En un mundo donde los dioses caminan entre mortales, un pequeño de siete años, que es mucho más de lo que parece, ha encontrado su propósito. Con un corazón puro y un amor inquebrantable, este dios cuida de su amigo, un joven alfa de 18 años marcado por el dolor y el desprecio de su propia madre. A pesar de las sombras que lo persiguen, el joven anhela la felicidad y la libertad que solo el amor puede ofrecer.
El pequeño dios, con su apariencia inocente, es un faro de luz en la vida del alfa, ayudándolo a enfrentar sus traumas y a encontrar la valentía dentro de sí mismo. Juntos, desafían las expectativas del mundo que los rodea, creando un vínculo que trasciende el tiempo y la edad.
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Cap 5: primer encuentro
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Al día siguiente, todos los jóvenes nobles caminaban a prisa de un lado a otro para llegar a sus clases. Sergei iba caminando hacia su aula de clases cuando frente a él se paró una joven que se mostraba tímida.
— “Espero que me acepte”— pensaba mientras veía al jóven.
— Señorita, si no tiene nada que decir no obstaculice mi camino— viendo a la joven con desinterés.
— Joven duque, perdone mis modales, s-solo quería presentarme ante usted y decirle que me gusta— decía con sus manos juntas moviéndose con nerviosismo.
— Señorita, no me interesa tener un romance ni nada parecido, la academia es para aprender, no para buscar esposo.
— Joven duque, solo quiero que nos conozcamos y seamos amigos, tal vez en el futuro si tenemos una buena relación, podríamos tener un compromiso.
Antes de que Sergei respondiera, Haim tropezó con la mujer tirándole agua en la ropa.
— “¿En la academia también hay niños tan pequeños?”— se preguntó el joven alfa.
La mujer volteó a ver a Haim con molestia, olvidando que Sergei estaba tras ella, levantó la mano para golpearlo, sin embargo el joven alfa le sujetó la mano y la hizo a un lado para acercarse al niño.
— Pequeño, ¿Estás bien? ¿No te lastimaste?— preguntó un poco preocupado.
— Gracias por defenderme, joven…. estoy muy bien, solo fue agua.
— Está bien, ten más cuidado en el futuro.
El niño cruzó su mirada con la del joven alfa mientras le sonreía con dulzura. Sergei al ver la sonrisa del niño sonrió inconscientemente y su mente regresó al pasado cuando él tenía 8 años, en ese recuerdo él estaba con fiebre y con su cuello vendado debido a la herida que le había ocasionado su madre. En esa ocasión estaba asustado y quería llamar a su padre para que lo acompañara, ya que su niñera se había dormido, pero debido a la herida no podía hablar en voz alta, por lo que solo lloraba de miedo, en ese instante vió a un hombre vestido de blanco, con alas, fuerte y de cabello oscuro, entrar por su ventana, el hombre se acercó a su cama con cuidado y lo tomó en brazos arrullandolo haciendo que su miedo desapareciera.
— Pequeño, no tengas miedo, siempre estaré a tu lado haciendo que tus miedos desaparezcan.
— Gracias por venir, tío, tenía mucho miedo de que mi madre me volviera a hacer daño.— susurró sintiéndose en calma y seguro.
— No puedo evitar que tu madre te lastime, pero siempre ayudaré a tu hermoso corazón para que sigas siendo tan noble y seas feliz.
— Tío, tengo sueño, ¿Podrías acompañarme?
— Te acompañaré hasta que el sol salga, ¿De acuerdo?
— De acuerdo
El niño se acomodó en los brazos del hombre mientras que este lo cobijaba con sus alas y le cantaba un coro celestial haciéndolo dormir con calma.
Volviendo a la realidad, Sergei veía al niño verlo fijamente con una sonrisa.
— “Su sonrisa es igual a la de él, el tío con alas que me calmaba cuando tenía miedo….. Aunque no sé si solo era producto de mi imaginación para calmar mis miedos”
Las miradas y pensamientos de los chicos fueron interrumpidos cuando la mujer molesta se paró al lado de Sergei reclamando al niño.
— Debes disculparte por haberme mojado la ropa.
— No fue intencional, además no debería rebajarse a discutir con un niño— respondió mientras recogía sus pertenencias en el suelo.
— Aunque seas un niño debes respetar a tus mayores y pedir disculpas por tus errores.
— ya dije que no fue intencional, Pero está bien, disculpe por haber mojado su ropa.
— Debes hacerlo de rodillas — dijo con arrogancia.
— Joven, ella me está intimidando— le dijo a Sergei haciendo un puchero.
— Señorita, ya el niño le pidió disculpas, si no las acepta regrese con su arrogancia a su casa.
— p-pero— molesta porque el niño le había hecho perder la cara frente al joven.
— Joven, si nos volvemos a ver es porque el destino está de mi lado— sosteniendo la mano del chico.
— Si nos volvemos a ver, te invitaré un postre.
El niño asintió para irse de allí, en su próximo encuentro se presentaría formalmente ante el joven. Mientras el niño se iba, el joven alfa lo observaba con detenimiento.
— Joven duque, no debió interferir, ese niño debía disculparse adecuadamente.
— El niño ya le pidió disculpas, el aceptarlo o no, estaba de su parte. Además no puede intimidar a un bebé de esa manera.
— D-Disculpe, es solo que me molestó que mojara mi ropa….. Pero ya no hablemos de eso, me presento, soy Fu Tang, joven condesa de Dragoyard— decía con una sonrisa coqueta.
— Espero que no vuelva a intimidar al niño, es usted bastante mayor para que esté molestando a los más pequeños.
— Fue mi error, le aseguro que no volverá a ocurrir algo parecido.— respondió conteniendo su molestia.
— “ Espero que ese niño no la pase tan mal en este lugar, no he visto a más niños menores de 13 años”
Sin darle importancia a la presencia de la joven, el chico retomó su camino hacia su aula de clases. Haim por su parte, ya había llegado a esta siendo observado por los más grandes.
“ ¿Niño, no te has equivocado de aula?”
“ Niños, este no es lugar para que entren a jugar”— dijo viendo a Haim y Liorán.
“ deben buscar el aula correspondiente a su edad”
Sin responder a los comentarios, el niño se sentó al lado de Liorán.
— Príncipe, no sé por qué el director me asignó a esta clase…. ¿También lo asignaron a último momento?— decía nervioso por la mirada de los más grandes
— Debes tener más talento del que crees, confía en ti y esfuérzate para demostrar que no has venido a jugar. Yo fui asignado aquí luego de presentar un examen.
— Me siento muy nervioso, los adolescentes no dejan de mirarnos.
— ignoralos y concéntrate en lo importante. Yo te protegeré si te llegan a molestar.
Luego de unos minutos, Sergei llegó al aula, al entrar se sorprendió de ver a los dos niños sentados allí.
— “ ¿Está en mi misma clase? ¿No sé habrán equivocado de aula?”
Los pensamientos del chico fueron interrumpidos por la llegada de Aitana.
— ¿Qué haces aquí de pie? ¿Te han molestado?
— No me ha molestado nadie, solo pienso por qué esos dos pequeños están en esta clase tan avanzada —susurró viendo a los niños.
— Con que es eso, bueno es niño vestido de blanco se llama Haim Windsor, príncipe heredero de Elysium, supe que en el examen que presentó sacó un puntaje perfecto.
— Entonces es un niño excepcional.
— Así es, sus habilidades están por encima de nosotros. El niño a su lado es un joven marqués, pero no sé qué hace en la clase.
— ¿Sabes cuántos años tienen?
— El príncipe tiene 7 años y el marqués tiene 9.
— Aún son unos bebés, no deberían estar en este tipo de lugar.
— El príncipe tiene gran talento, es normal que quiera canalizar y mejorar sus conocimientos. Aunque el otro niño se ve muy nervioso, no estaba en la lista de nuestra clase.
— ¿Cómo sabes todo lo que has dicho?
— Por supuesto que investigué a cada uno de nuestros compañeros, no quiero tener sorpresas más adelante.
— entiendo.
— te ves algo preocupado
— Nada de eso, mejor vamos a nuestros asientos.
creo que me perdí