NovelToon NovelToon
Renaciendo De Fuego Libro #2

Renaciendo De Fuego Libro #2

Status: Terminada
Genre:Mafia / Malentendidos / Traiciones y engaños / Completas
Popularitas:581
Nilai: 5
nombre de autor: Mar-4538

La miro, estupefacto. Se ve tan hermosa con esa bata blanca, y la blancura de la habitación contrasta con su hermoso cuerpo latino que me enloquece. Siento que estoy soñando, pero se ve muy real. Cuando ella nota mi mirada, me quedo helado. La mirada que me daba antes era de amor... ahora es como si estuviera viendo a su peor enemigo.

—Por tu culpa mi vida se jodió —me dice, con la voz llena de rencor.

—No, Morgan, nena, yo traté de salvarte, te amo. Fui lo más sincero que pude contigo a pesar de lo que pasó con Madison —le respondo, desesperado.

—Por tu culpa estoy así.

—No, sabes que no es verdad —le insisto.

—Sí, estoy muerta por tu culpa. Solo tú tienes la culpa por haber entrado en mi vida. ¡TE ODIO! —me grita con todas sus fuerzas.

Trato de acercarme para abrazarla, pero cuando al fin la tengo entre mis brazos, se deshace, como si fuera de humo.

Me despierto sobresaltado, empapado en sudor. Mi respiración está agitada y siento mis mejillas mojadas por las lágrimas

NovelToon tiene autorización de Mar-4538 para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.

Capitulo: 14

CONNOR.

Intento enfocar mi vista en la carretera, para conducir bien y no provocar un accidente. En el auto de atrás vienen Dylan y Hunter. A mi lado se encuentra Madisson, y en el asiento trasero, inconsciente, viene Caleb. Sofía viene a su lado, con una cara de espanto total.

—¿Quién te llamó? ¿Qué te dijo para que te pusieras tan pálido? —me pregunta

Madisson, con un tono de fastidio.

Tardo unos minutos en responder y, justo cuando lo hago, me doy cuenta de que no se puede enterar de la verdad. Mi padre fue muy específico al decirme que si alguien más se enteraba de lo que me había dicho, todos estaríamos muertos.

Mientras busco una buena mentira, me calmo lo más que puedo y, después, hablo.

—Mi futura esposa. Solo me dijo que quería que conociera a su padre lo antes posible.

—¿Solo eso? En serio, eres un pésimo hermano. Caleb está inconsciente en el asiento de atrás y a ti lo único que te preocupa e interesa es que conocerás a tu suegro —dice, con enojo.

—¿Podrían dejar de pelear por un segundo? ¿A dónde vamos? —pregunta Sofía, con una voz nerviosa.

—Iremos a casa de Caleb —le respondo rápidamente.

—¿Qué? ¿Estás loco? ¿No viste que tiene la cara completamente cubierta de sangre? Deberíamos de llevarlo a un hospital —le reclama Sofía a Madisson.

—No entiendo —dice Madisson.

—¿Qué es lo que no entiendes? —le responde Sofía, con rabia.

Yo solo ruedo los ojos, ya que sé cómo acabará esto.

—¿Quién eres tú para opinar sobre algo relacionado con Caleb?

—¿Disculpa? A ver, "aparecida", soy su amiga —dice Sofía, con un tono burlón.

Miro de reojo a Madisson, y su sonrisa lo dice todo.

—No hables, Madisson —le digo.

—Oh, vamos, Connor, ella debe de saber la verdad.

—¿Y de qué verdad hablas? —pregunta Sofía, con voz fuerte.

—No eres su amiga... eres su juguetito nuevo.

—Eres una perra —responde Sofía.

—Y tú una zorra.

—Y tú, maldita p...

—¡Basta! Dejen de pelear, carajo. Pronto llegaremos a casa de Caleb, y espero que para entonces estén tranquilas y ya no parezcan unas novias celosas —les grito, harto de su actitud.

—No estamos celosas —gruñen al mismo tiempo.

No sé en qué estaba pensando cuando les pedí que vinieran conmigo. En este instante, estoy deseando tener a Dylan y Hunter hablando de cualquier idiotez.

—Bueno, sobre Caleb, no se preocupen, estará bien.

—Pero está sangrando demasiado —dice

Sofía, con voz nerviosa.

—Es mi hermano, bueno, mi medio hermano. A pesar de conocerlo hace poco tiempo, sé perfectamente que es un exagerado —digo, tratando de calmarla.

—¿Entonces no debo de preocuparme?

—A ver, "queridita" Sofi, entiende, niñita, no va a morir por un par de golpes —dice Madisson, mirando hacia atrás, y luego vuelve la vista a mí y me pregunta—: ¿De dónde demonios la sacaron?

—Madi, por favor —le suplico, con voz cansada.

—Dale, ya no le diré nada más —acepta.

—Madisson, ahora que lo pienso, ¿cómo es que llegaste aquí? Hasta donde recuerdo, me dijiste que ya no volverías y que te quedarías permanentemente en España.

—Bueno, no recuerdo muy bien. Todo está un poco borroso. Recuerdo que estaba caminando por las calles de Madrid, sola, y me detuve a ver una tienda de zapatos. De pronto, sentí que alguien me tomó por atrás y me metió en una camioneta.

—¿Y viste quién era? —le pregunto, con el corazón acelerado.

—Al principio no, después me di cuenta de que era mi padre... Me dijo algo de un regalo para alguien.

—¿No te dijo para quién?

—No. De hecho, me sorprende que me dejara ir así, sin más, y que me trajera hasta aquí. Lo que le convenía era matarme, pero... ¿por qué no lo hizo?

—La verdad, no sabría decirte. Todo esto me parece muy extraño y revuelto. Él escapó después de que Morgan se quitó la vida, ¿por qué ahora vendría a aparecerse como si nada y solo para regresarte aquí con nosotros?

—Sinceramente, todo me parece algo completamente extraño, pero presiento que algo grande está por venir.

Dirijo mi vista a la carretera cuando, en mi campo de visión, aparece la casa de Caleb. Observo que hay varias camionetas estacionadas afuera y, rápidamente, me pongo en alerta.

—Connor, ¿invitaste a alguien? —me pregunta Madisson.

Niego lentamente y le pregunto.

—Madisson, ¿tú invitaste a alguien?

Ella niega rápidamente en respuesta.

Detengo el auto un poco antes de llegar a la casa y lo apago. Después, abro la guantera y saco mi arma.

—¿Desde cuándo llevas una pistola contigo, Connor? —me pregunta Madisson, con asombro.

—Madi, solo cállate y quédate en el auto —le digo, con voz firme. Bajo con cuidado y, antes de caminar, volteo a ver el interior del auto—. Y trata de no pelear con Sofía.

Comienzo a caminar hacia la casa, mientras recargo la pistola. Cuando me estoy acercando, me doy cuenta de que hay demasiados hombres armados. Al verlos, me quedo petrificado. La idea de que sea mi padre me da mil vueltas en la cabeza. Si es él, probablemente esta noche moriré.

Estoy tan asustado y sumido en mis pensamientos que no me doy cuenta de que una mujer está parada frente a mí hasta que dice mi nombre.

—Connor, nos volvemos a ver.

1
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play