"Morí traicionada por el hombre que debía amarme... y por la sangre de mi propia hermana."
En su vida pasada, Aelina Valemont, Reina de Thalair, fue humillada y asesinada por su esposo, el Príncipe Heredero, y por su hermana. Sus padres también fueron ejecutados bajo falsas acusaciones.
En su último suspiro, Aelina juró venganza.
Ahora, ha despertado en su cuerpo de 16 años. El día de su boda con el príncipe cruel se acerca... pero esta vez, el destino cambiará.
En el altar, rechaza públicamente al príncipe.
Sabe que ha firmado su sentencia. Su familia sigue en peligro. Y sola, no podrá vencer a un enemigo tan poderoso.
Por eso comienza a buscar aliados. Hombres fuertes, peligrosos, capaces de cambiar el curso del reino. Pero lo que empieza como un plan frío, se transforma en una red de emociones que no podrá controlar:
Un caballero leal.
Un archimago distante.
Un noble rebelde
Un asesino en las sombras.
Un príncipe extranjero con su propia agenda.
NovelToon tiene autorización de Mandarino para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Capitulo 21:"Primer golpe en el tablero"
El regreso de la cacería fue tenso.
Los rumores del atentado contra Aelina se esparcieron como pólvora.
El broche que llevaba seguía brillando, como un desafío.
"Esta vez no retrocederé."
---
Esa noche, en la torre, Aelina reunió al círculo.
—Ya no podemos permanecer en las sombras —dijo—.
Hoy Darius ha mostrado su voluntad de matarme.
Es hora de mostrar la nuestra de resistir.
Kael apoyó la mano en su hombro.
—Os apoyaremos. Hasta el final.
Ronan añadió:
—Tengo contactos dispuestos a difundir… ciertas verdades.
Lucas, aún vendado, asintió.
—El pueblo empieza a hablar. Podemos usarlo.
Aurelian sacó un documento.
—He recuperado registros de impuestos ilegales… firmados por Darius.
Podemos filtrarlos.
Aelina sonrió.
—Perfecto. Mañana… el pueblo y la corte oirán el primer golpe.
---
Cuando la reunión terminó, Kael se quedó rezagado.
—My lady… quería… hablar.
Aelina lo miró.
—¿Qué ocurre?
Kael respiró hondo.
—Hoy temí por vos. Más de lo que debería sentir un caballero… por su dama.
Ella dio un paso hacia él.
—Kael…
Él tomó su mano, tembloroso.
—No sé si podré protegeros siempre. Pero… mi corazón… ya no puede fingir.
Aelina cerró los ojos.
—Yo tampoco quiero fingir.
Kael la abrazó. No hubo palabras, solo un contacto sincero.
"Ahora… todo es aún más frágil. Y más fuerte."
---
Poco después, Ronan encontró a Aelina en la biblioteca.
—Dura noche, ¿eh?
Ella sonrió, cansada.
—Sí.
Ronan se acercó, sin su máscara habitual.
—Aelina… yo también temí hoy.
Y odio temer. Por eso… quiero proponeros algo.
—¿Qué?
Ronan la miró con intensidad.
—Si me aceptáis en vuestro círculo más íntimo… no solo como aliado.
Como… lo que queráis que sea.
No habrá límite en lo que haré por vos.
Aelina sintió un vuelco.
"Ahora… otro peligro."
—Ronan… sois importante para mí. Pero no puedo… ahora no.
Ronan sonrió triste.
—Entonces esperaré.
Pero recordadlo: cuando llegue el día, no tendré dudas.
Se marchó, dejando a Aelina temblando.
"Kael… Ronan… ¿cómo manejaré esto?"
---
A la mañana siguiente, el golpe se ejecutó.
Los registros de corrupción de Darius fueron filtrados a través de contactos de Ronan y Lucas.
En las calles, la gente murmuraba.
En la corte, los nobles leían con ojos agrandados.
"El príncipe… ladrón de su propio pueblo."
El círculo había logrado el primer golpe visible.
---
Darius, furioso, convocó a sus consejeros.
—¡Descubrid quién ha hecho esto!
¡Y acabad con esa bruja antes de que sea tarde!
El traidor en el círculo… temblaba.
"Si no actúo… caeré con ellos."
Esa misma noche, un veneno fue colocado en el té de Lucas.
Por suerte, Aurelian interceptó la trampa.
—Tenemos al traidor muy cerca —susurró a Aelina.
Ella asintió, helada.
—Lo atraparemos. Pero con cuidado.
"Uno a uno… caerán."
---
Esa madrugada, cuando el círculo se retiraba, Aelina encontró un sobre en su alcoba.
Era un mensaje antiguo. El sello… del Marqués de Alarien.
"Mi antiguo maestro. Pensé que estaba muerto."
Lo abrió, temblando.
"Aelina. Sé lo que tramas. Y sé que el enemigo es mayor de lo que crees.
Si quieres ganar… ven a mí. Solo yo puedo darte la llave que falta."
No había firma.
Solo un lugar y una hora.
"El juego… acaba de complicarse aún más."
Aelina respiró hondo.
"Padre. Madre. No temáis. Hoy he dado el primer golpe. Y no me detendré."