El Corazón Del Rey

Avery caminaba de un lado a otro en aquella mugrienta celda, ya habían pasado algunas horas desde que fue detenida y el estúpido de su abogado no aparecía, pensaba en una y mil formas de castigar a Axel sin tener que matarlo, después de todo era su hermano y el padre de su adorada sobrina, miro a un policía entrar era gordo y feo, la miro de pies a cabeza, esa mirada le causo repulsión a Avery, el hombre comenzó a salivar provocando nauseas en ella, quería vomitar en esos momentos.

- Acércate y te mató – Lo amenazó Avery.

 El policía rio como desquiciado se lanzó sobre ella y trato de detenerlo, ese hombre buscaba la manera de besarla, eso causaba más asco en Avery, le dio una patada en la entre pierna y trató de salir, pero el hombre la jalo del cabello y la tiro al suelo.

Avery trato de quitarse a ese hombre de encima, los estúpidos brazaletes de bloqueo eran un estorbo de no tenerlo ya habría matado al hombre, además extrañamente ese policía tenía demasiada fuerza a pesar de su físico, el hombre arranco su fina blusa dejando al descubierto sus senos, ella seguía forcejando, le dio una fuerte bofetada arañando su mejilla, el hombre gruño y golpeo con puño cerrado el rostro de la chica, ella escupió sangre, jurando matar a ese hombre, nadie salía vivo después de lastimarla, el hombre comenzó a acariciar sus piernas, Avery sentía repulsión al sentir las ásperas manos de ese hombre llegar hasta sus muslos, dejo de forcejear y cerró sus ojos, tenía que concentrarse y expulsar su magia de modo que los bloqueadores quedaran inservibles, pero antes de que eso pasara, sintió liberarse de ese pesor.

Erick llegó justo en el momento indicado, cuando vio en la situación en la que se encontraba Avery, no dudo en tomar a ese hombre del cuello y a pesar de su complexión lo lanzó fuera de la celda, miro a la mujer en el suelo, estaba demasiado tranquila, dirigió su mirada a los bloqueadores comenzaron a chispear como si se hubieran descompuestos.

- Avery- La llamó, ella abrió los ojos y trato de ocultar su emoción de verlo, ella se levantó.

- ¿Qué sucede? – Llego Omar con unos policías miraron al gordo policía en el suelo su cabeza calva sangraba.

- Lo voy a matar- Gruño Avery lanzándose contra el policía gordo, pero Erick la detuvo a tiempo, rodeando sus manos en su cintura, ella pataleaba y lanzaba manotazos al aire.

- Cálmate loca- Susurro molesto. – Comandante ese hombre ¿Quién es? – Preguntó Erick sin soltar a Avery quien se había quedado quieta en sus brazos.

- Un policía de intercambio- Respondió Omar, dirigió su mirada hacia Avery desviándose sin querer a sus senos, lo mismo miraban los otros policías.

Erick notó esas miradas, coloco a Avery detrás de él, se quitó su gabardina y se la entregó, ella se la puso y sonrió al sentir el aroma de él impregnarse en ella.

- ¿Qué haces aquí? – Pregunto Omar, él era quien lo había enviado a Jade, conocía las capacidades de Erick y sabía que sería de gran ayuda en ese interrogatorio, pero no pensaba que volviera tan pronto y mucho menos encontrarlo en la celda de Avery Carter.

- Me entere que la señorita Carter fue detenida, como sabe, estoy a cargo del caso del secuestro de ella y su sobrina Evelyn Carter – Comentó, Omar asintió.

- Jefe, llegó el abogado de la señorita Carter- Dijo un policía al llegar.

- Al fin, ese estúpido llegó- Soltó Avery con molestia, Erick le dirigió la mirada, su gabardina le quedaba enorme, pero la cubría totalmente.

- La llevare con él – Dijo Erick, dos policías se acercaron con unas esposas, Erick frunció el ceño- No es necesario, ya tiene brazaletes de bloqueo- Los miro con seriedad, los policías dirigieron la mirada a Omar quien hizo señas para que se alejaran.

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Axel estaba en la sala de visitas, cuando entró su hermana en compañía de Erick, la miro de pies a cabeza, sabía que esa gabardina no era suya, su hermana no usaría algo tan grande y mucho menos que cubriera todas sus curvas, miro su mejilla roja y su labio partido, frunció el ceño.

- ¿Quién te hizo eso? – Preguntó molesto, a pesar de ser alguien que parecía no importarle nada, su hija y su hermana eran lo más importante, Avery sabía defenderse sola, pero eso no quitaba el hecho de que se molestara verla así.

- Un policía cerdo, encárgate de atraparlo, pero no lo mates, lo hare yo personalmente- Dijo con una sonrisa, Axel asintió.

- Bien, pero lo golpeare un poquito- Se acercó a ella y examino su mejilla. – Ya me informé de todo, ¿Cómo es que dejaste evidencia después de matar a tu amante? – Preguntó, Erick frunció el ceño, había apenas llegado que no tuvo tiempo de informado de todo, solo sabía que se culpaba de la muerte de Marco Antonelli.

- Anoche lo hice explotar, no debe haber cuerpo, no completo- Soltó Avery entre dientes.

- Esto dice lo contrario- Axel se acercó a la mesa y tomo una carpeta, Erick extendió su mano para que se la entregara.

- Es imposible- Soltó Erick al ver las imágenes del cadáver de Marco- Estuve ahí cuando lo hizo volar en pedazos- Susurró mientras miraba de reojo las cámaras que habían ahí, conocía a Axel sabía que no hablaría así con tranquilidad, era obvio que ya se había encargado de desconectar las cámaras.

Erick siguió hojeando las imágenes hasta encontrarse con aquellas fotografías donde Avery tenía sexo con ese hombre, frunció el ceño y dirigió la mirada a ella, parecía demasiado tranquila, confiaba en que Axel la sacaría pronto de ese lugar.

- ¿Qué le dijiste a la policía ayer? - Avery se dirigió a Erick, él se había encargado de la situación de anoche.

- Que sufriste un atentado y te defendiste, sin saber quiénes eran tus atacantes- Respondió, Axel escuchó y asintió.

- El atentado lo sufriste después de salir de tu nido de sexo ¿No? – Preguntó ahora Axel, Avery asintió- ¿Tu como llegaste ahí? ¿Tienes vigilada a mi hermanita? – Se burló, Avery lo miró, no se había percatado de eso, pero Erick llegó de la nada a ese lugar.

- Solo di lo que tienes en mente- Soltó Erick con molestia, no respondería para nada a las preguntas de Axel.

- Eres un testigo, las traumáticas fotografías de mi hermanita, no son de anoche, son de días antes, así que podemos cambiar la situación y decir que no estabas anoche con Marco, sino contigo- Propuso con diversión, Erick negó, no quería que lo involucraran de esa manera con Avery. – Es la única forma de sacar limpia a mi hermanita de aquí, si ella hizo explotar a Marco, ¿Cómo es que hay cadáver de él? ¿Cómo llego toda esta información a manos de la policía?  Si todo desastre que ella arma es borrado de inmediato – Agrego, Erick suspiró con pesadez, Axel tenía razón, antes de responder, Omar y un grupo de policías entraron.

- Lo sentimos, pero al parecer hubo una falla en las cámaras- Dijo mirando a Axel quien lo miro con falsa sorpresa- ¿Erick? – Lo miró.

- Tengo que hacer una declaración – Hablo Erick resignado- La señorita Carter no fue quien mato a Marco Antonelli, lo sé…porque estuve con ella anoche – Soltó entre dientes, Avery abrió los ojos de sorpresa y Axel contenía su risa.

- ¿Qué? ¿Cómo que estuviste con ella? – Preguntó Omar con cierta molestia.

- Si bueno, paso y ya- Respondió llevando una mano a su cuello.

- ¿Tienes pruebas? – Preguntó nuevamente Omar.

- Las hay- Hablo Axel, se dirigió a la mesa y tomo una carpeta roja, se la entregó a Omar, él la tomó y comenzó a leer su contenido, miro con sorpresa a Erick y luego a Avery.

- ¿Qué es eso? – Se acercó para ver el contenido, Erick fulmino con la mirada a Axel quien sonreía de oreja a oreja.

- Anoche, la señorita Carter y el detective Leroy, se reunieron para firmar el acuerdo de divorcio, pero una cosa llevo a la otra y al parecer hubo reconciliación – Explicó Axel, Avery suspiro con pesadez y negó, pensando en cómo pudo confiar en el estúpido de su hermano.

- ¿Estás casado con Avery Carter? – lo miro Omar sin creer- ¿Desde hace un año? – Volvió a preguntar, Erick apretó sus puños con coraje, eso no estaba en sus planes, pensaba solo decir que se acostó con Avery después de que se le asignara el caso de su secuestro.

- Te voy a matar- Gruño Erick señalando a Axel, quien se encogió de hombros, eso para él era muy divertido.

- Es por eso que no pueden culpar a mi clienta del asesinato de Marco Antonelli, además ella tuvo un atentado anoche, el detective Leroy se encargó de todo pues ella actuó en defensa propia – Continuo Axel.

- Los hizo explotar, eso también se considera un delito- Explico Omar dejando a un lado su sorpresa de que su mejor detective estuviera casado con la reina del bajo mundo.

- Fue defensa propia, era su vida la que estaba en juego, podrá pagarse la fianza no importa la cantidad…Además de momento se le acusa de la muerte de Marco Antonelli y al no tener pruebas suficientes dado que podemos confirmar la coartada de la Señorita Carter con su testigo el brillante detective Erick Leroy, no tienen ningún motivo para tenerla aquí- Sonrió Axel triunfante- Además también vamos a demandar, pues mi clienta fue atacada por un policía y de no ser por el detective Leroy, pudo pasar algo peor- Agregó y a peor se refería que su hermana pudo haber destruido todo ese edificio, pero Omar no lo entendió de esa manera.

- Bien, nos encargaremos del papeleo para liberar a la señorita Carter- Dijo Omar molesto y dirigió su mirada a Erick- Tienes que explicar esto- Señalo la carpeta roja y se la entrego, salió con los policías.

- Vaya, pensaba en como matarte por llegar tarde, pero estás perdonado- Comentó Avery con una gran sonrisa, por fin saldría de ese asqueroso lugar.

- No era necesario decir que estoy casado con ella- Se quejó Erick- ¿Por qué no solo dijiste que la folló y ya? – Se acercó de manera amenazante.

- Porqué es más divertido así…- Se encogió de hombros, Erick soltó una que otra maldición, los dos hermanos Carter estaban locos y eran dolores de cabeza.

Avery no dijo nada más, se quedó pensando en todo lo que había sucedido, aun sentía las asquerosas caricias de ese policía en ella, no lo perdonaría a pesar de que solo fueron caricias, ella jamás dejaba que la tocara un hombre que no quisiera, lo haría pagar, se sintió humillada al no poder defenderse y eso era algo que no toleraba.

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Mila estaba con Evelyn en la mansión Carter, no podía quitarse de la mente lo que hizo con Axel Carter la noche anterior, cuando ya se sentía tan excitada él se detuvo y le dijo que fuera a dormir, no volvieron a tocar ese tema, bueno tampoco tuvieron tiempo, regresaron esa mañana y él se marchó en cuanto las dejo a salvo en la mansión, trataba de meterse en mente que no podía repetirse aquella acción, pues Axel Carter solo la veía como una diversión pasajera.

- Mila, ¿Qué tienes? – Preguntó Evelyn, ella sonrió.

- Lo siento, es que…estoy algo preocupada por la universidad, nunca había faltado a clases- Mintió, Evelyn asintió.

- Tranquila, no te afectaran las faltas, papá no lo permitirá, además me gustó mucho que nos acompañaras, aunque fue muy corto se sintió muy bonito, era como si viajara en familia, con un papá y una mamá- Se acercó a ella y se sentó en su regazo, Mila sonrió con ternura, Evelyn realmente necesitaba una familia completa, alguien quien fuera una madre como ella, Axel Carter debía pensar en eso y dejar a un lado esa vida que lleva ahora, por el bien de su hija.

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Después de que Avery fue liberada lo primero que ordeno fue buscar a ese asqueroso policía, lo mataría con sus propias manos por haberse atrevido a tocarla, para su desgracia Axel le mostró una imagen de ese gordo policía muerto, le habían arrancado los brazos y la lengua, su rostro mostraban una mirada llena de miedo a pesar de que ya estaba muerto.

- ¿Quién mierda se atrevió a matarlo antes que yo? – Soltó Avery molesta.

- Quien sabe…- Soltó Axel con una leve sonrisa, tenía una ligera sospecha, pero ¿Se había atrevido su cuñado a matar a un colega?  Dirigió su mirada a su hermana, ella aún llevaba puesta la gabardina de Erick, iban en el coche camino a la mansión, Erick se pudo haber negado a participar en la coartada y no era que eso le importara, pues si lo hacía ya tenía un plan b, mejor dicho el verdadero plan para liberar a su hermana, usar a Erick como coartada y evidenciar que está casado con su hermanita, solo era una de sus bromas, no pensó que fuera a caer así de fácil, ahora solo debía deshacerse de toda evidencia del plan original, si Erick se enteraba ahora si intentaría matarlo sin importarle el destino que tuvieran y no era como si lo asustara, pero sabía que una pelea entre arcanos estaba de más en estos momentos.

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Erick salía del baño después de darse una larga ducha , no tuvo ganas de seguir trabajando ese día después de todo lo ocurrido, saco una cerveza de su refrigerador y se sentó en el sofá, subiendo sus piernas sobre la mesa de centro, recordó lo sucedido, el interrogatorio de ese hombre, mencionando a la pureza y a la reina, después el policía que trato de abusar de Avery, se marchó antes de que fuera liberada, llegando a las fueras de ciudad Topacio en un terreno baldío estaba ese hombre atado de brazos y piernas y amordazado, recordó cuando le quito la mordaza, el hombre comenzó a gritar como loco.

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“La pureza, que quiere, la reina que necesita, están aquí, están aquí…

Eso fue lo que dijo, las mismas palabras que el hombre en ciudad Jade, eso significaba que alguien estaba manipulando a los hombres con mentes débiles para buscar a la reina y al ser celestial, pero ¿Quién?

Esa hembra debe ser mía, me la voy a coger, será mía, esa hembra, haré que grite mi nombre la puta Avery Carter

Dijo después, su saliva caía en gran cantidad, su rostro era el de un desquiciado, le recordó al prisionero de Ciudad Jade, seguía repitiendo esas palabras, que lo hacían enfurecer a cada segundo hasta que no soporto más.

- No volverás a tocarla- Gruño, lo sujeto de los brazos y se los arranco, la sangre salpico en su rostro y ropas, el hombre gritaba con desesperación, Erick no se detuvo ahí, sin pensarlo arranco la lengua de ese hombre- Tampoco volverás a decir su nombre – Susurró con la lengua de ese hombre en sus manos, se desvaneció en el aire.

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Volvió a la realidad, su ira se calmo una vez que castigo a ese hombre, sabía que no hizo bien en matarlo, pero él se lo busco además le dio una muerte rápida, conociendo a Avery lo haría sufrir incluso más, suspiró, no podía creer que haya reaccionado de esa manera solo porque insultaron a Avery Carter, la mujer lo atraía demasiado, le era difícil admitirlo, pero era así y desde la noche anterior que volvieron a tener sexo de esa manera en la que pudo someterla, no había dejado de pensar en ella, tanto fue su ira al llegar a la celda y ver como ese hombre la estaba sometiendo, ella ni siquiera se defendía, eso lo enfureció.

- Te haz portado mal y debes ser castigada- Una sonrisa torcida se asomó a sus labios, revelando una intención oculta.