MILLONARIO ARROGANTE.

...SAMANTA YOUNG...

Estiro mi mano y apago mi despertador antes de que suene. En toda la noche dormí pocas horas, las acciones y palabras de un pervertido me mantuvieron despierta.

Flashback.

-No me iré. Quítate la ropa. - Se sienta en el sillón justo enfrente de mí, afloja un poco su corbata y se arremanga las mangas de su camisa. -Samanta, no me mires con miedo. - Vuelve a hablar.

-Entonces, ¿Cómo quiere que reaccione ante esta situación?, Un pervertido me está diciendo que me desnude ante él. - *Estoy demasiado enojada. *

-No te pedí que te desnudes, solo quédate en ropa interior.

-*OH, eso ya no lo hace un pervertido… *

-No te tocaré. - Me interrumpe. - Quieres trabajar como bailarina, ¿no? - *Me pregunta alzando su ceja. *

Ya no sé si seguir fingiendo. Cuando el tipo del club me hizo esa propuesta, mi respuesta iba ser un no, iba a negar el trabajo porque no quiero sentir la lujuria de muchos hombres viéndome semidesnuda, y entre muchas cosas más, pero Charles Jones respondió por mí, lo que me dio mucho coraje y junto con lo que pasó después. ¡Me nalgueo! En estos momentos estoy dudando si seguir con la mentira.

-Baila para mí, empieza a practicar tus shows conmigo.

-No, no lo haré. Jamás bailaría para usted.

-Samanta, en esos clubes asisten personas iguales o peores a mí. Todos esos hombres te desearan al verte, como yo lo he hecho, trataran de tenerte a la fuerza y no serán pacientes como yo lo hago. - Se levanta del sillón y se posiciona enfrente de mí. Toma mi cara con sus dos manos, obligándome a mirarlo a los ojos. -Tu vida correrá peligro, no quiero que te pase nada. *- Sus pulgares acarician mis mejillas. Siento mi ritmo cardiaco acelerado, mis hormonas se están comportando extraño. *

Como una tonta, segada por su lado amable, le pregunto. – ¿Entonces me dejara en paz? - Me da una sonrisa de lado, no dirá nada bueno.

-Lo haré, pero hasta que te tenga en mi cama. - Su actitud de arrogante, mezclado con posesividad salieron a flote en cuestión de segundos

-Imbec… - Interrumpió mi insulto con un beso.

Fin del flashback.

Fui una tonta al preguntar eso, creí que cambiaría de opinión. Respiro profundamente y trato de calmar mis nervios.

La luz de los primeros rayos del sol traspasan mi ventana y dan a parar a mi cara, aún sigo acostada y tapada con mis suaves cobijas. No quiero salir de mi departamento y toparme con nuevos obstáculos, puestos por Charles Jones.

Siempre me he considerado una persona muy positiva, que no se deja vencer ante las malas situaciones, pero en estos momentos soy todo lo contrario.

...DI DI DI – Mensaje de texto....

Tomo mi teléfono, que está a un lado de mí. Es un mensaje de Daniela.

...-Sam, tuve que salir muy temprano hoy, ha surgido un problema con mi familia; nada grave, pero me necesitan. Te escribo para decirte, no te des por vencida, saca esa sonrisa tuya a flote, consigue ese trabajo y que nadie te pare. Te amo, atte. Daniela...

Este breve, pero muy significativo mensaje, reaviva mi ánimo. Las verdaderas amistades están contigo en las buenas y en las malas.

Me levanto de la cama, me estiro un poco y camino a la cocina. Mañana entro a la universidad, hoy tengo algunas entrevistas de trabajo, por así decir, en puestos de mesera, intendencia, lo que sea para salir adelante.

Pongo a hervir agua mientras tomo un baño. En menos de media hora ya estoy presentable y muy bien desayunada. Para ahorrar dinero, transitaré las calles de New York a pie. Tomo mi bolso y camino a la puerta.

-Yo puedo hacerlo, no regresaré con las manos vacías. – Me digo a mi misma. Giro la manija de la puerta y salgo.

...MUCHAS HORAS DESPUÉS....

-La veo cansada, ¿está usted bien? - Me pregunta amablemente el dueño de la tienda de conveniencia.

-Un poco cansada, usted es la persona número veinte con la que solicito un trabajo en todo el día. – Ha quedado asombrado por lo que le he dicho.

-Bueno, pues yo seré el último. Queda usted contratada. Tiene muy buenas referencias.

Contratada, ¡tengo un trabajo!  – Muchas gracias, daré lo mejor, se lo prometo.

-Lo sé, ahora chequemos los términos y condiciones.

-Sí.

...Minutos después....

-Dejando claro lo anterior, empezará a trabajar dentro de cuatro días.

-Perfecto. - Estrecho mi mano con la del señor. Me despido y salgo del pequeño establecimiento.

La localización de mi nuevo trabajo queda cerca de la universidad, pero un poco retirado de mi vivienda, no me importa. Realmente me alegra poder regresar a mi departamento, sabiendo que al día siguiente tendré una entrada de dinero, pero desde hace unas horas un dolor en mi pecho se ha manifestado, un mal presentimiento, que no me permite disfrutar esta noticia.

Siento una preocupación hacia mi familia, ¿estarán bien?, ayer por primera vez en todos los años que llevo viviendo en New York, mis padres no me llamaron, solo me enviaron un mensaje de texto diciéndome buenas noches y que todo estaba bien. Pensé que estarían cansados, sin ganas de hablar, pero ahora creo que no es así.

Saco el teléfono de mi bolsa y llamo a mi papá. Nadie me contesta, esto no es normal. Llamo a mi hermano, directo al buzón.

...BI BI BI – Llamada....

Es papá. Contesto rápido. -¡Papá!

-Sam … - Es la voz de mi madre llorando.

- Mamá, ¿Qué está pasando? ¿Dónde está papá y mi hermano?

-Tu hermano está aquí a mi lado, y … - El llanto la interrumpe.

-¿Y papá?, ¿Por qué lloras? - Temo la respuesta.

-En estos momentos estamos en el hospital, tu papá sufrió un paro cardiaco.

-¡No! - Un nudo se forma en mi garganta  y mi vista queda nula. El dolor en mi pecho ejerce más presión. No tengo fuerzas en las piernas y caigo de rodillas al piso. - Mamá, ¿en qué estado se encuentra papá? – Recurro a todas mis fuerzas para poder hablar.

-Grave …

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Hola, personitas hermosas. ¡Ya somos más de quinientos! Muchas Gracias.

Gracias por sus comentarios, por sus me gusta y por sus votos, gracias por todo el apoyo dado hasta ahora. Les deseo buenas noches. 💓💓