Besos Prohibidos

Esa mañana de domingo nos levantamos temprano Julieta estaba apurada por ir a ver a su padre, así que nos alistamos y bajamos las escaleras

Julieta se dirigía a la salida y yo la detuve

-a donde cree que va señorita le dije con una ceja arqueada y cruzándome de brazos

-a ver a mi padre, porque?

-no, primero desayunaremos y luego iremos, no quiero que te descompenses

-cariño me dijo mientras yo la tomaba de la mano y la llevaba al comedor

Desayunamos y luego sí, salimos rumbo a la clínica

-papito dijo Julieta al abrir la puerta

-pequeña dijo él extendiendo sus brazos para abrazarla

-como pasaste la noche?

-muy bien, gracias a dios dijo el

luego nos acomodamos en el sillón que estaba a un lado de él

Pero al entrar una enfermera a controlar a Luis pude notar que ella me miraba y por lo que vi, Julieta también lo noto

La enfermera hablaba con Luis y de vez en cuando me miraba y me dio una sonrisa coqueta, Julieta me tomo de la mano y me acomodo el cuello de mi camisa, yo la miré y le sonreí tiernamente

Al irse la enfermera esta me reclamo

-pero que enfermera más descarada, y tú que no decías nada, y se cruzó de brazos molesta

-pero cariño que querías que le dijera?, pregunte

-no lo sé, pero no me gusto su actitud y la tuya tampoco y se levantó de mi lado

Luis me miro y se rio de lo que estaba pasando, yo no sabía que hacer, estaba acostumbrado a que las mujeres me coquetearan, pero yo no les daba gran importancia

Después de un rato salí en busca de unos cafés y me cruce con la misma enfermera de la mañana y la pare para hablar

-señorita, disculpe dije

-si, dígame y me volvió a sonreír coqueta

-le quería informar que soy un hombre comprometido, y la hermosa mujer que se encontraba a mi lado es mi prometida, así que le pediría que se mantenga en su labor de ser posible

-claro señor, disculpe y se fue

cuando me di la vuelta vi a Julieta mirarme muy enojada, ahora sí que ya no entendía nada, la seguí hasta la habitación de Luis y al entrar esta estaba parada al lado de la ventana mirando por ella cruzada de brazos enfadada

-cariño le dije, pero ella no respondió -amor?, volví a decir acercándome a ella

-que quieres Marcos me dijo

la tome por los brazos, la gira para que me mirara y le dije

¿-amor, que pasa?

-tanto te gusto esa enfermera que la fuiste a buscar para hablar?

-no cariño, no fue así

-entonces?

-cariño solo le dije que era un hombre comprometido y que la hermosa mujer que estaba a mi lado, era mi prometida

Ella me miro con ojos grandes y me dijo

-pero no soy tu prometida, el tono de su voz era triste

Pero yo metí mi mano al bolsillo de mi pantalón, saque una pequeña caja color negro y me arrodille abriéndola

-Julieta Sanz, me harías el hombre más feliz al poder compartir la vida juntos?, quieres casarte conmigo?, le dije

Pude notar sus ojos comenzar a llenarse de lágrimas y me respondió

-SIIII!!!!, mi amor, quiero casarme contigo y me abrazo y beso

Yo me levante y le coloqué el anillo en su dedo y la abrace mientras la volvía a besar, pero nos separamos al escuchar a Luis

-uno no se puede dormir tranquilo que cuando despierta le proponen casamiento a su hija

Los tres reímos

-a ver pequeña dijo Luis y Julieta se acercó a mostrarle el anillo y este la felicito y a mi igual

Ya en la tarde nos despedimos de Luis y volvimos a la casa, al llegar nos recibió Cecilia

-Cecilia!!, grito Julieta al verla, yo me sorprendí por la reacción de ella y creo que Cecilia igual -mira!, le dijo emocionada mostrándole el anillo en su mano -Marcos me propuso matrimonio finalizó

-oh señorita que alegría, es muy hermoso!!, los felicito y se abrazaron, luego me miro a mí y también me abrazó

-gracias Cecilia dije algo avergonzado, la verdad es que tenía confianza con Cecilia, ella trabajaba para mí hacía más de 20 años

-entonces esto merece una cena especial dijo Cecilia y se fue a la cocina

-cariño?, le dije a Julieta

-si amor me contesto ella mirando su anillo

-desde cuando tienes esa confianza con Cecilia?

ella me miro extrañada y me pregunto

-porque te molesta amor?

-no claro que no me molesta, solo que no sé cuando se hicieron tan íntimas nada más

-cuando llegue aquí, ella me trato muy bien y la estimo demasiado en tan poco tiempo

-bueno amor, que bueno, porque ella es muy importante para mí, ya que hace muchos años que está conmigo finalice

Fuimos caminando hacia el comedor y al sentarnos ella me hizo una pregunta que la verdad me sorprendió

-amor, a nuestro casamiento vendrán tus padres?

yo me puse tenso, la verdad era que no tenía muy buena relación con ellos ya hacía algunos años

-mmm no lo creo amor

-pero porque?

-no tengo buena relación con ellos dije

-o tienes miedo de su reacción al verme dijo

-claro que no, tú eres la mujer de mi vida, y lo que los demás piensen no me importa

-bueno mi amor, pero me gustaría que ellos estuvieran compartiendo ese momento contigo

-bueno cariño como tú los deses dije

luego Cecilia trajo la cena y comimos, después nos fuimos a la habitación y nos bañamos para dormir, nos acostamos y Julieta se durmió rápidamente, yo me quede despierto, la verdad era que no podía dormir pensando en el pedido que me había hecho Julieta, así que me levante de la cama sin despertarla, tome mi teléfono y llame a mi madre

Como ellos vivían en Europa ya era de día allí

-hola hijo, a que se debe este milagro de que te acuerdes de llamar a tu pobre madre

-hola madre, te llamo para informarte que me voy a casar dije

-eso ya lo sabía hace cuatro años hijo cuando nos presentaste a esa cazafortunas, por eso no pensamos ir con tu padre

-madre no me casaré con Valeria, me casaré con Julieta dije

-Julieta?, pero no comprendo dijo algo desconcertada

-madre deseo que vengan a conocerla, y que dejen sus prejuicios por favor

-está bien hijo, pero si es otra cazafortunas te lo diré dijo

-está bien, pero ella es completamente diferente dije mientras la miraba dormir

-está bien hijo, iremos en estos días con tu padre, hasta luego

-hasta luego madre y colgue

después de eso ya me acoste y pude dormir junto a mi angel.