Cómo toda chica sueña con su historia de amor y formar una familia, pero como dicen no todo lo que brilla es oro está es mi historia al pasar de los años aprendí que si hay amor con la persona correcta...
Ahora con mi hija, intento caminar con la frente en alto, para darle una buena vida. Aunque sea madre soltera, con tan solo 26 años de edad, y pese a que sea difícil llegar a fin de mes, no me arrepiento de haberla tenido.
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capitulo 20
SENTIMIENTOS...
Sebastián estoy en mi despacho firmando unos papeles y escucho tocar y digo adelante sin levantar la vista y sigo en lo mío pensando que era Nana pero cuando
Escucho su voz la miro y es ella tan hermosa como siempre lleva el uniforme igual que las demás empleadas, pero se ve tan sexi
El uniforme se apega tan bien a su cuerpo que me dan unas ganas de hacer la mía que estoy pensando
Dejo de lado mis pensamientos y le digo gracias por haberte molestado ese no es tu trabajo
Olivia: cuando Nana iba a llevar el desayuno a don Sebastián le digo yo se lo llevó no es molestia y así Nana me lo da y cuando voy entrando
No me presta atención, pero al levantar la mirada esos ojos tan azules se clavan en mí que me recorre un escalofrío en todo mi cuerpo y me mira tan penetrante que asta me falta el aire
Y le digo su desayuno señor y cuando me agachó a dejar la bandeja se me desprende un botón
Y cuando levanto la mirada Sebastián tiene su mira en mí sus ojos se oscurecieron
Sebastián: cuando se le desprendió el botón de su uniforme ya no pude controlarme más y me levanté
En un segundo estuve tan cerca de ella que pude sentir su respiración agitada sus pechos subían y bajaban ya no me pude controlar
Y me lance a sus labios y los devoraba con deseo ella me correspondió es como si nuestros cuerpos hablarán solos ya no pude detenerme la cargue y recosté en el escritorio
Y empecé subir con mis manos por su muslo ella solo se estremeció por mi tacto
Nos separamos por falta de aire, pero volví a besarla y recorrer su cuello a lamer y apretar sus pechos
Ya no aguantaba más y le subí su vestido y arranque sus bragas y baje a su clítoris y la empecé a lamer morder y chupar ella solo gemía sus gemidos eran música para mis oídos subí a su altura y le digo ya no aguanto más y bajo mi pantalón y la penetro de una estocada ella solo gemía AAA
Sebastián quiero más cómo órdenes mi reina le di más duro como me lo pedía agarre sus pechos y mordía y chupaba
Están tan apretadas que rica estas AAA Sebas ya no aguanto más
Aguanta preciosa ya terminó AAA si así que rico vente con Migo AAA AAA
Quedamos exautos y en un gran silencio solo se oía nuestras respiraciones agitadas ninguno dijo nada...
me gusta que se salvaron Olivia y Sebastián