El Renacer De Una Tirana.

Scott estaba ya en su casa y le había contado a sus padres lo que paso en la mañana, en como resulto que Roxane es la CEO de Empress la compañía más exitosa de publicidad y marketing, además de que negó sus servicios a él y la empresa de los Walker, empresa a la cual los padres de Scott le han invertido miles de dólares.

— imposible...tal vez la empresa es de su amante en tunro y por eso llegó hasta donde esta...— argumenta el señor Collins.

— no papá, ya investigue, ella es la dueña, su amiga esta como socia...— responde Scott.

— entonces si ella tiene tanto...Scott, es mejor que te cases con ella, sería la solución a todos nuestros problemas.— sugiere la señora Collins.

— que cosas dices mamá. Mi hermano la traicionó con Leysa, ¿crees que Roxane volverá con su ex infiel?— Erin se burla.

— cállate, ¿tú que sabes?, fue esa mujer la que se metió con otro, debería agradecer que queramos que tu hermano se case con ella.— reclama la señora Collins.

— ay por favor, Roxane estaba muy enamorada de mi hermano, nisiquiera averiguaron que paso y la sentenciaron.— Erin ya mejor se retira, pero espera que Roxane no caiga de nuevo con su hermano.

Los padres de Scott y este, se quedan discutiendo, si bien sus padres solo quieren que regrese con Roxane por su estatus actual, en realidad Scott solo quiere tenerla de regreso, en especial porque sabe que hay otros hombres interesados en Roxane, como Misha Kovalev.

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Misha ha llegado con Andrei a un edificio cuyo último piso era un lujoso club, con piscina, bar y una terraza que daba una vista maravillosa. La música estaba a todo dar, personas bailando y bebiendo.

Misha camina hasta la terraza hasta ver a un hombre algo mayor sentado y acompañado de bellas mujeres.

— como siempre disfrutando de las mejores mujeres.— comenta Misha.

— Kovalev, justo a tiempo.— sonríe el hombre.

Misha toma el asiento que esta a lado de aquel hombre, cuyo nombre era Giovanni Caruso, uno de los jefes más importantes del bajo mundo y con quien Misha suele asociarse. Giovanni hace que las mujeres se vayan para poder hablar más tranquilo con Misha.

Andrei por su parte, se mantiene cerca, esperando a su jefe, cuando ve llegar a alguien interesante, era Roxane quien entro en compañía de un par de chicas identificas, Andrei sabe que esas chicas no están en la investigación que hizo, pero parece que la castaña optó por contratar guardaespaldas.

Roxane se detiene en la barra pidiendo una bebida, pero, claro, desde esa distancia Giovanni nota a la joven y sonríe, llamando al mesero al cual le dice algo al oído, el mesero asiente. Misha noto todo, y sabe que seguramente su socio vio a una mujer que le gusto y ya empezó a seducirla.

Sin preguntar nada, su conversación sigue, hasta que el mesero regresa diciendo que la señorita rechazo la bebida, dicho esto, Giovanni frunce los labios, pero le pide al mesero retirarse.

— ¿quien se atreve a rechazar al gran Giovanni?— pregunta con burla y tose un poco ya que había tomado un sorbo de su bebida.

— bella, ¿no?, se hace la difícil, pero esta noche es mía.— menciona Giovanni.

— Giovanni, mejor déjalo, no te recomiendo que insistas.— le advierte.

—¿la conoces?, ¿es tuya?, si es así mándamela cuando te aburras de ella.— ríe.

— no es mía, pero, debes de saber que fui herido en el hombro...estas viendo a la causante y sigo vivo porque así lo quiso.— responde con calma.

—¿hablas en serio?, que blando eres, pero no me asusta.— se pone de pie.— esta noche me la llevo a mi cama.

El hombre ignorando la advertencia de Misha, sigue su camino hacía Roxane al cual ve irse hacía el barandal de aquella terraza.

Misha solo niega, mientras que Andrei se acerca para decirle que probablemente pierda un socio. Y no estaba muy equivocado, porque no tardan en escuchar un grito, Misha y Andrei se dirigen hacía el lugar, las personas estaban amontonadas en ese sitio y cuando Misha se abrió camino, ve como su socio esta colgado de cabeza en el balcón siendo sostenido de los pies por las gemelas. Roxane estaba de pie sonriendo ante la evidente expresión de terror de aquel hombre.

— por eso cuando una mujer dice no, te das la vuelta y te vas...— le explica Roxane.

Los hombres de Giovanni apuntan con sus armas, pero saben que si disparan su jefe cae al vacío.

— señorita Blakely, estamos en público, esto podría costarle su libertad.— le advierte Misha.

— ¿te preocupas por mi, tigrillo?— sonríe ladina.

Roxane le hace una seña y las gemelas suben al hombre tirándolo en suelo, este respira agitado debido al pánico que ha sentido al estar colgado en el vacío. Los hombres de Giovanni se preparan para disparar pero Misha les ordena que no.

— si aprecian su vida, bajen sus armas...— les ordena.

—¿que haces?, esa perra quiso matarme...matenla.— grita Giovanni.

— Giovanni.— niega.— estamos en público.— le recuerda.

Giovanni se pone de pie, dándole una mirada de odio a Roxane, pero ella se mantiene tranquila, ni pareciera que esta siendo apuntada por armas, incluso las dos chicas estaban quietas, nisiquiera parecían llevar armas.

— ¿quien carajos es esa puta?— pregunta Giovanni.

— ¿puta?, ahora resulta que soy puta porque te rechacé...entonces tu eres...marica...porque no eres lo suficientemente hombre como para llamar mi atención.— se burla.

Las gemelas ríen por el insulto de Roxane, pero Giovanni se veía más molesto, incluso había tomado el arma de uno de sus hombres y apunta a Roxane disparando, ante el estruendo, todos los que estaban ahí salen corriendo entre gritos y empujones. Misha no pudo reaccionar a tiempo, pero logra quitarle el arma a Giovanni y voltea hacía Roxane, quien estaba quieta, al parecer la bala no logro darle y respira aliviado.

— déjame matarla, nadie humilla a Giovanni Caruso y sale vivo.— exige.

— déjala ya...— responde con voz firme.

Roxane simplemente se da la vuelta y se marcha acompañada de las gemelas, mientras que Giovanni solo empieza a maldecir, jurando que encontrará a esa mujer y acabará con ella.

— no lo harás, esa mujer no es como cualquier otra, ya lo has visto, pudo haberte tirado.— le advierte Misha.

— y lamentara no haberlo hecho.— sentencia.

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