Yo Soy La Fea

SEAN

Llego como siempre más temprano de lo normal, me encargo de algunas cosas antes de que todos vengan a sus puestos, cámaras de seguridad y esas cosas. Estoy tranquilo en la oficina...

*Entra*– Hola, hijo...

– Hola, mamá. Bienvenida, pasa –*digo y ella se sienta*

– Buen día, hijo. Sabía que estarías aquí como siempre

– Dices eso como sino tuviera vida social, mamá

*Se cruza de brazos*– La tienes pero pasas más tiempo en la oficina que con personas

– Hay cosas que debo hacer, mamá. No soy Connor, aunque me dijo que quiere trabajar aquí, empezará la semana que viene

– Me contó sobre eso, también habla bastante de tu asistente, parece bastante interesado en ella

– Ya le dejé claro que no quiero que se meta con ell... digo con alguna chica de la empresa

*Me mira sería*– ¿Esa chica te gusta, Sean?

– ¡NO! ¿Que estás diciendo, mamá? ¡Es lo último que puedo por ella!

– Mira hijo, es una buena chica, pero no me gusta como nuera, no es la chica con la que te imagino

*Me cruzo de brazos*– Mamá, ¿Piensas que te daré el poder de la opinión en decisiones de mí vida?. Eres mí madre y te amo, ¿si?, pero salga con quién salga es decisión mía

– Entonces debo sospechar que te interesa esa chica

– Ay por dios, mamá. Basta, ya fue suficiente –*exclamó*

– Tenías una buena chica, Kendall, y lo arruinaste. Llevaban cinco años estaban apunto de casarse

*Golpeó el escritorio*– ¡MAMÁ!. Ya fue suficiente... Creo que es hora de que te marches

*Se levanta*– Está bien, hijo. Adiós, ten buen día... –*sale de la oficina*

SEAN

Odio que mí madre se meta en mí vida, aún más en la amorosa, Kendall fue una de las pocas novias que tuve en mí vida, pero terminamos hace un año y mí madre no me lo perdona, esperaba un matrimonio y aún espera una reconciliación, pero es algo que no pasará. Son ya las 09:00am, se escucha el ruido de la llegada de las personas...

*Tocan la puerta*– ¡Adelante!

*Entra*– Señor Carter, le traje el archivo

– Bien, Elizabeth. Déjalo... –*la miro y me quedo helado*

– ¿Señor? ¿Esta bien? ¿Necesita ayuda? –*se acerca a míl*– ¿Señor? ¿Quiere un vaso de agua?

– No no no... Estoy bien –*la miro de arriba abajo*– Te ves bien

– ¡Oh!. Bueno gracias, señor –*se sonroja al instante*– Mí hermana me convenció de dejarla vestirme

– Mmhh... Luce bien, señorita. Bueno hoy tenemos que ir a la empresa de mí madre a organizar algunas cosas

– Claro, señor Carter. ¿A qué hora? –*me pregunta*

– En media hora salimos, la llevaré hasta allá

*Asiente*– De acuerdo. ¿Necesita algo más?

– No, señorita Keller. Nada más, puedes irte –*le digo nervioso*

– Hasta más tarde –*Sale de la oficina*

*Me levanto y voy hacia la ventana*– Uff... –*masajeó mis ojos con mis manos*– ¿Que me está haciendo esta mujer, Dios?

ELIZABETH

Llego a mí oficina y me miró en el reflejo del ventanal, me gusta como me veo, debería arreglarme así más seguido. La media hora pasa rápido, me dirijo al ascensor...

*Llega a mí altura*– ¿Lista para irnos? –*pregunta el señor Carter*

– Claro, señor –*asiento*– Quizás esté mí hermana trabajando, ¿aún continua ese trabajo para presentar el maquillaje?

– Aún faltan algunos días para la presentación del producto y la ropa que diseña mí madre –*se abre el ascensor y entramos*

– He visto el trabajo de su madre es realmente buena, aunque jamás uso ropa así

*Me mira sonriendo*– Debo admitir que se vería bien, señorita Keller

– ¿Usted cree? –*me miró de arriba abajo*– Parezco una tabla

– ¿Quien le dijo semejante estupidez? –*me mira seriamente*– Déjeme decirle que tiene un cuerpo mejor que el de algunas modelos

*Lo miro roja como tomate*– Gracias...

*Se ríe*– De nada, ya no se subestime, señorita Keller

– Prometo intentar no subestimarme más, señor

SEAN

Cuando se sonroja es muy dulce, parece tan inocente como si jamás hubiera recibido un halago en su vida, no entendería el porque. Tiene una belleza rara, sus ojos grandes y negros hacen que se vea adorable.

Llegamos a la empresa de mí madre es mí auto, cuando entramos hay un ambiente de tensión en el aire...

*Me mira*– ¿Que está pasando? ¿Por qué están todos tan intensos?

– No lo sé... –*veo a mí madre*– ¡MAMÁ! –*la llamo*

– Hijo... –*mira Elizabeth*– Creí que vendrías solo, hijo

– Necesito a la señorita Keller para organizar algunos asuntos. ¿Que está pasando? –*le digo*

– Una modelo acaba de llamar, ¡No puede venir porque está enferma!. No sé que habremos ahora

*Se acerca el maquillista*– Señora Carter no podemos seguir retrasando la sesión, tenemos que conseguir una modelo

*Mí madre lo mira*– Pero, ¿donde sacaremos una mode...? –*los tres miramos a Elizabeth*

– ¿Que...? –*nos mira*– No querrán que yo... ¡No, no, no!

– Por favor –*dice mí madre*– Solo será una foto, podemos arreglarte rápidamente

– Oigan... –*dice ella*– Puedo ser muchas cosas, pero modelos en definitiva no es una de ellas

*La miro*– Por favor, Elizabeth. Haz esto por mí madre, trabajo mucho por esto, ¿si?

*Suspira*– Bueno... Pero si sale más yo se los advertí...

– ¡GENIAL! –*dice el maquillista*– Ven conmigo, querida –*se la llevan*

ELIZABETH

Sin lugar a duda ellos perdieron la cabeza, ¿donde me vieron a MI ser modelo de...? bueno... ¡Cualquier cosa!, no tengo madera de serlo. Miro como me maquillan de aquí para allá...

*Mí hermana llega*– ¡LIZY!. Me encontré con el señor Carter y me dijo que serías modelo

– No me lo recuerdes –*tomo sus manos*– Ayudame, no puedo hacerlo

– ¿Por qué no? –*me mira confundida*

– ¡Cómo sino lo supieras!. Helena no soy una modelo, no sirvo para esto... me tiemblan las manos y por poco me pongo a sudar

– ¿Sabes cuántas veces estuve así, Lizy? –*se ríe*– Casi siempre me pasa también

– Pero a ti siempre te sale bien, ¿Por qué?. Porque naciste para esto, yo en cambio soy la hermana fea

– ¡Nada de eso! –*suspira*– A mí me encanta esto, es por eso que me sale bien, y no eres fea. Estás quedando hermosa

*El maquillista me toma los hombros*– Es verdad, eres preciosa. Solo tienes que mirarte como te miramos

– Está bien, solo terminemos esto...

SEAN

Junto con mí madre vemos las fotografías que se le tomaron a todas las modelos, solo queda Elizabeth, su hermana tiene bastante potencial, pero de alguna forma creo que Elizabeth será la mejor...

– Bien, falta solo la chica nueva –*dice el fotógrafo*– ¿¡Donde está!?

– ¿Crees que la chica se arrepentirá? –*pregunta mí madre*

– Ella no tiene experiencia en esto, pero dudo que se arrepienta...

*El maquillista sale*– Bien querida, vamos hermosa –*dice mientras ayuda a Elizabeth a salir*

*Sale de la sala de maquillaje*– No estoy acostumbrada a usar tacones

– ¿Ella es tu asistente? –*dice mí madre*

SEAN

Me quedo helado, petrificado ante la belleza que tiene, su rostro, su cuerpo, como si nada le quedará mal. Todos en la sala la miran, hombres y mujeres, por un momento nuestras miradas se encuentran...

*El fotógrafo sacude su cabeza*– Bien, cenicienta. Ponte ahí

– Le digo que no se cómo hacer esto –*dice colocándose con dificultad*

– No te preocupes, cielo. No será difícil hacerte lucir bien, quiero que te relajes –*dice mí madre*– No mires directamente a la cámara, ¿Si?

– Si, si... señora, lo intento

*Helena se acerca a ella*– Tranquila, Lizy. Solo mira a algún punto con el que te sientas cómoda

– Si, claro... –*busca con la mirada y me encuentra*

*Le sonrío*

SEAN

Terminan de tomar la fotografías, esperamos a que se revelen mientras Elizabeth vuelve a cambiarse...

*Mí madre sonríe*– Está chica tiene talento para esto

– Si –*digo mientras miro las fotos*– Estás son mis favoritas

*Llega a nosotros*– Lamento sino estuve a la altura

– ¡Estuviste grandiosa, Lizy! –*dice Helena*– Felicidades

– Entonces, ¿todo bien con las fotos? –*pregunta*

*Tomo las fotos*– Míralas tu, son increíbles –*me acerco a ella para mostrarle*– ¿Que me dices?. Está será la que publicarán

– Ustedes hacen magia sin lugar a duda –*nos dice*

– Claro que no –*le digo*– Tu eres hermosa, fácil... –*la miro*

*Me mira y me sonríe*– Gracias señor