… ahora… si resulta todo sería maravilloso, con negocios aquí, no tendría miedo de mi padre...]

Mientras Beatriz continuaba pensando en su habitación, en la base militar del reino de Barnes, varios soldados eran reprendidos por el General Wilson.

General Wilson: ¿Por qué no detuvieron a esa mujer?

- señor, ella le dijo a usted ayer, que iría…

General Wilson: ¿Qué?

- señor ella le dijo que iría y usted le respondió que en el imperio no necesitarían de sus servicios

- es cierto señor, la verdad es que tampoco creímos que ella se atrevería a golpear las puertas

- asi es, menos que la dejarían entrar

General Wilson: ahora, cuando esa mujer vuelva, la traen directamente a mi oficina… la reina escribió que debíamos protegerla.

Una hora mas tarde, Beatriz se durmió profundamente… cuando despertó por unos golpes en la puerta, le costo un poco reconocer donde estaba…

General Lennox: Señorita Rhys, voy a la base vuelvo más tarde a desayunar

Beatriz: si señor…

[¡rayos! me quede dormida, tenia que haberme levantado antes…]

Ella se apresuró, se dio un baño rápido y salió de la habitación, se dio cuenta que había muchos mas ingredientes que el día anterior.

Beatriz: bien, el General quiere un desayuno… le haremos un desayuno buffet, como si estuviera en un hotel…

Beatriz se esmero en la preparación, e hizo una decena de variedades…

[no sé que le gusta comer, asi que hice de todo un poco]

Cuando el General volvió, encontró a Beatriz escribiendo en su cuaderno.

General Lennox: Buenos día señorita Beatriz

Beatriz: buenos días…

- buenos días señorita Rhys.

General Lennox: espero que no le moleste que haya traído al capitán Arasen a desayunar… no sabia si este desayuno era solo para dos…

Beatriz: ¿Qué? no… o sea… hay mucha comida…

Capitán Arasen: muchas gracias señorita

[El uniforme del General tiene muchas estrellas, serán por sus condecoraciones, se nota que sabe lo que hace, además es mucho mas alto y grande que los otros soldados]

Los hombres comenzaron a comer animadamente, Beatriz solo bebía un té… el capitán Arasen era el que más disfrutaba la comida.

Capitán Arasen: wow señorita Rhys, su comida es deliciosa, hay tanta variedad…

El capitán pensó que sería feliz desayunando todos los días asi… pero, sus pensamientos fueron interrumpidos, por el General.

General Lennox: capitán recuerdo que le pedí unos documentos ayer acerca de los entrenamientos

Capitán Arasen: si señor, lo haré hoy mismo

General Lennox: bueno, vaya ahora

Capitán Arasen: si señor, apenas termine de desayunar iré…

General Lennox: ahora… que va a decir nuestra invitada, que en el imperio no se obedece a sus superiores…

Capitán Arasen: si señor, muchas gracias señorita Rhys, espero después probar su comida.

Beatriz: eh… de nada…

General Lennox: después tendrás que pagar por su comida, posiblemente la señorita se instale con un negocio en el imperio.

Beatriz le sonrió genuinamente al General y él asintió…

Cuando quedaron solos, los nervios de Beatriz volvieron…

[¡ay! y ahora que le digo… ¿debería de hablarle de negocios? no, no, aún está comiendo]

General Lennox: señorita Beatriz ¿usted tiene familia en el reino de Barnes?

Beatriz: si señor, vivo con mis abuelos y mi hermano Bernard…

General Lennox: ¿Bernard es su hermano?

Beatriz: asi es… la verdad es que somos en total nueve hermanos, yo soy la octava y Bernard es el último, pero desde pequeños que vivimos con nuestros abuelos en el campo…

General Lennox: entiendo… entonces no tiene contacto con su padre

Beatriz: no señor, para mi los mas importantes son mis abuelos y mi hermano menor

General Lennox: entiendo…

Beatriz: ¿usted tiene abuelos?

General Lennox: no, mi padre los mató cuando yo era pequeño

Beatriz: santo cielo…

[dios mío, pobre General, quizás su padre es malvado]

La conversación fue interrumpida por que golpearon la puerta.

General Lennox: espere aquí…

Beatriz: si señor

Cuando el General volvió al comedor, miro atentamente a Beatriz, quien seguía escribiendo en su cuaderno.

General Lennox: señorita Beatriz, me informan que soldados Barneses la buscan en la puerta del imperio.

Beatriz: ¿Qué? eh… yo…

[pero, no me quiero ir, al parecer si tengo posibilidades de tener un negocio aquí, ¿me podrá obligar el General a irme? ¡dioses! y si me grita como le gritó a los soldados… no… no… pero, tampoco quiero que el General Lennox tenga problemas… ¿Qué hago?]