capitulo 4

—No puedo darte lo que quieres–dijo él.

Bianca se pasó la mano por el pelo, y Cristian recordó con un estremecimiento el tacto de los cabellos de ella en su piel. No podía negarlo. Estaba más atractiva que nunca.

—¿Sexo?–pregunto ella.

—Amor–respondió él, aunque le costó pronunciar la palabra.

Su familia siempre había dicho que era una copia exacta de su padre. Había aprendido de la forma más dura posible a no permitirse el lujo de abandonarse a un sentimiento como ése.

Había visto como su padre había destruido a su madre hasta llevarla a quitarse la vida. Él mismo había hecho lo mismo al abandonar su novia del instituto al terminar los estudios con la excusa de ser libre para poder experimentar en la universidad. había sido un egoísta cruel. Sería se había tomado aquella misma noche un bote de somnìferos. Afortunadamente, había tenido más suerte que su madre. alguien la había encontrado y había llamado a urgencias antes de que fuera demasiado tarde.

—De modo que sigues pensando en lo que dije aquella noche,¿verdad?– le pregunto mirándole fijamente con sus ojos verde esmeralda–. Me precipitè. Si aceptas mi proposición, podré disculparme y explicarte que fue una equivocación, el calor del momento...

—¿El calor del momento?Me dijiste que me querías, que querías casarte conmigo y tener hijos. Creo recordar que hasta me dijiste los nombres que te gustaría ponerles.

Después de decir aquello , Cristian se había levantado y se había ido para protegerla de amar a un palker. Había tenido durante las tres semanas siguientes, hasta encontrarla saliendo de la habitación de su padre de madrugada.

Bianca Sánchez le había tomado por tonto y él se había quedado prendido a ella.

Nunca más volverá a suceder.

—Si, lo siento, exageré demasiado–dijo ella — es que... bueno, eres muy bueno en la cama.

Bianca le miro ocultando sus verdaderos sentimientos.

—Podriamos vivir aquí o en tu apartamento. Los dos están a la misma distancia de la oficina–dijo ella.

—No voy a jugar a vivir contigo–dijo él.

—Entonces , está conversación ha terminado. Te acompaño a la salida.

Cristian la tomo de la mano al pasar ella a su lado y sintió la furiosa electricidad que siempre había experimentado a su lado, desde el día que Bianca había entrado a trabajar como secretaria de su padre. Había luchado contra sus impulsos durante 7 largos meses, hasta que había cedido a la tentación. Le había costado un mes hacer que aceptará salir con él y otro más llevársela a la cama.

—Ya no tengo mi antiguo apartamento–dijo él–Ahora vivo en California.

—No sabía que te habías mudado–dijo ella sorprendida.

—¿Cómo puede ser que no lo sepas? Mi huída debió de causar un terremoto. Mi padre debió de ponerse de los nervios al enterarse que había aceptado trabajar para Wast klioo, su principal competidor.

—No lo supe porque nunca volví a la oficina después... después de aquella noche.

—Querrás decir la mañana en que te descubrí saliendo de la habitación de mi padre.

—Sì –dijo ella bajando la mirada.

Aquel mismo día había mandado a su padre al diablo por intentar hacerle la vida imposible, por intentar destruirle. Aquèllas habían Sido las últimas palabras que le había dicho a Antonio palker.

—¿Por qué te fuiste?–pregunto él–.¿Mi padre se negó también a casarse contigo?

—Utilizando tus propias palabras , esa propuesta nunca estuvo sobre la mesa–dijo ella–. Ahora , deberías irte.

Cristian no pensaba en otra cosa que no fuera irse de allí lo más rápido posible. Las condiciones de Bianca eran absurdas.¿Estaba dispuesto aceptarlas?

Sin embargo, no tenía otra opción. Pensó en Natalia y en Carlos, y comprendió que no tenía otra salida.

No podía volver abandonar a sus hermanos.

—No tendrás nada de mi aparte del sexo–dijo él–. No te daré regalos, no te haré promesas y no me casare contigo. Y, desde luego, no tendremos hijos.

Bianca suspiro profundamente al ver que Cristian había aceptado sus condiciones.

El la miro mientras el deseo lo consumía. Un deseo obsesivo de tocarla.

Cinco años atrás , Bianca había estado a punto de hacerle renunciar a su promesa de no comprometerse con nadie.

No volvería a cometer el mismo error.

No podía confiar en ella, y él siempre sería el hijo de su padre, un hombre egoísta incapaz de ser leal, de ser fiel.

Un hombre que era capaz de romperle el corazón a una mujer sin pensarlo dos veces.

—Si vas a pagarme quince mil dólares al mes, no necesito nada más de ti–dijo ella con una sonrisa maliciosa.

—Necesito dos semanas para arreglar las cosas . volveré el dieciséis y el año empezará a contar.

Cristian solo deseaba no tener que lamantarlo.

Días después....

—No me hagas perder el tiempo.

Al oír la voz de su hermano, Cristian dejo su ordenador portátil sobre el escritorio de su padre y se dió la vuelta hacia la puerta.

Había esperado que su hermano estuviera satisfecho por su decisión, pero parecía dispuesto a buscar pelia en su primer día.

—¿Disculpa?

—No te instales aquí si no te vas a quedar todo el año. Si vamos a perder palker crusiers, es mejor que sea lo antes posible, así será menos doloroso. Natalia va a tener que pasarse un año entero en Holanda sin hacer nada. No le hagas pasar por esto si tienes pensado abandonar.

El testamento de su padre exigía que Natalia alquilará un apartamento y estuviera un año desempleada. Podía volverse loca allí sola, sin nada con que distraerse, sin nada que la ayudara a no pensar en el marido y Enel hijo que había perdido.

Era una muestra más del sadismo del viejo.

—Carlos, he dejado un empleo que me gustan y he puesto en venta mi departamento. No voy echarme atrás. Voy estar aquí hasta el final. Si perdemos palker crusiers, no será por mi culpa, te lo aseguro.

—¿Por qué ahora?—pregunto Carlos escéptico.

—Porque está vez me niego q ir vuelva a salirse con la suya–respondio Cristian.

Pero si hermano seguía sin estar convencido.

Cristian se llevó la mano al bolsillo del pantalón y sacó una navaja pequeña plegable. El filo brillo bajo los rayos del sol. Cristian lo pasó por su dedo, haciéndose un corte.

—¿Se puede saber qué demonio estas haciendo?–pregunto Carlos.

—¿Quieres que lo firme con sangre?

—No digas tonterías, ya no somos niños. La sangre no demuestra nada. Solo es un negocio. Un negocio que mueve millones de dólares, por si lo has olvidado.

Quedaba claro que no iba a poder borrar cinco años de silencio recurriendo al viejo pacto que habían practicado de pequeños.

—No lo he olvidado.

Cristian dejo la navaja sobre el escritorio y miro a su alrededor en busca de algo que le ayudará a contener la sangre que emanaba de la herida. Entonces, algo captó su atención.

Bianca estaban en la puerta, con un vestido amarillo claro y el pelo recogido en un moño. Era un estilo clásico, pero en ella seguía resultando tremendamente atractivo.

—Ire por el botiquín de primeros auxilios–dijo Bianca mirando la navaja y después la herida del dedo de Cristian.

Carlos se quedó mirándola hasta que se hubo ido.

—¿Fue ella la razón de que salieras huyendo?

—Estoy seguro de que papá te dió su propia versión de lo sucedido.

—No dijo nada , por eso te lo estoy preguntando.

Cristian oculto si sorpresa. A su padre siempre le había gustado alardear de sus victorias.

—Me fui por qué si competencia conmigo llegó demasiado lejos–dijo Cristian.

—¿A qué te refieres?

Cristian le clavo la mirada. Costearse con una empleada de palker Cruiser había Sido siempre algo prohibido. Él lo había sábido perfectamente, por eso no podía explicarse por qué no había Sido capaz de resistirse a Bianca.

—¿Qué quieres exactamente, Carlos?¿Garantías? Te las daré. Te prometo que estaré aquí por un año entero.

—¿Por qué habría de creerte? Hace cinco años te fuiste sin decir nada . Un día satanás aquí, y al siguiente desapareciste y no hubo manera de comunicarse contigo. Por el amor de Dios, nisiquiera sabíamos si estabas vivo o muerto. Incluso hubo rumores de que te habías fugado con Bianca.

—Deberias hacer caso omiso a ese tipo de cosas–dijo él.

—Vamos, Cristian... Tú y Bianca desaparecieron juntos el mismo día..

espero sus comentarios, estaré publicando dos capítulos por día .😘🥰

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