Desde Esa Noche Que Te Ví

Me sentía destrozada, tres años buscando un hijo y jamás se lo puede dar, y ahora esperaba su primer hijo con otra, el dolor que sentía era inexplicable y no podía parar de llorar, todo mi mundo se había derrumbado con esa noticia

— Carol que haces?, por favor escúchame, hablemos, te lo suplico no quiero perderte por favor, escúchame yo te amo por favor juntos podemos solucionarlo — me dice desesperado al verme empacar todas mis cosas

— QUE VAS A SOLUCIONAR? DIME QUE MIERDA VAS A SOLUCIONAR, YA NO PUEDES SOLUCIONAR NADA, ESPERAS UN HIJO CON OTRA, ESA ES LA REALIDAD, ESTO SE TERMINÓ, NO QUIERO SEGUIR MAS CONTIGO, ME HAS DESTROZADO EL CORAZÓN Y ESO NO LO PUEDES SOLUCIONAR — le digo a los gritos ya no pudiendo controlar mi estado depresivo

— NO, NO, ESTO NO SE PUEDE TERMINAR, YO NO QUIERO PERDERTE, por favor mi amor, te lo suplico perdoname, busquemos una solución, pero por favor no me dejes — me súplica él desesperado y reacio a que esto se termine

— YA BASTA, SE TERMINÓ, MAÑANA MISMO ME IRÉ — grito al borde del colapso — ya no puedo más, ya no aguanto más, jamás pude darte un hijo y ahora tu esperas uno con otra, sabes cuánto dolor me generó eso?, entendí que soy yo el problema, soy yo la que no sirve, yo soy el estorbo en tu vida — digo cayendo de rodillas al piso ahogada en un mar de lágrimas por la depresión que siento en este momento

— Lo siento, lo siento mi amor, lo siento tanto, perdoname, todo es mi culpa — dice él arrodillándose frente a mi y comenzando a llorar también — que quieres que haga?, dime qué debo hacer? no puedo dejarla a su suerte con el embarazo, es mi hijo el que espera, pero tampoco quiero perderte mi amor, por favor busquemosle una solución te lo suplico — sigue suplicando desesperado

— Ya es tarde, lo nuestro se terminó, está relación ya no tiene salvación, mañana tramitare el divorcio, solo firmalo sin poner resistencia, luego me iré de tu vida para siempre — le digo sin emoción levantándome del piso — está será la última noche que dormiremos juntos, y por qué las otras habitaciones están ocupadas, pero a partir de mañana ya no me verás más — le digo caminando hacía el baño para quitarme el vestido y así poderme acostar

Leo permaneció arrodillado en el piso aún después de que salí del baño ya cambiada, él aún seguía ahí, yo simplemente me acosté en el borde de la cama dándole la espalda al lugar donde dormiría él y me dormí, me sentía agotada mentalmente y me dolía muchísimo la cabeza.

A la mañana siguiente, suena el despertador y sin ánimos me levanto de la cama, debía preparar el desayuno, Sofía tenía que trabajar y mis hermanos y mi primo no se si se habían levantado

Miro al otro lado de la cama y Leo aún dormía, ni me moleste en despertarlo, simplemente me cambié y salí de la habitación

Al llegar a la cocina me sorprendo al ver a todos ahí preparando el desayuno

— Buenos días — digo sin ánimos y fingiendo una sonrisa

— Hola pequeña, como te sientes? — me pregunta mi hermano Sebastián

— Estoy bien — digo fingiendo una sonrisa y mi hermano vino y me abrazó, luego se sumaron el resto a abrazarme

— Todo va a estar bien, ya lo verás — me dice mi hermano Esteban

— Por qué no te vienes con nosotros a Brasil un tiempo?, hasta que estés más tranquila — me pregunta mi hermano Sebastián

— Escucharon todo verdad? — digo con tristeza, ya que no quería que ellos se enteraran pero Leo me saco de quisio anoche y terminamos a los gritos

— Si mi pequeña libélula, oímos todo y te apoyamos en cualquier desición que vayas a tomar — me dice mi primo

En ese momento escuchamos el sonido de la puerta y cuando voy a ver, Leo se había ido, sin decir nada y sin desayunar, eso me generó una opresión en el pecho que inevitablemente comencé a llorar de nuevo

Creí que después de los días hermosos que habíamos pasado en París ya todo estaba solucionado, que todo iba a volver a ser como antes o mejor, que al fin seríamos una pareja feliz, pero una vez más me equivoque y ahora por más que me duela debo terminar con todo este sufrimiento , él tendrá su hijo, el que tanto anhelo aunque no sea yo quien se lo de

Me quedo parada mirando por la ventana  pensando, hasta que siento que me abrazan, al girar la cabeza la veo a Sofi abrazándome

— Todo se terminó amiga, lo perdí para siempre, hoy mismo solicito el divorcio — le digo girándome y abrazándola también mientras continuo llorando

Me sentía muy deprimida, creo que me sentía peor que cuando lo encontré a Leo con otra mujer, y es que enterarme que él iba a ser padre con ella, cuando nosotros estuvimos 3 años buscando un hijo, me cayó como balde de agua fría, es un dolor que no puedo curar, es algo que me está atormentando demasiado y me duele hasta lo más profundo de mi ser

Mis hermanos y mi primo también se acercaron y también se unieron al abrazo

— Ven desayunemos que Sofía llega tarde al trabajo — me dice mi hermano Esteban

— No tengo hambre, desayunen ustedes — les digo recostandome en el sofá

— y que haras? a dónde irás si te divorcias? — pregunta mi hermano Sebastián

— No lo sé aún, después veo, no quiero pensar en nada ahora, se me parte la cabeza — les digo acostada cerrando los ojos

— Te traeré algo para tomar para el dolor — dice Sofía caminando hacia la cocina

— Cancelaremos nuestro vuelo, nos quedaremos un día más contigo por lo menos hasta ver qué estés en un lugar cómodo — dice mi hermano Sebastián

— No claro que no, ustedes vayan tranquilos, yo estoy bien, esto se me pasara no se preocupen — les digo para que no dejen todo por mi

— Pero nos preocupas, ahora no nos podemos ir tranquilos sabiendo que estás así — insiste mi hermano Sebastián

— No sé preocupen, se irá a mi departamento, allá tengo 2 habitaciones, una que ocupo yo y la otra desocupada, ella se quedará ahí, estará bien, no se preocupen — habla Sofía dejándome sorprendida

— No Sofi, no quiero molestar en tu vida privada — le digo yo apenada

— Cual vida privada tonta? si ni novio o pareja tengo, así que de cual vida privada hablas?, aparte me va a gustar tenerte allá conmigo y no sentirme tan sola — me dice sonriendo

— En verdad? — le digo con una sonrisa

— Claro, así que prepárate que al medio día en mi hora del almuerzo te paso a buscar para llevarte a mi departamento — me dice ella emocionada

— No te preocupes, tengo cosas que hacer y no se si me desocupare enseguida, luego voy en taxi hasta allá — le digo para que no se preocupe

— De acuerdo, ten — me dice entregandome unas llaves — estás son las llaves de mi departamento para cuando vayas entres directamente

— De acuerdo, gracias Sofi, eres una gran amiga — le digo levantándome y abrazándola

— Bueno vamos a desayunar que se te hace tarde — le dice mi hermano a Sofía y ambos se van al comedor, mientras yo permanecí ahí acostada

Después del desayuno, Sofía se fue y mis hermanos y mi primo vinieron y se sentaron conmigo en el sofá y comenzaron a hacerme preguntas sobre lo que había pasado con Leo, así que comencé a narrarles toda la historia desde el comienzo de como había descubierto que Leo me engañaba, hasta la noche anterior que él me había confesado que la otra estaba embarazada

Después de conversar un rato, ellos se tuvieron que ir a preparar ya que tenían vuelo a las 11 de la mañana, mientras yo me fui a preparar ya que a las 11 también debía ir al bufete por el acuerdo de divorcio