SEÑORITA TENTACIÓN.

Mi abuelo me sigue contando, sobre como empezó la historia de mis Padres, y es algo que comprime mi corazón; sin embargo, quiero escuchar hasta el final.

—Como te decía hijo, lo peor estaba por venir, pues tu Padre seguía insistiendo y frecuentando a mi Princesa.

Un par de meses después de su cumpleaños 18, ella empezó a cambiar y Yo lo pude notar, ya no llegaba tan temprano a la procesadora, después que salía de la universidad, siempre me daba alguna escusa, que si el tráfico, que si tareas o amigas.

Y yo por unos días lo creí; Pero no me quede de brazos cruzados y mande a investigar,

Tu Padre la estaba frecuentando fuera del trabajo; en esa misma investigación, me di cuenta de que Franco había tenido por años una relación a escondidas con Aura Morillo, y que había terminado esa relación justo en los días que conoció a Lucianna.

Pero que ella seguía siendo su secretaria.

El investigador me informó sobre varios rumores de que la naviera tenía un par de clientes de dudosa reputación, y que había una investigación abierta sobre posibles embarques de ilícitos; sin embargo, eso quedó como en un vacío sin conclusión y que siempre tendré en mi mente.

Pero como no me correspondia a mi, ni tenía nada que ver conmigo, no le tome tanta importancia a tales rumores, solo decidí tomar medidas y empecé a trabajar con otra naviera también importante en Italia y le pedí a tu Madre que cortara toda relación con Él.

Pero eso no fue suficiente, para alejar a Tú Padre, no logré que se alejara, no logre separarlo de Lucianna.

Hasta que pasados unos 4 meses desde su cumpleaños, tu Madre nos reunió a tu abuela y a mí, para informarnos que estaba embarazada y que el Padre del bebe era Franco Ferretti, y ese bebe eras tú...

Fue un golpe terrible para nosotros, ella era mi Princesa, mi niña, mi sucesora en todo, Yo en ella, tenía puestas mis ilusiones y esperanzas, y no es que no quisiera que Nicolás manejara mis negocios, yo siempre dije que Lucciana heredaría las tierras, y la procesadora y Nicolás heredaría la exportadora y comercializadora que son mis dos exitosas empresas pero son diferentes.

Así lo tenía estipulado ya, pero ese día fue tanta mi desilusión que mi mundo se volvió oscuro.

Tu Madre con tan solo 18 años, estaba esperando un hijo con hombre mucho mayor, que aúnque yo conocía a su Padre un hombre honesto y lo consideré mi amigo, para mí Él no era más que un aparecido indeseable.

Yo estuve triste y por muchos días encerrado, pasaba de mi habitación a mi despacho, no quería ver a tu Madre, no quería hablar con Ella.

Solo estaba planeando que hacer, como solucionar las cosas, llegando a una conclusión y era mandarla al extranjero a pasar el embarazo y que cuando el bebé naciera, lo adoptaría yo como mi hijo, para que así Lucianna pudiera seguir con su vida.

Intente subir en un avión a Lucianna y mandarla a Inglaterra, donde yo tenía amigos que podían ayudarme.

Pero no contaba con que Ferretti y Lucianna ya estaban casados ante la ley.

Ese fue otro gran golpe para mí, tu Madre se había casado en secreto...

Y allí entendí, que mi niña ya no era mi niña, ya era la mujer de Franco Ferretti, un hombre al que apenas conocía, lo único que sabía de Él, era que tuvo un buen hombre como Padre, y aúnque bmi amigo Franco hablaba muy bien de su hijo, para mí era el hombre más detestable del mundo.

A pesar de lo duro que había sido todo eso para mí, mi Mujer, tu preciosa Abuela, me convenció de hacer una boda, para Lucianna, para que no saliera de casa de forma vergonzosa.

Así que arreglamos la boda.

Yo no quería entregar a tu Madre, no quería llevarla de mi brazo y dársela a Ferretti.

Pero un día antes de la boda, ella entró en mi despacho, me pidió perdón, me dijo que sabía la decepción que me había causado y que lo había hecho por amor.

Pero que para ella, era muy importante que yo le entregará y que si yo la amaba lo haría.

Así que me puso contra la pared, por qué sí estaba triste y decepcionado, pero mi amor por mi hija estaba intacto.

Yo la amaba con el alma.

Ese día supe que tu Madre estaba enamorada de Franco Ferretti, y no sé como logró que mi Princesa se enamorara de Él, pero logró que a ella no le importara dejar todo cuanto tenía por Él.

Después de un tiempo las cosas fueron mejorando, ver a mi Princesa con su embarazo, era difícil para mí, pues la seguía viendo como una niña.

Pero me acostumbré y supe manejar el dolor.

Mande a Lorenzo para que la cuidara y me informara de todo, seguí investigando a Franco y mantúve vigilada a Aura.

Como no encontré nada más, me fui confiando.

Aun me dolia que tú Madre estuviera en otra casa que no fuera la mia; pero ese dolor desapareció, cuando tu naciste.

... Yo fui el primero que te vi.

Tu Padre andaba en un viaje y el mal tiempo no le permitió regresar por el peligro que corría.

Y tu Madre tuvo una complicación en el parto.

Parece que tú estabas tan cómodo dentro de su pancita, que no querías salir, a pesar de que ya tenías que hacerlo.

Así que practicarian una cesárea de emergencia.

A ella quizá por nervios o que sé yo, por qué razón; le pusieron doble anestesia localizada; pero no hizo efecto, así que le aplicarón anestesia total, y tener 3 dosis de anestesia en su cuerpo fue complicado, para ella y para tí.

Tú por la agonía que te causo el medicamento tragaste líquido amniótico y eso te causó una infección.

Así que al nacer, te llevaron a la incubadora inmediatamente, pues también tus pulmones habían sido afectados.

Tu Madre quedó muy débil.

Así que yo, fui a verte pues ella no podia levantarse, te vi por primera vez, y cuando te vi te ame, eras mi sangre, y quizá no llevarías mi Apellido al principio, pero eras el hijo de mi amada princesa.

Te amé tanto, como no tienes una idea, aparte de eso tu eras idéntico a mi, una fotografía tuya y una mia de bebé, y era como dos gotas de agua.

Te vi pequeño, frágil, pero estabas aferrado a la vida, te comportabas como un valiente.

Sabes los médicos decían que tendrías un padecimiento cerebral, decían que el líquido amniótico que habías tragado había causado falta de oxígeno en tu cerebro y que afectaría tu motrocidad fina y gruesa, decian que serías retrasado para hablar, caminar, aprender y todo lo demás.

Y eso me dolía mucho, me dolía mas que la despcion por lo que hizo tu Madre, me dolía porque desde que te vi, te ame, y deseaba con todas mis fuerzas que estuvieras bien.

Te ame tanto, que traté de limar asperezas con Franco, quién aparecio a los 3 dias de que tu naciste, Yo traté de ser amable y tener paz por Ti, pues quería verte a ti y tu Madre todos los días y así fue, como aprendí a verlo como mi yerno.

Cuando Lucianna te presento y te puso Leonardo como Yo, fui el abuelo más orgulloso del mundo, pues aparte que te parecías a mi, en todo tu aspecto físico te llamabas Leonardo.

Después de unos 4 meses en los que estabas en control por el diagnóstico que habían dado de ti, tu Madre que era una mujer de Fe, pidió al cielo un milagro, pues los médicos decían, que el daño era irreversible.

No sabemos como sucedió, lo que si sabemos, es que tu Madre pidió un milagro y le fue concedido, desde el día en el que tu Madre arrodillada pidió por ti, tu mejoraste notablemente y quizá suene increíble, pero los milagros si existen.

Tu eres uno, los médicos decían que serías retrasado; pero tu distes tus primeros pasos a los 10 meses y al año ya me llamabas "Abu" a mi.

El niño que decían iba ser retrasado, actuaba tan inteligente y más ágil que un niño normal.

Ahora yo, ya no tenía solo una niña de mis ojos, yo tenía el niño de mis ojos, y eras idéntico a mi y lo sigues siendo.

De hecho fuiste tú quién me ayudo a superar la trágica muerte de tu abuela, quien murió por un golpe en la cabeza al caer de un caballo. tenías solo 4 años y gracias a que tu Madre te dejaba a mi cuidado pude salir de la tristeza.

Es como que la vida se propuso a recordarme que aunque tu Padre no me agrade, eso no tiene nada que ver contigo y que eres la más grande bendición, que llego a la vida de mi hija y a la mía.

Así vivimos mucho tiempo, yo feliz de tenerte, tu Madre te mandaba, para mi casa todos los fines de semana y eran mis días favoritos.

Luego vino la tragedia.

Y Yo, mi querido nieto, tengo la sospecha que mi Princesa sufrió ese ataque cardíaco por una fuerte impresión.

Y no hay pruebas, ni rastros de nada, pero sé que Aura Morillo, tiene mucho que ver.

Para finalizar hijo, quiero decirte que tu Padre aún no me agrada, pero sé muy bien como se comportó con mi Princesa, sé que la amó y que Él aún sufre, pero hay algo que no he logrado saber y eso quiero que tú investigues y lo hagas por mí, Yo sé que hay algo más...—Mi Abuelo Finaliza y yo estoy enmudecido ante tal historia.