Fénix

¿-Nana porque mi abuelo murió? Le pregunté. Ya estoy seguro de que todo lo que sueño son recuerdos de ese día.

Mi Nana me miró y luego de pensar un poco me dijo, creo, no soy yo para contestar eso. Tal vez si habla con quienes estuvieron esa noche, sepa algo más. Se acercó y me dio un beso en la frente, me hizo cariño en la mejilla y agregó, desde que lo hirieron siento que volvió a ser mi pequeño Fénix, se le llenaron los ojos de lágrimas, me sonrió con una sonrisa melancólica, y me susurró, creo hasta que volvió a ser algo humano, ojalá siga esta chispa prendida. Dio un paso hacia atrás y se retiró, dejándome solo con mis pensamientos.

Tomé una libreta que había en la mesa de luz y comencé a anotar lo que recordaba de los sueños, para poder hacer un mapa de esa noche.

Recordaba mi abuelo, fallecido. De mis padres, de un joven con ojos azules y mirada penetrante. De un hombre con olor a whisky, creo estaba borracho, por el olor. Pienso que ese ser bonito y deslumbrante junto a mi abuelo es mi abuela, porque se parece a mi madre, hay alguien más, junto a mí, pero no logro verlo. En total recuerdo éramos ocho en esa mesa. Ahora entender que buscar a partir de quienes son y porque me quieren matar.

En cada hoja puse lo que recordaba de cada uno de ellos y dejé un espacio para sus nombres.

tenía muchas dudas, porque en los libros que leí siempre el reencarnado recuerda, y en mí caso nada. Y si estaba en un libro, porque no recordaba está trama. Porque no puedo ver mí reflejo. tenía muchas dudas, hasta pensé que estaba en un libro de suspenso, me reí para mí y me recosté en mí cama y me quedé mirando el techo pensando las tramas de los numerosos libros que leí, pero nada se me venía a la mente, me termine durmiendo, de nuevo.

..... Félix vamos, vamos por favor, papá no va a saber, por favor (haciendo ojitos tiernos) un ratito.....

desperté agitado, muy asustado, era yo pero me llamaba a mí como Félix, porque me llevaba a mí mismo, que era eso. no podía dormir, estaba asustado, solo quería huir, vi que ya era como medio día, salí por el pasadizo, seguro por los calabozos había una salida, no quería seguir acá, estaba en alerta. Camine por las escaleras y por el pasillo del otro día, seguí más y habían dos pasillos, mire y pensé, derecha o izquierda, mmm derecha seguro es por allí, seguí ese pasillo, pero me llevo a un gran salón rodeado de tarimas, parecía un coliseo romano, había tantos olores que me mareaban y daban náuseas, pensé que antes era una condena pero la verdad, era más feliz cuando no sentía las feromonas.

- viniste temprano cachorro, una voz gruesa me habló detrás de mí.

Gire y era alguien familiar, su cuerpo era parecido al mío, su voz parecida a la mía, cuando quise responder el ya me estaba lanzando un golpe, y luego otro y otro, mí cuerpo actuaba sólo, como si supiera como moverse a cada ataque de mí oponente, su aroma me era familiar, y me gustaba. Sin querer tire un golpe luego de defenderme un rato y le di en su barbilla, provocando que mí enemigo caiga, lo quise ayudar y el me miró sorprendido, y dijo, así que ahora eres cortes, acaso quieres sacarme de mí lugar de nuevo. Le di la mano para ayudar a levantarse y una corriente me recorrió el cuerpo, otra vez un fuerte dolor de cabeza que me hizo gritar, solo lo vi y quise tocar, pero caí, el me levanto en brazos y me llevo hacia mí habitación, en el camino se encontró con Orión el verdugo de la otra vez, le dijo, lleva al cachorro a su habitación y avisa a madre. El desapareció como había entrado a la plaza de prácticas.

En mí mente jugaba con otro niño idéntico a mí, corríamos, perseguimos pequeños animalitos, pero el tenía orejitas hermosas y yo no, eso me ponía triste, ya que todos le daban mas cariño y atención a el por ser puro, incluso decían que era más frágil que yo.

Desperté era de noche, la nana Luisa estaba sentada en una silla junto a mí. La observé ya la desperté, diciéndole, nana quien es Félix, ella entre dormida dijo, mi niño bello. Se despertó y me miró me hizo cariño y una lágrimas le cayeron por el rostro, nana quien es Félix y ella bajo la vista y dijo, el causante que no tengas un reflejo.

No entendí, pero esas palabras las leí hace mucho, creo fue una de las primeras novelas que tuve en mis manos cuando me case hace tres años, en mí primer vida. No recordaba bien pero eran dos hermanos idénticos, pero, de pronto otra vez el dolor de cabeza, quise pedir ayuda y caí inconciente.

... donde estoy pregunté, y una voz dulce y melodiosa me saludó hola mí beta hermoso, yo sonreí a esa luz cálida que me rodeaba y le dije hola, me conoces? Claro dijo soy la diosa de la reencarnación que la diosa Luna envío para ti, su amado hijo. Vio. cuánto sufriste y le dolió el regalo que tu amado te dio, por eso ella te da algo mejor un nuevo comienzo aquí, como sabes tu eres Fe.... Y desperté, mí madre me movía bruscamente para que yo volviera, mí padre se agarraba la cabeza y liberaba feromonas de dolor, yo desperté y abrazó con fuerza a mí madre y comencé a llorar, muchos recuerdos de este cuerpo regresaron, y sentí todo el dolor que el delta sentía antes de morir. Ahora sabía que se volvió duro y sin sentimientos desde niño para que no le afectará las pérdidas de alguien como su abuelo o hermano. sabía que el hombre con olor a whisky hizo toda esa noche con sus hombres y como le pago a los guardias de mi abuelo, fue fácil sacarnos a Fénix y a mi de la cena y mi abuelo me pudo salvar a mí, y por más que agarre las manos de mi hermano iguala se lo llevaron, al igual que mí abuela. Tres días después encontraron el cuerpo de ella mutilado y sin vida.

tres días de agonía q