Amor Infinito

Amor Infinito 

Elsa Isasa 

Capítulo 11:Una nueva Pista. 

Y los días siguieron con una rutina ya establecida. Mucho trabajo durante el día en su tarea de Hacker, investigando, hurgando, revisando memorias de mundos informáticos de muchos lugares de hoteles y oficinas estatales de aeropuertos. Pero las palabras de Paula caminaban en la mente de Maja. 

“Secuestradores Extraños” había dicho porque los mismos no pidieron rescate. Entró en la computadora central de investigación de delitos de secuestro y extorsión y encontró papeles que su jefe no le había dado. Era el caso 12307. 

Comenzó a leer las tomas de declaraciones del secuestro a la familia de la secuestrada y los nombres de Andrea Lupi, Leonardo Valente, Paula Sforza dedicaron una lectura minuciosa. 

Se detuvo en la de Paula. 

_ “Agente del departamento de investigación :

 --notó algo no habitual en la residencia días antes. ¿Cómo era el comportamiento de sus patrones? -

– Normal. El señor Leonardo trabajaba en su empresa. Salían temprano con el Secretario Andrea Lupi. La señora se levantaba tarde y siempre tenía el día ocupado. Peluquería, compra de joyas y modelos nuevos. El señor Leonardo le daba todo siempre. –

– ¿Los empleados eran los mismos? ¿No hubo cambios en esos días?-

– Los mismos. Hace años trabajamos en la casa. En esos días tuvimos un invitado : El señor Vito Luciani, primo de Leonardo. Llegó de visita de Italia. Y se marchó antes del secuestro”.

La declaración seguía incluso con preguntas insidiosas sobre el trato de Leonardo con su esposa embarazada como buscando culparle de su desaparición.

Un nombre llamó la atención de Maja. Vito Luciani. Comenzó a buscar al sujeto en las redes y no lo encontraba. Eso le hizo sospechar aún más. Era como si esa persona hubiera querido borrar todo rastro de sus huellas de la red. Buscó las fechas de llegada al país de Vito y no lo encontró en aeropuertos. Abrió su búsqueda meses antes invadiendo no solo sistemas de esta nación sino también de Italia. Y allí saltó el viaje de Vito muchos meses antes de ese suceso. ¿Por qué no vino a la casa de su primo apenas llegó al país?

 Tradujo los pasos de su virus de búsqueda con el mismo sistema operativo y con otro más nuevo y perfecto. Adoso palabras en italiano como clave en la búsqueda. 

La vida de Vito antes del suceso era clara y precisa. Viajes, reuniones empresariales aparecían con rapidez. Pero después del suceso Vito Luciani desapareció del radar de búsqueda. El tipo se había cambiado de nombre. ¿Por qué lo hizo?- pensó. Porque él raptó a la mujer de su jefe Magdalena Valente. 

Buscó el rostro de Vito y lo ingresó a su búsqueda facial junto a Magdalena. Empezó otra vez el mismo camino que hizo con la mujer de su jefe. Era una búsqueda nueva y no sabía si tendría resultados. No tenía cuentas bancarias asociadas a Vito Luciani. Eso solo quería decir mafia. Esa gente no guardaba dinero en los bancos. Eran dineros mal habidos y no tenían respaldo de empresas generadoras de esos activos. Esa gente invertía su dinero en acciones de empresas donde la droga y la prostitución eran grandes fuentes de ingreso. Casinos , nigth club, cine y tantos otros campos atractivos para generar divisas y lavar plata sucia. 

Algunas cosas le frenaban en su investigación.

No conocía el nuevo nombre de Vito ni el nuevo nombre de la mujer de su jefe. 

No podía rastrear sus cuentas bancarias. No sabía a qué país había llevado a la esposa de su patrón. No había salido con ese nombre de este lugar ninguno. Además había pasado mucho tiempo ya. Solo esperaba que esa mujer haya tenido a su bebé con salud y que los rostros de ambos pudieran servir para la búsqueda. 

Maja reservó todo lo investigado en un archivo secreto. Y siguió con la búsqueda de ambos ahora en diversas capitales del mundo donde la política daba lugar a la mafia porque eran grandes fuentes de ingreso al país.

_ Que haces Maja- le interrumpió su hermanito. - el señor Leonardo te espera en el parque. 

Hacia dos días con dolor en el alma Maja respondía los mensajes nocturnos de su amante con : -No me siento bien. Hoy dormiré amor. Perdóname. 

Lo deseaba con toda su alma, pero no podía perder la visión de su trabajo en esa casa. Tuvo que recibir al médico que venía a cada tanto para saber que le estaba pasando. 

Leonardo Valente estaba preocupado por ella y eso le hacía feliz y a la vez la cuestionaba. 

Salio de la mano de su hermanito. El la vió y le tomó de la mano llevándola hacia la hermosa fuente con orquídeas. 

– Es maravilloso --dijo– alegrará a todos en la casa.

– Es solo para ti Maja– dijo él soltando su mano y abrazándola.-- Te extraño tanto amor– le susurró al oído. ¿Estás mejor? Me dijo el médico que no era nada grave. 

– Estoy mejor – dijo acariciando cada flor y mojando sus manos en la fuente–

Su hermanito caminaba charlando feliz con Paula y el jardinero. 

Andrea Lupi hacía unos días que no estaba. Realizaba tareas para Leonardo. Pero esa noche vendría para la cena de navidad. 

– Puedes venir a mí escritorio Maja. Tengo una tarea que darte. – dijo él. 

Pero por supuesto no había tarea. Solo anhelo. Cerró la puerta y la abrazó fuerte, comenzó a besarla con desesperación. La recargó sobre el escritorio y se metió entre sus piernas. 

Parecía un hombre sediento de su cuerpo. 

El mundo se borró para Maja. Ya no podía más. Su cuerpo gritaba por él. 

Él invadió su intimidad con sus manos y la humedad de Maja lo dejó totalmente loco. 

– Te amo - dijo por primera vez en voz alta lo que su corazón sabía hacía tiempo. Y la poseyó allí mismo en la mesa del escritorio con una fuerza salvaje. 

– Te amo – repitió también Maja entre lágrimas. 

– Lo sabía. Lo sabía nena. - dijo él mientras la sacudía de una manera maravillosa. 

El clímax llegó aturdiendo a Maja de placer infinito. 

Pero él aún no estaba satisfecho. La cambio de postura recostando el pecho de Maja sobre la mesa y volvió a ingresar con furia una y mil veces. Y luego vino otra culminación para ella y una ola nunca alcanzada para él. 

– Mí Maja. Solo mia. Siempre mía. - repetía. - tratando de calmar su corazón rebosante de amor por esa mujer .