Letícia Miller es una excelente secretaria de un magnate rico y arrogante, un hombre que puede tener a cualquier mujer que desee en cualquier momento.
Se encuentra en apuros cuando su hijo, Pierre Miller, fruto de una noche que nunca olvidará —ya que estaba en un evento de negocios de la empresa en la que trabaja—, se enferma. Esa noche, alguien le jugó una mala pasada, drogándola y encerrándola en una habitación donde también había un hombre misterioso drogado. En ese momento ella aún era virgen, y se culpa por haber sido tan descuidada ese día. De esa noche nació Pierre.
Para conseguir la suma que su hijo necesitará y salvar su vida, ¿seguirá Letícia el único consejo de su colega o intentará otra opción?
¿Letícia salvará a su hijo Pierre a cualquier costo, o descubrirá quién es el padre del niño y pedirá su ayuda?
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Capítulo 17
Secar el pelo de Zac me acaloraba, pero no dejaba que se notara, su pelo entre mis dedos me hacía estremecer de una forma que no podía explicar, todo era nuevo para mí.
Leticia-listo, seco
Al darme la vuelta, mis pies se enredan en el alambre y, antes de caer al suelo, Zac me agarra por la cintura y me acerca rápidamente contra su cuerpo, haciendo que los dos nos quedemos pegados, y me pone la mano en la nuca.
Leticia-zac.....
Zac, te tengo.
Nuestras miradas no se separan, hasta que me besa, y mi corazón salta como las palomitas de maíz, mi segundo beso, con el mismo hombre, sigo su ritmo, nuestras lenguas bailan a un ritmo muy erótico, y siento un calor que me invade por todas partes, me muerde y me chupa los labios y suelto un gemido ahogado entre sus besos.
Mis piernas ya estaban blandas, Zac me subió a su regazo y rodeé su cuello con mis brazos. En ningún momento dejamos de besarnos hasta que salió del armario conmigo y me tumbó en la cama, con su cuerpo apoyado sobre el mío.
Leticia-ahh.... Zac
Zac-sé mío, Leticia
esas palabras, me hicieron despertar, y lo empujé de encima mío, se bajó de encima mío, y se sentó a mi lado, acariciándome
Leticia-lo siento, no podemos...yo
Zac-tienes a alguien
Leticia-no, fuiste la única, después de esa noche, nunca he tenido otra, en nada
Zac - Tengo muchas ganas de conocerte, mejor Leticia
Leticia-voce......
Me levanto y me preparo
Zac-que hay de mi
Leticia y su novia
Zac-yo no
Leticia-te gustan las rubias, y yo no soy como las chicas que recoges,zac
Zac-lo sé, pero me atraes, Leticia
Leticia - por eso no debemos, lo siento, no quiero ser tu atracción, si lo que quieres es sexo, no es conmigo lo tendrás, lo siento.
Zac, tengo que pedirte disculpas, me voy a dormir.
leticia- puedes tumbarte aqui en la cama, es grande, y en el sofa no cabes, es demasiado grande para el
Zac -¿Estás seguro, y si te agarro?
Leticia-😅there, there, you're not going to do that...
Voy al armario, cojo una almohada y un edredón para él, se lo doy y me meto en la ducha. Me pongo un camisón y un pasatiempo encima.
y me acosté con él mirándome.
zac-porra
Leticia era, es malo allí
Zac-no, está bien, buenas noches.
Enciendo el vigilabebés y compruebo cómo está mi hijo.
Leticia - Pierre no está cubierto
Zac, déjame ahí.
Zac sale como un cohete, le miro a través del vigilabebés, qué hombre más guapo, Dios mío, qué cuerpazo. de verdad que se va a dormir sin blusa, padre mío, hazme pasar la prueba de resistencia.
Zac - Sí hijo, tu madre sabe cómo romper conmigo, no te preocupes, seguiremos siendo una familia, te lo prometo.
Tapo a mi hijo y vuelvo, me tumbo a su lado y apagamos las lámparas de la mesilla.
Leticia-buenas noches
Zac-buenas noches
Se da la vuelta y la miro fijamente hasta que nos quedamos dormidos. Al amanecer oigo llorar a mi hijo y me levanto antes de que Leticia se despierte, lo cojo, lo cambio y le doy su biberón, que ya estaba en el calienta biberones.
Zac-eres de madrugada, hijo mío.
Cuando se durmió, volví al dormitorio y Leticia tenía el top alrededor de la cintura...
Zac-porra, ahí es donde se pone difícil
Me tumbo y le pongo la manta por encima, pero ella me echa las piernas por encima y los brazos, y dice algo que no entiendo, así que me acurruco contra ella y me duermo, sintiendo su cuerpo caliente.
Por la mañana me despierto y siento unas manos gruesas en mi culo, y mi pierna encima de algo muy duro, abro los ojos y veo a Zac a mi lado, y yo abrazada a él, si me muevo se despierta, que hago, se despierta y me aprieta el culo, tirando de mí hacia él, y sigue apretando su miembro en mi muslo.
Se despierta del todo y me mira, mis ojos se abren de par en par y él se ríe, me da la vuelta, se pone encima de mí y me besa por todo el cuerpo. No le aparto, simplemente me rindo a su beso.
Zac metió las manos dentro de mi camiseta y me apretó los pechos, y yo gemí en su boca, mi cuerpo respondía a todo lo que él hacía, Zac frotaba su erección contra mi b*cet@, y eso me encendía.
Su hábil mano bajó hasta mis bragas, se deslizó dentro de ellas y me tocó el clítoris. Cerré las piernas y él se bajó de mí y me chupó los dedos en la cara.
Zac-buenos días, Leticia
Mi respiración se volvió entrecortada, respondí con dificultad y él se fue al baño riendo, como si estuviera en casa, hijo de puta. Me estaba provocando, y yo caía de lleno en su juego.
Me levanto, respiro hondo y voy a ver a mi hijo. Lo cambio, lo amo y lo llevo a mi habitación, colocándolo sobre la cama.
Leticia: ¿Quién te puso esa ropa de bicho, eh, mi amor? ¿Fue quién? ¡Fue papá!
Zac: culpable.
Zac se tumba en la cama y alza a Pierre en sus brazos, haciéndolo mirarlo. Zac hablaba en un lenguaje de bebé, y Pierre sonreía ante las tonterías de su padre, hasta que una enorme babá cayó dentro de su boca.
Zac: ¡Haaa, Dios mío, me lo tragué!
Me eché a reír, y él hizo una carita triste. Pierre, al verme reír, también sonrió.
Zac: ¡Ah, ustedes se están riendo, ¿no?!
Leticia: Fue muy gracioso. Voy a tomar un baño, ya vuelvo.
Zac: ¿Puedo bajar y hacer café?
Leticia: Ya tienes toda la libertad aquí, la casa es tuya.
Zac: Mira que traigo algunas ropas, eh.
No digo nada y me voy a duchar. Cuando termino y bajo, la mesa ya estaba bellamente arreglada, y Pierre estaba acostado en su sillita de balancín.
Zac: ¡Uau, está hermosa! Ni parece que eres madre.
Leticia: Ustedes dos también están guapos.
Zac: Entonces admite que soy lindo.
Leticia: Sí, eres muy bonito, pero Pierre es más.
Zac: Eso es un golpe bajo.
Reímos y nos sentamos a comer. Después limpiamos todo, y me pidió que llevara ropa.
Leticia: ¿Para qué?
Zac: Quiero que duerman en casa, regresamos el lunes.
Leticia: Zac.
Zac: Es solo dormir, está bien.
Leticia: Está bien, voy a llamar a Roberta, ella quedó de venir aquí mañana.
Zac: Ok, voy a hacer la bolsa de Pierre.
Llamo a Roberta y le aviso; ella da saltitos en el video. No entendí su reacción. Desconecto y bajo con mis cosas, mientras Zac lleva las cosas de Pierre. Él toma una foto de nosotros juntos.
Zac: La primera de muchas.
Salimos de casa y nos dirigimos hacia su hogar.
