Alya, una mujer de carrera solitaria, sufre un accidente y muere en el acto. Sin embargo, al abrir los ojos, queda completamente impactada al descubrir que su alma ha entrado en el cuerpo de una mujer desconocida llamada Alexa. Su sorpresa es aún mayor cuando ve a un hombre sentado, con un niño en brazos, mirándola con una expresión fría y cortante.
“Deja de actuar, nunca más volveré a caer en tus trucos”, dijo Kevin Orlando, el esposo de Alexa.
“Papá… ¿mamá va a volver a pegarme?”, susurró un niño de cuatro años que estaba en brazos de Kevin.
Hay una verdad que Alya acaba de descubrir: este nuevo cuerpo esconde demasiados pecados.
¿Qué debería hacer Alya ahora que está atrapada en el cuerpo de alguien tan cruel como Alexa?
¿Reparar las relaciones con quienes Alexa hirió en el pasado… o huir llevando consigo este cuerpo?
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Capítulo 23
Kevin tragó saliva con dificultad. Madre mía, Kevin, quítate esas ideas sucias de la cabeza. Se dijo a sí mismo al ver a su esposa sin ropa frente a él.
"Date prisa", dijo Alexa, avergonzada de que el hombre la mirara fijamente. Mientras tanto, Kay seguía abrazada a su cuerpo y con la cara hacia atrás, no quería que Kay viera su actividad con Kevin.
Lentamente, Kevin comenzó a acercar su rostro al área del pecho de su esposa. "Lo siento", dijo antes de agarrar ese objeto.
Alexa hizo una mueca porque se sentía bastante raro, muy diferente a cuando Kay le succionaba el pecho.
Dimas tenía razón, la succión de Kevin era más fuerte que la de Kay y poco a poco sintió que algo salía de su pecho. ¿Lo habría logrado Kevin?
El propio Kevin se sorprendió cuando algo empezó a salir y entrar en su boca. Cálido e insípido, pero sabroso.
Eh
Parece que la leche materna de Alexa ya había salido. Lentamente, soltó la succión. Sus ojos se dirigieron hacia Alexa, cuyo rostro ya estaba enrojecido.
"¿Ya salió?", preguntó la mujer tímidamente. Kevin asintió y luego jaló el cuerpo de su hijo. "Kay, succiona eso, ya tiene leche", dijo Kevin y dirigió a Kay para que amamantara a su madre.
Kay obedeció y sus ojos se abrieron al darse cuenta de que había leche en el cuerpo de su madre. Con entusiasmo, el niño lo succionó.
Kevin sonrió ampliamente al ver que su hijo ya podía amamantar a su madre.
Su tarea había terminado, inmediatamente retrocedió, con la intención de ir al baño, para resolver algo.
Grep...
Sus ojos se dirigieron hacia su esposa que le sostenía la mano. "¿Qué pasa?"
"Falta el otro", murmuró Alexa tímidamente. El problema era que tenía dos pechos y uno todavía le dolía. Así que, dejando de lado su vergüenza, le pidió a Kevin que la ayudara de nuevo.
Con duda, el hombre se acercó de nuevo a Alexa. La mujer rápidamente cubrió los ojos de Kay con su mano, para que el niño no viera lo que estaba haciendo su padre.
Cuando se sintió segura, Kevin rápidamente metió ese objeto en su boca.
"Akh", Alexa gimió espontáneamente.
...
"Kay no quiere ir a la escuela", dijo el niño después de terminar de amamantar a su madre. El propio Kevin estaba frustrado porque el niño era tan terco como él.
"Si Kay no va a la escuela, no será un niño inteligente", dijo Kevin, ya vestido para el trabajo. Kay ya estaba listo con su uniforme, pero cuando iba a ser cargado, el niño de repente corrió y le pidió a su madre que lo cargara. Y se negó a ir a la escuela.
"Pero Kay está cansado de ir a la escuela todo el tiempo, padre", dijo el niño con un sonido muy molesto. Mientras que la propia Alexa estaba confundida, no entendía cómo convencer al niño de ir a la escuela.
"Date prisa, Kay, tu padre ya casi llega tarde", Kevin miró su reloj, si su hijo seguía perdiendo el tiempo, podría llegar tarde.
"Kay ve a la escuela", dijo Alexa. No pareció funcionar porque el niño negó con la cabeza.
"¿Por qué Kay no quiere ir a la escuela?", preguntó Kevin, que se había acercado a su hijo. No podía obligar a Kay, había prometido no tratar al niño con dureza.
"Kay quiere amamantar con mamá."
Madre mía.
Ahora la cabeza de Kevin era la que palpitaba. Su hijo realmente...
Hah.
"No hay leche hasta que Kay quiera ir a la escuela", amenazó Alexa, haciendo que el niño la mirara con incredulidad.
"Pero Kay quiere estar con mamá", el niño empezó a quejarse. Haciendo que Alexa suspirara con cansancio. Dios mío, está tan cansada.
"¿Quieres ir a la escuela o tu padre se llevará a tu madre?", amenazó Kevin un poco duro. No le quedaba mucho tiempo.
Kay frunció el ceño molesto, luego se bajó del regazo de su madre y salió con los pies golpeando. El niño estaba haciendo un puchero.
"Qué gracioso", dijo Alexa con una pequeña risita.
El propio Kevin se quedó sin palabras al ver el extraño comportamiento de su hijo.
"Me voy primero, cuida bien la casa, si pasa algo puedes llamarme", dijo Kevin mientras acariciaba el pelo de Alexa. Haciendo que la mujer se sorprendiera, era la primera vez que Kevin se despedía de ella e incluso la tocaba con suavidad.
"Ah sí, eh, ten cuidado", respondió Alexa un poco tartamudeando porque era incómodo.
Y lo inesperado antes.
beso.
Kevin besó su frente suavemente. Haciendo que la mujer se sorprendiera de nuevo "Gracias por querer cambiar", dijo Kevin con seriedad. Inmediatamente tomó su chaqueta e inmediatamente se fue dejando a su esposa que seguía en silencio y procesando lo que acababa de suceder.
Alexa se sujetó la frente con su mano derecha. "Él acaba de besarme", murmuró con incredulidad.
...
Escuela
"Kay recuerda, no seas travieso, aprende bien y obedece a la maestra." Como de costumbre, Kevin le dio a su hijo consejos antes de entrar a la clase.
Con los labios ya hacia adelante, Kay asintió levemente, luego se dio la vuelta e inmediatamente entró en su clase.
"Qué niño tan insoportable", Kevin estaba molesto porque Kay todavía estaba haciendo un puchero.
Pum...
Alguien le dio una palmada en el hombro desde atrás. Kevin inmediatamente volteó y descubrió que esa persona era su cuñada.
"¿Dónde está Alexa?", preguntó Lia mientras tomaba la mano de Malik, acababan de salir.
"En casa", respondió el hombre brevemente.
"Entra", le dijo Lia a su hijo. Malik asintió levemente y luego caminó hacia su clase que estaba al lado de la clase de Kay.
Después de asegurarse de que su hijo había entrado. Lia volvió a mirar a Kevin. Haciendo que el hombre se sintiera un poco incómodo.
"Entonces, ¿cómo fue esta mañana?", preguntó Lia, lo que inmediatamente hizo que la cara de Kevin se pusiera roja. Dios mío, se había olvidado de la presencia de su cuñada esta mañana. La mujer estaba claramente al lado de Dimas y escuchó toda su conversación.
"Escuché que tú y Alexa ya se han reconciliado, espero que sea verdad, es una lástima para Kay tener padres que no se llevan bien", dijo Lia, lo que hizo que Kevin se callara inmediatamente. Parece que se había olvidado de eso.
...
Casa
"Señora, este es su paquete". Alexa, que estaba relajándose frente al televisor, inmediatamente giró a la izquierda, viendo a la criada que traía su paquete.
"Tráelo aquí, Bibi", la mujer de mediana edad colocó algunas cajas sobre la mesa. Rápidamente, Alexa trató de abrirlas.
"¿Qué es eso, señora?"
"Un sacaleches", respondió Alexa con calma, no se dio cuenta de que las criadas la miraban confundidas. ¿Para qué su señora pedía un sacaleches? No hay ningún bebé en esta casa.
...
Oficina
"Vin, tu suegro está abajo", dijo Bima que sin permiso entró en la habitación del CEO. Tal vez si fuera otra persona, Kevin ya lo habría despedido, desafortunadamente el hombre era su propio primo.
Kevin inmediatamente cerró sus documentos y salió caminando hacia el primer piso.
....
Bram sonrió ampliamente al encontrar a su yerno que ya había llegado.
"¿Qué pasa, padre?", preguntó Kevin sin rodeos, inmediatamente se sentó al lado del anciano.
Era raro que su suegro viniera sin avisarle con mucha antelación.
Bram sonrió amargamente al darse cuenta de que Kevin seguía siendo indiferente con él.
"Así es, hijo, la empresa de tu padre tiene problemas, tu padre te pide ayuda", dijo Bram mostrando su rostro suplicante.
Kevin sonrió levemente. "Está bien, pero hay una condición".
