Promesa De Amor

...Alejandro....

...Y sí, allí estaba; se veía un poco pálida de como la recuerdo, pero era ella. No se había percatado de mi presencia, se veía pensativa mientras jugaba con la pulsera de su mano, sus ojos estaban algo rojos, había llorado, entonces entendí las palabras de Fabián....

...Me acerqué y solo dije:...

...— Hola — su mirada se posó en mí. No pudo ocultar su sorpresa....

...— ¿Qué… qué haces aquí? — Me preguntó mientras limpiaba los restos de lágrimas que tenía en sus mejillas ligeramente rosadas....

...— Fabián es mi amigo, le había hablado de ti y bueno, él me contó que estabas aquí y que... estás embarazada — contesté. Ella bajó su mirada y no dijo absolutamente nada....

...Después de varios minutos de silencio, me atreví a preguntar:...

...— Mía, ese bebé… ¿Es mío? – Silencio total nuevamente....

...— Por favor, contesta — dije en un tono suplicante....

...— Si así fuera, ¿qué pasaría? — Me preguntó viéndome a los ojos....

...— Yo… no lo sé, no estoy listo para un niño, ni siquiera nos conocemos bien, creo que lo mejor sería... —...

...— ¡No! – Me interrumpió un poco alterada....

...— Yo tampoco estoy lista y no esperaba esto, pero no por eso le haré daño a mi hijo, si tú no lo quieres, está bien, lo entiendo, no te pediré nada. Yo puedo hacerme cargo de él sin tu ayuda — dijo....

...— ¿Entonces sí es mío? — Volví a preguntar como el idiota que soy, pues era lo obvio, me lo acababa de confirmar....

...— Alejandro, tengo que irme, dile a tu amigo que no se preocupe por el obstetra, buscaré otro doctor — me dijo ignorando mi pregunta mientras recogía su bolso....

...Salió del consultorio, yo simplemente me quedé dentro; me senté en un sofá que se encontraba allí con mi cabeza entre mis piernas, como señal de frustración....

...Sí era ella. Sí era mi hijo....

...— ¿Qué diablos pasó? – Escuché a Fabián decir....

...– Nada, le dije que no estaba listo para un bebé y ella dijo que se haría cargo sola — contesté sin atreverme a ver su mirada de decepción....

...— ¿Es en serio? ¿La dejarás sola con TU bebé? — Preguntó con evidente enojo y con justa razón, pues decirlo así, se escuchaba espantosamente terrible....

...— No lo sé, no sé cómo asimilar esto, si mi padre se entera me obligará a casarme con ella y no quiero, no deseo jugar a la casita; me conoces y sabes que yo no soy de ese tipo de hombres, no quiero una esposa y mucho menos un hijo, pero ella lo quiere tener... —...

...— ¿Le sugeriste que abortara? — Interrumpió mi discurso. No contesté a su pregunta, así que entendió mi silencio....

...— Eres un imbécil, ¡lárgate de aquí antes de que agarre a golpes! – Dijo muy enojado señalando la puerta....

...Me levanté y antes de salir le dije:...

...— Amigo… gracias por decirme que ella estaba aquí — me volvió a mirar enojado y solo cerré la puerta al salir....

...Me sentía el peor hombre del mundo, rechacé a mi bebé, peor aun, prácticamente propuse deshacerme de él. No volví a la empresa, me fui directamente al bar, necesitaba un trago que me hiciera olvidarme de todo eso....

...No sé cuánto tiempo estuve allí tomando, ya hablaba incoherencias cuando vi llegar a mi hermano del alma....

...— Eres un completo imbécil definitivamente, ¿es así como piensas solucionar tus problemas? — Insultándome como siempre, pero no dije nada, me lo merecía....

...— ¡Vamos! Te llevaré a tu apartamento — me ayudó a levantarme, ya que no podía ni con mis pies, subimos a mi auto y él se encargó de conducir....

...— ¿Crees que... estará bien? Seguramente me odia, le di a entender que no quería a nuestro bebé, “nuestro bebé” se oye hasta bonito, ¿verdad? – Pregunté eso último con una sonrisa tonta en mis labios....

...— Estás muy ebrio, te llevaré a casa, tomarás un baño, aclararás tu cabeza y mañana en tus cinco sentidos, la llamarás, tengo sus datos de contacto; tienes que volver a hablar con ella, te necesita, es una niña y está tan asustada como lo estás tú ahorita — escuché sus palabras, mi amigo como siempre siendo el más maduro de los dos; tenía razón, ella me necesitaba... mi hijo me necesitaba, pero… Y si no sabía cómo hacerlo, y si no era lo suficientemente bueno para ese bebé....

...Sí, era un cobarde, tenía muchísimo miedo. Llegamos a mi apartamento y me di un baño como Fabián dijo, me acosté a dormir con mil cosas en mi cabeza y como cada noche, Mía volvió a estar en mis sueños......

...Desperté y el loco de mi amigo estaba dormido en el sillón de la habitación, completamente incómodo, le tiré una almohada para despertarlo y enojado abrió sus ojos....

...— ¡¿Qué diablos te pasa?! — Prácticamente me gritó....

...—¿Qué diablos te pasa a ti? ¿Qué haces dormido ahí? — Le devolví la pregunta con un poco de burla....

...— ¿Qué querías, qué me quedara en tu cama? Me quedé porque con lo mal que estabas anoche, tuve miedo de que tuvieras pensamientos suicidas — explicó....

...— Idiota — dije sonriendo. Fabián era sin duda, un gran amigo....

...— Entonces, ¿llamarás a mi cuñada? — Preguntó en su faceta burlona, ganándose una mirada asesina de mi parte....

...— No me mires así, los dos sabemos que ella no te es indiferente, te he escuchado hasta ebrio hablar de tu chiquilla. Ahora que será la madre de tu hijo, tendrás una excusa para volver a tenerla en tu cama — sonreí ante la idea, no había pensado en eso, pero reaccioné al instante....

...—¡Ya! no juegues con eso, esto es serio, voy a ser papá — dije....

...— Y yo voy a ser tío ¡Qué emoción! — Respondió; le lancé otra almohada y me acosté por completo en mi cama....

...— Esto es una completa locura — exclamé después de un respiro profundo. Luego de eso, ambos nos preparamos para el trabajo, él me dejó los datos de Mía y se fue al hospital....

...Prometí llamarla cuando me sintiera listo, o al menos, cuando me acostumbrara a la idea de que, dentro de un tiempo, un enano me diría “papá” sonreí ante ese pensamiento....

...Quién lo diría, yo siendo papá, bueno, no podía ser tan malo, había tenido un gran ejemplo. Aunque papá siempre había sido muy estricto, nadie le quitaba que también había sido un gran padre....

...Debía pensar cómo decirles a mis padres que serían abuelos. Decidí hacerlo antes de llamar a Mía, debía ir paso a paso......