La Persona Equivocada

Todos estaban curioso, por lo que íbamos a decir, pero lo que me daba curiosidad, era saber cuál era el interés de Eddy Tomás en todo esto, ¿él seguía enamorado de Megan?, todos veían la situación, pero solo hizo una pregunta para ser sentirme incómoda, iba a responderle, pero Bruce, se me adelanto.

- Te responderé con otra pregunta, ¿Todavía te gusta Megan?, o ¿ahora estás interesado en Linda?, si la respuesta es Megan, ya estamos divorciados, ella puede hacer su vida con quien quiera, pero si dices que ahora te interesa Linda. Te diré que pierdes tu tiempo porque soy un hueso duro de roer, así que ríndete desde ahora.

El ambiente se puso tenso otra vez, ya era tarde al otro día tenía que trabajar, entonces le dije a Isaac,

- ¿Cuándo nos vamos?

- Ya Natalie fue a pagar la cuenta, ya casi nos vamos, pero no puedes manejar con la muñeca así.

A pesar de todo el hielo que me aplico Bruce, mi muñeca, esta dolorida, y roja, así que no era conveniente manejar, es bueno di Isaac lleva mi auto, y Natalie lleva el de ellos, entonces me iré con Natalie, esta casi todo decidido, hasta que Natalie dijo,

- Bruce puedes llevar a Linda casa, Isaac, llevará su auto.

- Espera, no es mejor que me valla contigo, y así...

- No Linda, quizás mañana, ese más hinchada tu muñeca, así que Isaac, te recogerá para que vallan juntos al trabajo, yo llevaré a Cristina al preescolar, y luego iré a la agencia de eventos después, y mi auto esta dañado así que tomaré el de Isaac, pero el bufete está tan cerca de tu empresa todo es perfecto.

Las explicaciones de Natalie eran muy lógicas, pero, sentía como que estaba callando en una trampa o algo así, lo peor es que Bruce no se negó a llevarme, él solo ese quedó callado, asintiendo con la cabeza, poco después todos salimos del restaurante, me despedí de Isaac y Natalie, quienes se fueron primero, Bruce me abrió la puerta de su auto, y luego la cerró para, dio la vuelta, y entró al auto, encendió el auto y comenzamos a rodar, ninguno dijo nada por un rato, entonces se me ocurrió preguntarle.

- ¿Cómo va lo de Megan?

Respiro profundo, y me contestó,

- Estás tan desesperada por empezar nuestra relación.

- Sí.

Se puso a reírse, como un loco, pareciera que mi respuesta era un chiste, después de que se río por un corto tiempo, se puso serio y comenzó a hablar.

- Es unos días, ya estará ingresada en la clínica de rehabilitación, no te preocupes por eso, te daré un regalo cuando eso suceda, como símbolo de nuestro nuevo comienzo.

- No necesitas tarde nada.

- Pero yo quiero darte muchas cosas, y debes aceptarlas, también quiero conocer a tus padres, y que salgamos con tus amigas, quiero hacer todo lo que antes no pude hacer.

En su voz, podía sentir una gran emoción, es como si Bruce esperara reiniciar su vida desde cero, en el momento que comencemos a salir oficialmente, todo faltaba un tiempo para que llegáramos a mi casa, no esperaba que Bruce tuviera planeado detenerse, pero lo hizo y me dijo,

- Espera un momento debo comprar algo.

Salió del auto, yo prendí la radio y puso la emisora que suelo escuchar, sonaba una de mis canciones favoritas "Hello" de Adele, la puse a bajo volumen, entonces mire para la dirección en la que Bruce se había dirigido, y vi que había entrado en una farmacia, cerré los ojos un minuto, estaba tan cansada que me dormiría en el auto si no fuera un problema despertarme luego, cuando escuche la puerta del auto abrir, también abrí mis ojos, Bruce había subido al auto con una pequeña bolsa de papel en las manos, la puso en el portavaso del auto por un momento, luego cerró la puerta, toma la bolsa, sacó una casita alargada, y de la cajita un pequeño estuche que parecía una crema, entonces dijo,

- Dame tu mano.

Le entendí mi mano lastimada y él me la sostuvo como mucha suavidad, la acerco a él, luego la puso sobre su pierna, unos pensamientos extraños me pasaron por la mente, él destapó la crema, sé la unos en la mano derecha y con la izquierda, me tomo del brazo, y comenzó a ponerme la crema en la muñeca.

- Este es un ungüento, calmante y desinflamatoria, lo usamos mucho para los golpes en el fútbol, así que creo que te mejorarás con esto.

En ese momento él me miró a la cara, y nuestros ojos chocaron miradas, no lo sé hay algo en sus ojos, esos son azules océanos que me tragan y me llevan a la profunda, no sé si tiene la capacidad de hipnotizar con la mirada, pero me he sentido así, desde hace año, como bajo un hechizo, esa sensación vuelve apretar mi corazón otra vez después de tantos años, supongo que pensé que lo hubiera superado, por qué ya ni lo tenía que ver casi todos los días, como cuando estábamos en la secundaria

- Listo.

Dicho esto soltó mi brazo, puso la crema en la caja, y luego en la bolsa de plástico y me la dio, encendió el auto otra vez, y arrancó, yo solo deseaba llegar a casa a dormir, ya pensaría después de un buen sueño, y mañana muchas cosas que hacer.

- Sabes, aunque tu cara siempre esté seria por la enfermedad, tus ojos lo dicen todo.

- ¿Eh?

- Tus ojos son muy expresivos, por ejemplo justo ahora cuando nos miramos parecías encantada por mí, desde hace mucho tiempo me di cuenta, que te gustan mis ojos.

- Tu sonrisa también me gustaba mucho, solo que ahora ya no sonríes como antes.

Después de eso no hubo más convivencia, y en un abrir y cerrar de ojos, ya estamos frente a mí, casa, Bruce sé estacionó, en frente, apago el motor, se bajó del auto, dio la vuelta y me abrió la puerta, incluso me ayudo a bajar, cerró la puerta, y me acompaño hasta la puerta, yo con la mano izquierda saqué las llaves de la casa, como era algo incómodo para mí abrir la cerradura, Bruce tomo las llaves de mi mano, y abrió la cerradura, luego me dio la llave, entonces le dije.

- Gracias, buenas noches.

- Espero, tengo que decirte algo.

Está a un paso de la cama, así que espero que no se toma mucho tiempo, eso era en lo que pensaba, hasta que él comenzó a decir.

- Sobre nuestro trato, quiero un adelanto.

- ¿Un adelanto?

Estaba un poco confundida, que tipo de adelanto, quería, y lo más importante, que es un adelanto de una relación,

- Estas de acuerdo en dar un adelanto.

- En realidad no entiendo, pero si eso te hace feliz está bien, dime, ¿qué tengo que hacer?

Se aceró mucho a mí puso su mano la puerta, prácticamente estaba acorralada, como esa frase popular entre la espada y la pared, entonces puso su brazo alrededor de mi cintura, me sujeto con fuerza, me elevo un poco, entonces cuando lo miré a la cara, porque no entendía lo que estaba haciendo, roso sus labios con los míos primero, luego me miró a la cara, no sé que estaba buscando, pero cuando vio lo que buscaba me besó de verdad, apretó su mi cintura, mientras me devoraba con su boca, en ese momento mi mente se puso en blanco y solo colabore, pude mi mano al rededor de su cuello, sentía ese calor, y la electricidad que recorría todo mi cuerpo, creo que estaba tan enamorada, que un gemido salió de mi garganta.

En ese momento se separó de mí, quito la mano de mi cintura, y dio un paso atrás,

- Ya obtuve mi adelanto ahora entra.

Mi corazón estaba muy agitado, y mis piernas me templaban un poco, todas estas cosas no las había sentido antes, esta clase de emociones, me contaba procesarlas, respire profundo y le dije de nuevo.

- Buenas noches.

Rápidamente, entre a la casa, y cerré la puerta, no espere a que me respondiera, me quede en la puerta esperando que se fuera, poco después escuché sus pasos alejándose, luego cuando el auto arrancó, y ya no podía escucharlo, me desplome en el suelo, ese fue mi primero beso, y sentí como que mi pecho iba a explotar en mi interior, no sé si después de esto pueda dormí.