Mila Haro y Avery Carter, son dos mujeres muy diferentes, pero con destino en común.
Mila es una joven virgen y universitaria que se esfuerza día a dia para sobrevivír, huérfana y criada en un orfanato desde que era una bebé, llegará a la mansión Carter y será la niñera de Evelyn Carter, la pequeña hija del libertino Axel Carter, hermano menor de Avery.
Avery es una mujer empoderada, CEO de la mejor empresa de ciudad Topacio, pero también es quien gobierna en el bajo mundo, conocida como "La Reina" es una mujer que obtiene todo lo que quiere por las buenas o por las malas y eso incluye a los hombres, ha tenido a todo hombre que le gusta, excepto a uno, a su esposo o mejor dicho futuro ex esposo, el misterioso detective Erick Leroy.
Secuela de la novela El Corazón de la Bestia.
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Ambas morirán
...❤️👑🖤NOTA DE AUTORA❤️👑🖤...
...Queridos lectores, apoyen por fis con su puntuación a la novela ⭐⭐⭐⭐⭐ para que sigan subiendo en el Ranking, también sus likes son necesario tengo más solicitud de actualización que Like 🫠 no es justo, apoyemos a nuestros Leoncito y dragoncito para que sean populares 🖤❤️...
...Disfruten el capítulo, los amito 💕💕🫰...
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Mila finalmente pudo reincorporarse a sus labores después de dos días más de descanso, ayudo a Evelyn a arreglarse, desayunaron juntas, Axel se había marchado temprano sin siquiera despedirse de ninguna de las dos, después de llevar al colegio a Evelyn se dirigió a la universidad tendría alrededor de tres horas de clases y después debía ir a las empresas Carter para continuar con sus prácticas, se sentía apenada pues apenas había asistido dos días desde que entrego la documentación.
Al llegar a las empresas Carter, se dirigió al área donde la habían asignado, para su sorpresa cuando estaba por sentarse fue llamada a recursos humanos, se dirigió a la oficina del jefe, pensando que tal vez ya no permitirían que diera sus prácticas, si era eso estaría perdida pues ya no podía meter sus documentos en ninguna otra empresa.
- Oh, pase señorita Haro- Dijo Benjamín en el jefe de recursos humanos.
- ¿Pasa algo malo? – Preguntó Mila nerviosa mientras tomaba asiento, Benjamín la miro y negó, Mila suspiró aliviada.
- Solo quería informarle sobre su cambio de área- Dijo tomando una carpeta color negro – Tendrá los mismos horarios, aunque las actividades serán de mayor importancia, pero dado a su especialidad sé que podrá cumplir ellas. – Le entregó la carpeta.
- ¿Asistente de dirección? – Lo miro con sorpresa al leer el cargo, ella solo era una practicante, ¿Cómo podían darle ese cargo?
- Si, descuida tendrás asesoría, este es su nuevo gafete, te da acceso al área Vip, por decirlo así- Sonrió Benjamín, Mila tomó su nuevo gafete, al área vip se refería al piso donde se encontraba la presidencia, muy pocos tenían acceso a ese piso y ahora ella pertenecía a esos pocos.
- Gracias – Mila salió aun sin creer, se dirigió al ascensor para ir a su nueva área, esperaba no tener problemas con su nuevo jefe o jefa, de la sorpresa ni siquiera pregunto de quien se trata.
Al salir del ascensor abrió los ojos con sorpresa, de por sí el edificio ya era muy elegante, pero ese piso se pasaba de elegancia y lujos, se acercó a la recepción donde estaba una mujer mayor de cabellos canosos, con lentes y vestía un traje formal color gris.
- Disculpe, soy Mila Haro- Mostró su gafete y entregó la carpeta- Me asignaron al área de dirección- Continúo, la mujer la observo de pies a cabeza, e hizo un gesto de desagrado debido al tipo de ropa que llevaba, jeans, tenis blancos y una blusa del mismo color que sus tenis, Mila se sintió incomoda sabía que no estaba vestida de manera adecuada para esa área, pero ni siquiera sabía que la cambiarían.
- Vamos, este será tu escritorio a partir de ahora- Dijo mientras caminaba hasta dicho lugar, era grande, elegante y estaba en frente de una puerta color negra. – Esa es la oficina del Director – Agregó – Será tu jefe, te ayudare unos días para que conozcas tus funciones, lo primordial es tener al día su agenda, preparar su café ¿Sabes preparar café? – Preguntó mirándola de pies a cabeza, Mila sonrió.
- Si, se hacerlo- Dijo y no mentía trabajo un par de años en la cafetería así que eso era fácil.
- Muy bien, en esta tablet está la agenda del Director, debes aprenderla y tenerla al día, no se te puede pasar nada ¿Quedo claro? De momento harás eso, me encargare de la papelería y te enseñare poco a poco- Le entregó la tablet y miro hacia la computadora- Hay unos contratos que el Director debe autorizar, revísalos y una vez terminado los imprimes y me los pasas para que también los revise antes de que los pases a firma- Señalo hacía la computadora, Mila asintió.
- Entendido, haré todo lo que me diga…- Se quedó callada pues no sabía el nombre de la mujer.
- Soy la Señora Fátima – Se presentó, Mila asintió.
- Señora Fátima- Dijo, Fátima regreso a su lugar dejando que Mila se acomodara en su nuevo escritorio.
Durante un par de horas se encargó de revisar los contratos que le dijo, corrigió lo que ella creyó conveniente y esperaba no haberse equivocado, esa área se adecuaba más a lo que estudió y quería hacer lo mejor posible para que en un futuro cuando terminara sus prácticas recibiera un contrato de trabajo.
- Señorita Haro, el director ya salió de su reunión, prepara un café para él- Ordeno Fátima desde su lugar, Mila asintió y se dirigió a la pequeña cocina para preparar el café, comenzó a sentirse nerviosa no sabía quién era el director, ni siquiera vio su nombre en los contratos, pensaba en preguntarle a Fátima, pero se entretuvo revisando.
Cuando termino de preparar el café no le agrego azúcar no sabía cómo le gustaba al Director, coloco la taza en una bandeja junto con unos sobres de azúcar, cuando llegó de nuevo a su lugar encontró a Fátima salir de la oficina del director.
- Entra a dejarle la taza y aprovechas para presentarte- Dijo Fátima observando la taza de café, tenía buen olor a pesar de que era el café que tomaban diario.
- Si – Respondió nerviosa, se acercó a la puerta, dio dos toques, pero no recibió respuesta, dirigió su mirada a Fátima, ella le hizo señas de que entrara, total el director esperaba su taza de café.
Mila entró a la lujosa oficina era enorme, no se veía del otro lado así, había incluso una pequeña sala con un televisor enorme, también un mini bar y dos puertas en un extremo, tal vez una era el baño, la otra quien sabe, camino hasta el escritorio para dejar con mucho cuidado la taza, no quería estropear nada de lo que había ahí, se quedó maravillada de la gran ventana que había detrás del escritorio, abarcaba casi toda la oficina y daba una gran vista de la ciudad, se quedó observando por unos segundos, hasta que escuchó que una puerta se cerró, dio un pequeño salto y suspiro, debía presentarse, se arregló un poco su cabello y se giró, sus ojos y boca se abrieron de sorpresa al ver al sexy hombre que salía de una de las puertas, estaba en una llamada, pero su mirada ya la recorría de pies a cabeza, hasta cruzarse con esos hermosos mieles que la dejaban sin aliento y esa encantadora y coqueta sonrisa de naturaleza.
- Te llamo después- Colgó Axel la llamada.
Axel camino a grandes pasos hacia Mila, al tenerla ya cerca la rodeó de la cintura atrayéndola a él, sin dejarla reaccionar atrapo sus labios en un tierno y apasionado beso, ella trato de apartarlo por unos segundos, pero se terminó rindiendo ante él, la cargo en brazos, ella rodeo sus piernas alrededor de su cintura, Axel camino hasta la pequeña sala y se sentó en el sofá con ella sobre él.
- Señor Carter- Susurro jadeante al terminar aquel apasionado beso, Axel acarició su mejilla con ternura- ¿Usted es el director? – Preguntó nerviosa.
- Lo soy- Respondió sin dejar de mirarla con ternura, Mila sentía que se derretía ante esa mirada.
- ¿Usted pidió mi cambio? – Volvió a preguntar, Axel solo se encogió de hombros- Solo soy una practicante, no puedo ser su asistente, además…tengo que cuidar de Evelyn – Dijo nerviosa, Axel no dejaba de delinear con sus dedos cada parte de su rostro.
- Descuida, tus horarios seguirán igual, podrás ir a la universidad, cuidar de Evelyn y trabajar para mí- Respondió despreocupado.
Mila suspiró, debió imaginarse que él estaría ahí, después de todo también era heredero de la familia Carter, trató de levantarse alguien podría entrar y encontrarlos así, eso sería un problema, pero Axel ni siquiera se lo permitió la aferró a él y recostó su rostro sobre su busto.
- Alguien puede entrar y vernos, además tengo trabajo que hacer antes de ir por Evelyn – Dijo nerviosa.
- Solo un rato más…ha sido una mañana agotada – Murmuro, desde que llegó no había parado, había estado de una reunión en otra supliendo a su hermana quien se estaba ocupando de otros asuntos relacionados con Sol Negro por supuesto que él también estaría al tanto.
- Supongo que es un cargo muy pesado- Susurró acariciando su sedoso cabello.
- Quiero renunciar- Dijo con pesadez.
- Es su primer día, no puede hacerlo – Comentó asombrada, Axel soltó una pequeña risa, no le gustaba el trabajo de oficina, sabía hacerlo pues desde joven fue capacitado, pero su hermana siempre tomo las riendas, incluso cuando apoyo a Maximiliano terminaba exhausto y eso que normalmente la bestia hacía la mayor parte, él solo se encargaba de que todo siguiera su curso.
- Era más divertido ser el niñero de las mini bestias- Murmuro recordando a esos pequeños gemelos, levanto su mirada hacia Mila, era curioso, él fue niñero de los gemelos y ahora tenía en sus brazos a la niñera de su hija.
- ¿Niñero de las mini bestias? – Preguntó asombrada, Axel se encogió de hombros, subió sus manos hasta su cabeza y la atrajo para darle otro tierno beso.
Aquel momento fue interrumpido por el celular de Axel, soltó una maldición al terminar el beso, miro de quien se trataba hablando de las mini bestias.
- ¡Papá bestia! - Contesto emocionado el teléfono, Mila trato de levantarse, pero él la sujetaba muy bien de la cintura.
- Solo escuchar tu voz dan ganas de matarte – Soltó del otro lado del teléfono Maximiliano, Axel puso los ojos en blanco-
- También te extraño, ¿Cómo has estado? ¿Cómo está la señora bestia? ¿Y las mini bestias ya gruñen más? – Preguntó con diversión, Mila solo lo observaba, ese hombre era demasiado infantil, pero incluso eso le gustaba de él, suspiró, al darse cuenta que admitía que Axel Carter le gustaba.
- Tuve una conversación con la Bestia, envía un recado al dragón y a ti – Ignoro todas sus elocuentes preguntas, Axel tomó seriedad- “Idiotas, deben encontrarlas antes de que dañen al ser celestial, de lo contrario, ambas morirán” Eso dijo – Dio el mensaje.
Axel aflojo el agarre en la cintura de Mila, se sorprendió al ver el rostro de Axel de alegre se tornó serio y podía ver la ira en él, se levantó al ver como sus ojos cambiaron a ser negros por unos segundos.
- También dijo que hace unos días se escucharon unas campanadas en el inframundo, según él esa era la señal cuando el Ser celestial abría las puertas- Comentó de nuevo, Axel suspiró y cerró sus ojos tratando de controlar al León.
- ¿Cuándo fue? – Preguntó, Maximiliano respondió y Axel dirigió su mirada a Mila, fue justo el día del ataque en el parque de diversiones. – Bien, le daré el mensaje, gracias Maximiliano- Terminó la llamada.
- ¿Se encuentra bien? – Preguntó Mila nerviosa, podía notar a Axel aún enojado.
- Si- Se limitó a responder, se levantó y dirigió a su escritorio tomo la taza de café y bebió, le gusto el sabor, acostumbraba tomarlo sin azúcar.
- Sus ojos…cambiaron de color hace un momento- Dijo en voz baja, pero Axel la escuchó, dirigió su mirada a ella.
- Ah, si…es dado a mi magia- Respondió aún serio, ella solo asintió, nunca se familiarizo mucho a la magia ya que la de ella era débil.
- Se parecían a los de un gato- Murmuro, Axel dejo la taza de café en el escritorio y se acercó a ella, la atrapo en brazos y sonrió
- Soy un lindo gatito- Beso sus labios de manera corta y tierna, Mila arqueo las cejas por el cambio de humor de ese sexy hombre. – Un lindo gatito que se quiere devorar a una linda ratoncita- Mordió su barbilla, mientras sus manos bajaron a sus glúteos, Mila soltó un largo suspiro.
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Erick asistió a la estación de policía, no podía faltar tantos días o tal vez sí, pero eso solo crearía sospechas en él, se sentó en su escritorio y reviso algunos de sus correos, debía hacer espacio, deslindarse de varios casos, pues ahora tenía que encargarse de Sol Negro, en especial de su líder, Lysander Tarasov se había vuelto en su objetivo, lo haría pagar por lo que le hizo a Avery Carter.
- Detective, le llegó este sobre por la mañana- Entró una policía, Erick tomó el sobre y ni siquiera agradeció a aquella chica quien se salió un poco molesta por su actitud prepotente.
- Dime- Contestó la llamada que recibió.
- Le envíe en físico toda la información sobre la agresión que sufrió la Señora Carter- Dijo el hombre del otro lado del teléfono- Es la única copia que hay, me encargue de todo ya sea confidencia y que nadie más que la señora y usted tengan acceso a esa parte de su historial clínico- Agregó.
Erick no dijo nada, colgó la llamada y se dispuso a abrir el sobre, su rostro se tensó, la ira se apoderaba de él al ver las imágenes de Avery, las heridas que sufrió en cada parte de su cuerpo, su respiración se aceleró al ver como uno de sus senos había quedado destrozado y su rostro estaba irreconocible, sus piernas tenían cortadas tras cortadas dejando a carne viva, habían imágenes de cristales y metales que tenían escritos en que parte de su cuerpo habían estado, ella no murió de puro milagro, también habían imágenes del proceso de la curación de sangre, leyó el expediente, fue encontrada un mes después de su desaparición en un terreno baldío a las fueras de ciudad Topacio, paso por varias cirugías de reconstrucción de rostro y también de su seno, pero a pesar de eso, su vida seguía en peligro, por lo que fue necesario recurrir a la curación de sangre la cual fue la última alternativa y a pesar del riesgo que conllevaba, ella lo soporto y sobrevivió, fueron dos meses de dicho proceso.
- Mierda- Paso una mano en su cuello tratando de controlar la ira, dos meses en ese proceso debió ser terrible para ella. – Seis meses de recuperación- Susurró, a pesar de que la curación de sangre fue un éxito por decirlo así, tardo mucho en recuperarse, guardo los documentos en el sobre y en segundos este se volvió nada en sus manos.
- Te hare vivir el infierno en carne propia- Su voz se combinó con la del dragón
Me encanta la reacción de celos de ambos del gatito y Milena , son super cómicos ellos , en el buen sentido
excelente capitulo
ya Kiero ver cómo ande de celos 🫠
mi cubo de hielo gracias autora por traerlos de vuelta
otro capítulo xfis 🙏🏻