Dime Que Me Odias

Narra Danny

Son las siete de la noche y estoy en mi habitación. Miro el techo como si fuera la revelación más grande de mi día. Varias ideas surcan mi cabeza que ha enloquecido por dos personas, ambas antiguas causantes de mi sufrimiento

El teléfono vibra como un corazón herido. Salta rápido a tomarlo creyendo que es Marcos, que por cierto discutió fuertemente conmigo a causa de Javier...

*Javi: ¿Qué camino elijo, artista?

Leerlo fue un error y responderlo sería un suicidio. Me encuentro dividido en una encrucijada entre el querer, el olvido y el amor. Porque siento que si no elijo lo que quiero, entonces tomaré el tercer destino que es es alejarme por completo.

La puerta de mi casa suena como un disparo de salida.

Vale entra como huracán con uñas de dragón.Tiene la llave de mi casa y mi total confianza para ello. Se la dí desde el primer año que fuimos amigos y no me ha dado razones para arrepentirme por mi desición.

Detrás, Renata y Sebas traen bolsas de La Peña y miradas de "intervención urgente". ¡Ah no! no puedo tener la noche con esta sobrecarga emocional. Tengo un escalofrío cuando Vale me mira como diciendo: bueno ya estamos aquí

—¡Habla, López! —Vale tira su mochila en mi cama—. ¿En serio consideras responderle a Javi?

Renata despliega comida como arsenal terapéutico:

—Croissants de chocolate para sobornos, café de triple shot para confesiones — dice ella con una sonrisa amplia

Sebas señala mi teléfono con el dedo índice. Sus ojos café inspeccionando mi cell como si fuera una bomba atómica:

—Ese mensaje es una trampa de nivel 20. ¡Con *CC* incluido!

Vale cortando el aire con movimientos de cabeza optó por acercarse a mí y zarandearme fuerte.

—¡Es Javi, Danny! El mismo que escondió tu inhalador en tercero. ¿Amnesia selectiva? — sus ojos me miraban con determinación a sacarme del hueco donde estaba — No creo que alguien cambie así de la nada por nadie —

Renata untaba mantequilla en un pan con calma mientras que su novio se mordía la uña del dedo pulgar con preocupación:

—Pero también dibujó un héroe perdido... — habló la voz de la compasión y la elocuencia— ¿No es eso un grito de auxilio en código nerd?

Sebas de los nervios había comenzado a hacer diagramas en una servilleta. Mis amigos los tres eran dramáticos a su forma y para que mentir los amaba.

—Analicemos:

- Opción A: Ignoras \= Javi se vuelve *BBEG* (Bicho Malo Final)

- Opción B: Respondes \= Marcos te declara guerra

- *Opción C:¡Nueva misión! Ayudar al NPC a redimirse.

Vale lanza un croissant a su cabeza. Sebas se queja con un sonoro ¡Haaaay! Renata nos brinda una sonrisa amable.

—¡No es un maldito non-player character! ¡Es Torres! —

Mi mejor amiga más cercana estaba alterada y no era para menos. Las consecuencias de salvar a Javier eran altas teniendo en cuenta lo celoso y posesivo que era Marcos. A estas alturas del campeonato yo mismo era sincero conmigo mismo: Javier también me gustaba...algo.

Apago las luces. La lámpara proyecta burbujas de cera como planetas derretidos. Mi madre me permitía algunos caprichos y yo estaba bien con ello. No abusaba del amor de mi madre, pero de vez en cuando dejaba que me mimara.

—Javi robó un botón de mi camisa en tercero —susurro— Lo guardó dos años

Renata deja caer su taza:

—¿El botón azul de tu uniforme?¡Siempre dije que desapareció muy raro! — se tapa la boca para no gritar — Oh mi Dios esa es una declaración sin palabras —

Sebas ilumina su rostro con el celular:

—Esto cambia todo. De *"bully resentido"* a *"romántico distópico"*

Vale me agarra los hombros:

—¡Que te robara un botón no borra que te tiró zumo en la cabeza!

Me acuerdaba de ese día. Era el inicio de todo y ya estaba algo acostumbrado a los maltratos... Además Vale no salía de mi lado. Pero Torres siempre era experto en escalar un nivel. Me tiró todo el zumo de naranja en la cabeza fingiendo que se le había resbalado de la bandeja.

A lo que Vale respondió tirándole una hamburguesa con demasiada grasa. La disputa no se hizo esperar en el centro del pasillo del comedor. Torres rojo como tomate y Vale con una sonrisa cínica.

Vuelvo al presentó al escuchar la voz de Sebas:

—Pero dibuja —contemplo la servilleta — Los tres dibujaban en secreto. Danny, Torres y Rojas ¿Destino o Influencia?

Justo cuando voy a responder esa pregunta mi teléfono estalla:

—"¿ESTÁS CON ÉL?" — no necesitaba desbloquear el cell para saber de quién era el mensaje.

Renata arrebata el móvil y desbloquea el mensaje de voz yo le miro mal:

—¡Hola, posesivo! Somos el Comité Anti-Torres. ¿Quieres pizza o paranoia?

Escucho su voz grave por el altavoz:

—Dile que si responde ese mensaje, lo que viene no será bonito—

Sebas toma el relevo:

—Marcos, nivel de ira: ¿Orco o Dragón Cósmico?

Cuelgan. El silencio se llena de preguntas.

Vale coloca tres cartas sobre la mesa (literalmente cartas de Magic):

- Bolas de Fuego (Ignorar a Javi)

- Curación (Ayudarlo en secreto)

- Contrahechizo (Hablar claro con ambos)

Renata elige Curación:

—¡Todos merecen un side-quest de redención!

Sebas elige Contrahechizo:

—¡Transparencia ante todo!

Vale mira mis manos vacías:

—Elige, López. El poder está en tus manos—

Ella no estaba eligiendo por mí. Cada uno de mis amigos había retirado una carta para que viera la desición evidente, pero nadie me juzgaría si tomaba otro camino. Otro sendero dirigido a un final bueno o malo.

Pensè en Marcos en sus labios sobre mí, en nuestras manos entrelazadas y en el calor de nuestra pasión. Luego en Javi y en su inesperada fragilidad, en todo lo que espera sanar al depositar su confianza en mí y en el miedo al rechazo que esconde, pensando que nadie lo sabe.

Escribo dos mensajes:

Para Javi:

*Deja de robar botones. Empieza a dibujar TU futuro.

Para Marcos:

*No estoy con él. Pero tampoco soy solo tuyo.

Renata abraza mi espalda:

—Bravo. Ahora rezamos — hizo el símbolo de la trinidad de izquierda a derecha — porque algo me dice que Rojas estallará.

Vale mira el teléfono como si fuera a explotar:

—El chico bueno, el malo y el celoso... ¿Quién responde primero?