capitulo 4

Ameyal salió de la cabaña quedando frente a Diana, por su parte Franco se quedó sorprendido al ver que la bruja era más joven de lo que pensaba. No muy lejos Sebastián estaba escuchando.

— Por un momento creí que no te encontraría.

Dijo Diana sintiendo alivio al ver a Ameyal.

— Para ser honesta no quería salir.

Dijo Ameyal molesta, mientras cruzaba los brazos.

—Diana vino por qué necesita tu ayuda...

Dijo Franco al ver que la bruja no quería hablar con Diana.

— ¿Tu quien eres?

— Es mi... novio.

Dijo Diana antes de que Franco pudiera hablar mientras Ameyal solo se quedó callada pensando.

—¿...?

—Necesito que me ayudes ...

—Dejame adivinar, ¿quieres destruir el trabajo de magia que hice para ti ?

—... sí

Dijo Diana mientras miraba el suelo.

— Creo que comienzó a entender el porque quieres hacerlo.

Dijo Ameyal mientras encendía un cigarrillo y miraba que Diana estaba tomando la mano de su novio. Escondido entre los árboles Sebastián se encontraba escuchando lo que ambas mujeres conversaban.

—¿A que se refiere con que Diana quiere destruir un trabajo de magia?

Pensó mientras las veía.

—...

—Te dije que al hacer un amarre a a tu amante te podrías arrepentir. ¿Pero por qué tardaste tanto en tratar de hacer algo?... además también podías haber ido con cualquier otro brujo para revertir la magia.

—Lo olvidé.

—Jajajajaja es una broma ¿... verdad?

—Mi pareja vino aquí debido a que están pasando cosas raras debido a tus embrujos .

Dijo Franco bastante cansado de que Diana no hablara directamente con la bruja.

—¿Mis embrujos?, o la necesidad de mujeres aferradas con hombres que ya no sienten nada por ellas.

—... Ayúdame a eliminar ese amarre.

Dijo Diana bastante nerviosa.

— Va a ser algo difícil en especial por qué tú querías que fuera para siempre.

—¿Pero debe haber una forma de que su ex ya no esté atado a ella ?

—Solo utilice un par de veces magia negra y en uno fue el amarre que hice para tu novia...

— ¿Eso quiere decir que no sabe como deshacer el amarre?

— Prácticamente es casi imposible de romper...

—¡Nooooo!

Grito ella desilusionada, mientras franco la sostenía.

—Eso quiere decir que ella va a ser siempre asechada por ese hombre.

— Podría decirse, aquel puedo encontrar una manera de que se rompa después de todo no tuviste que sacrificar nada.

—¿...?

Franco se quedó confundido con la última parte, Diana por otro lado empezó a preguntarse quien había sido la otra persona que uso la magia negra. Cerca del lugar Sebastián se encontraba enojado y sintió que todo ese tiempo que estuvo con Diana está lo había utilizado como un juguete al cual simplemente lo deshecho cuan ya no le sirvió.

— Creíste que podías jugar conmigo así de fácil, ni creas que así de fácil te vas a deshacer de mi .

Murmullo el mientras apretaban con fuerza los dientes, empezó a alejarse un poco del lugar para esconderse detrás de la cabaña.

— ... A qué te refieres con sacrificio... si solo has hecho dos amarres y usado magia negra en ellos... cuál era la consecuencia de que el sacrificio no se llevará a cabo.

Dijo Diana con una voz temblorosa.

— Probablemente perder algo por el karma.

Dijo Ameyal mientras imaginaba que tenía que ver con la otra mujer que había ido por un amarre.

— Entonces que tengo que hacer para que esto termine.

Dijo Diana tratando de estar más tranquila.

— Por el momento nada, soy yo las que debe de encontrar el como romper el amarre. Y deshacer los ritos y decretos que hiciste en el pasado.

—Pero como sabré cuando ya esté roto el amarre...

— Me puedes dejar tu número y yo te llamaré cuando encuentre la manera de romper ese amarre.

Diana empezó a buscar en su bolso y saco una pequeña tarjeta de presentación y se la dió a Ameyal en la mano.

— Aquí está mi número, puedes llamarme cuando esté todo listo.

— Está bien.

Después de eso Diana y Franco se fueron y Ameyal se quedó mirando la tarjeta hasta que oyó un ruido que venía del otro lado.

—¿ Quien es ?

Dijo ella mientras volteaba a ver a todos lados, y comenzó a caminar y de pronto vio que de la parte trasera de la cabaña se veía un pie.

Ameyal tomo una piedra del suelo mientras caminaba directo a dónde se asomaba ese pie, pero antes de que pudiera lanzar la piedra Sebastián la tomo del brazo mientras que con la otra mano sujetaba el cuello de la mujer.

— ¡Maldita bruja!

Dijo el mientras estrangulaba con ira a Ameyal.

—¡Argggggg!

Ameyal sentía un dolor demasiado fuerte que lo único que podía hacer eran leves sonidos, pero por más que tratara de defenderse estaba demasiado débil.

— Mi creas que tú y esa perra van a salir de esta...

Poco tiempo le basto a él para que Ameyal comenzará a quedarse sin aire . Marí comenzó a ver cómo Sebastián dejo el cuerpo sin vida de Ameyal y empezó a romper las ventanas y destruir todo lo que había adentro aquel por más qué tratara de detenerlo al momento de intentar tocar algún objeto su cuerpo atravesaba estos.

—¿¡Que clase de broma es esta!?

Dijo ella mientras todo comenzó a borrarse Haste quedar solo ella el un lugar completamente en blanco.

María comenzó a abrir lentamente los ojos mirando que se encontraba en el cuarto de Ameyal.

— No puede ser, no es su sueño.

Dijo ella al notar que seguía dentro de la novela.

—¡Sigh! por qué sigo aquí.

Se levantó y fue al espejo y al verse ella comenzó a resignarse a vivir en el cuerpo de Ameyal.

— ¡Que haces pará, el doctor dijo que debías descansar!

Dijo la hermana de Ameyal.

— ... lo siento es solo que ya no quería seguir acostada

— Imagino que quieres algo de comer, después de estar dos días sin comer ningún alimento.

— ¿¡Que!?