NovelToon NovelToon
El Hilo Negro Que Forja Mi Destino

El Hilo Negro Que Forja Mi Destino

Status: En proceso
Genre:Malentendidos / Reencuentro / Amor en la guerra / Batalla por el trono / Mundo de fantasía / Mundo mágico
Popularitas:3.4k
Nilai: 5
nombre de autor: Orihime chan

¿Qué pasaría si eres la villana de una historia mal contada? Anneliese Ross es la hija menor del conde Ross, quien recientemente ha perdido la memoria y no recuerda las sensaciones o personas, durante ese lapso de tiempo descubre cosas desconocidas que siempre la rodearon antes de ser Anneliese.

Porque Anneliese Ross es una persona sobrenatural y desconocida, a la que siempre la envolvían las desgracias y siempre estaba rodeada de chismes.

¿Qué harás cuando tuviste que haber muerto y no lo hiciste? Anneliese Ross, ¿Que harás para sobrevivir?

NovelToon tiene autorización de Orihime chan para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.

11.

Antes de que la nube negra absorviendo magia benévola estallara. Una flecha que recorrió todo su espacio observó el disturbio del cielo.

Más allá de Judethet, Agness observaba el asqueroso aspecto de lo más sagrado de la tierra, el cielo. Un cielo consumido por magia prohibida y bañado en sangre. La flecha consumida por una magia dorada que bañaba su cuerpo e iluminaba su filo pasó estrepitosamente como candela por ese lugar.

Purificando consigo el espacio lleno de maldad que ahora llenaba el cielo. Quizás la mujer que ahora desfallece en los brazos del hombre tarde días en despertar, pero le era necesario manifestarse.

Porque aquella magia prohibida estaba manchada con sangre de los caídos y estaba tatuada en su piel.

Algo bendito puede ser corrompido y seguidamente destruido.

¿Siquiera él seguiría vivo?

Seguidamente la flecha terminó su recorrido y se desvaneció en el aire, las pocas partículas cayeron en la tierra y purificaron su zona.

Seguidamente de un estallido que dejó a más de uno inconsciente.

......................

Zack sostenía a Anneliese Ross en sus brazos. Y no estaba en sus planes soltarla.

La barrera que antes los encerraba se había desvanecido y consigo había traído el disturbio. Gritos desgarradores, llantos lastimosos e insultos frecuentes llenaban el lugar. Y cerca del desastre se asomaban hombre con túnicas claras. Los sacerdotes habían aparecido después del impacto.

Zack río.

¿Sería castigado?

Pero eso no importaba. Porque su mujer ahora descansaba con su respiración agitada y su pulso se normalizaba. Su cabello rojo tan brillante estaba lleno de tierra y su vestido estaba roto, evitando observar la cantidad de moretones que se asomaban en la carne blanca de sus brazos o lo maltratadas de sus piernas.

No quería enfadarse cuando esa mujer indeseable se había desvanecido con el estallido. No estaba muerta, porque su flujo mágico seguía siendo predecible.

— ¡Zack!

Un moribundo Alphonse llegó a su lado, tomándose su tiempo de observar la figura caída de su hermana. Que ahora dormía plácidamente en sus brazos.

— Ella, ¿Ella está bien?

La pregunta agitada del hombre lo puso nervioso en su contra, ¿Por qué le preguntaba semejantes cosas?

— Lo está, Alphonse. Si no te molesta quítate.

Zack parecía molesto. Pero aún así debía observar con detenimiento el movimiento del emperador y los sacerdotes en el lugar.

El sumo sacerdote aún no se asomaba en ese lugar.

¿Qué raro no?

Pero más de un sacerdote con ojeras bajo sus ojos y rostros cansados trataban las heridas radicalmente graves de muchos nobles.

Porque los sacerdotes poseían un poco de la gracia de Dios.

Entonces eran capas de curar aquello que no fuera la muerte. Porque solo era un poco de su gracia, después de todo los humanos eran la mayor decepción de Dios pero su mayor amor estaba en ellos.

Por eso, aquellos que predicaban su palabra y dedicaban su vida a él podían recibir un poco de su gracia.

Pero su poder no se consideraba tan fuerte y maravilloso como el del sumo sacerdote.

— ¡El sumo sacerdote ha llegado!

Una voz fuerte anunció en el lugar y más de uno grito de la alegría. Su salvación estaba allí, ya no tendrían porque preocuparse. Pero no era el caso.

El hombre de mediana edad observó con ojos entrecerrados la escena, la baba que aún llenaba el lugar, los residuos de magia prohibida que caía suavemente o el rastro de purificación que habitaba en el cielo.

— Pediré ayuda.

Alphonse habló para Zack antes de ir tras el sumo sacerdote.

¿Estaba tan sorprendido.

— Príncipe Zack.

Elizabeth ClannFord habló a sus espaldas.

La mujer de cabellos plateados y ojos azules observó la dama en sus brazos con asombro. Su ceño se frunció y sus ojosos palidecieron.

— ¿Está usted bien, su alteza?

Ja. Zack soltó una risa suave.

— Creo que eso puede verlo con sus propios ojos, princesa.

Elizabet apretó la tela de su vestido. ¿Por qué esa mujer estaba en los brazos de Zack? Quizás había sido solo un golpe de suerte que ella no fuera quien había usado el arco, porque entonces estaría inconsciente y en los brazos de Zack.

— ¿Ha terminado ya?

Zack estaba impaciente, la sola presencia de la mujer de cabellos plateados robaba el aire de su espacio.

— ¡No!, ¡Su majestad!

Pero Zack la ignoró y fue directamente a donde el sumo sacerdote, quien ahora hablaba con Alphonse de la situación, junto a un adormilado Conde.

Era sospechoso por más que lo pensara. ¿Por qué esa mujer no tenía ni un rasguño? Y claro, entendía que no todas las personas corrían con la misma suerte o rudeza pero Elizabeth ClannFord poseía la misma apariencia con la que había llegado.

Su cabello bien peinado, vestido perfectamente planchado y obstentoso y el rostro cargado de maquillaje. ¿Por qué no tenía rastros de haber estado allí? Todos, incluyéndolo habían resultado intoxicados por el humo que había soltado esa masa viscosa, causando consecuencias como sangrado. Pero ella estaba en perfectas condiciones.

¿No era eso sospechoso?

Pero claro, era un pensamiento sin fundamentos. O podria no serlo.

— Sumó Sacerdote.

— Príncipe Zack.

No había que ser un genio para darse cuenta de la situación que envolvía a ambas personas. No se llevaban bien.

— Por favor heche un vistazo a la señorita.

El sumo sacerdote observó a la figura de la mujer en sus brazos y una chispa dorada brotó de la punta de sus dedos.

Pero el toque fue demasiado ligero porque el cuerpo en sus brazos rechazó el poder, causando un temblor en el cuerpo del sacerdote.

— No puedo curarla.

— ¿Que?

Alphonse estaba sorprendido.

— La señorita rechaza mi poder.

El hombre se disculpó cortésmente, antes de fijarse en la figura de Zack.

— Su majestad y yo tendremos un asunto pendiente.

Lo sabía. Porque él había expandido gran parte de su poder y había causado estragos en el lugar sagrado. Pero estaba bien, porque todos allí estaban vivos.

— ¿Qué haremos entonces?

Alphonse sacudió bruscamente su cabello, y el conde a su lado suspiró fastidiado.

— Esperar. Llevaré a Anneliese a un doctor. Alphonse quédate junto a su alteza y vigila el perímetro.

El conde Ross tomó el cuerpo de su hija menos en sus brazos y observó su rostro pálido. Quizas era un remordimiento que predominaba su corazón pero lo sentía estrujarse.

Pero no debía dejarse llevar por sentimientos absurdos en una situación de decadencia en ese momento.

— Fue una advertencia. Estamos en guerra.

......................

Después de tal ataque al templo y una clara señal de guerra de un lugar vecino, el emperador y sus funcionarios tomaron medidas extremas.

Y Anneliese Ross no despertó 8 días después de aquel ataque.

En donde Zack se escabullía para observar su condición en las noches y Alphonse cuidaba de ella en las mañanas. En donde el Conde no podía liberar su pensamiento de su imagen moribunda, aún cuando su cabeza se llenaba de pensamientos más importantes.

.

Oscuro. Todo era oscuro otra vez.

Con la diferencia de que esta vez la figura oscura que había observado antes ahora estaba frente a sus ojos.

Una figura borrosa que sobrepasaba el tamaño de un árbol. Algo tan grande que era imposible medirlo. Algo tan grande que podría destruirla.

Junto a él las dos personas que antes la habían observado lloraban, lloraban lágrimas manchadas y gotas de sangre derramaban sus heridas.

— P\~por favor, ¡Sálvala!

Pero no hubo respuesta alguna.

— ¡Señor! ¡Tenga piedad por favor!

El hombre lloraba y se aferraba al cuerpo de la mujer que moría lentamente en sus brazos, la sangre corría a cántaros de su abdomen herido. Una estaca lo atravesaba y la sangre surgía de su boca.

*‘*No puedo’

Una voz tan oscura y profunda llenó su cabeza, y el hombre palideció, se estremeció y desfalleció. Pero aún así habló.

— Y-yo, puedo ofrecerte algo. ¿Qué quieres? Dime, ¡Dime!

El hombre lloraba exasperado y los ojos de la mujer cada vez estaba más cerrados. Su respiración era más lenta y el pulso que resonaba en su oreja ya no se escuchaba. Había desaparecido.

*‘¿Que ofreces?’*

El hombre tembló.

— C-cualquier cosa. ¿Q\~que quieres?

‘Tu vida’

Silencio. Y una clase de agua helada cayó en sus cabellos y humedeció su cuerpo. Tembló. La tierra tembló y la persona dudó.

¿Cómo podía perder algo tan esencial?

— Y-yo, te daré algo más. No puedo, no puedo darte eso.

*‘*Entonces ofrece algo’

— ¡N-no se! ¡Te daré riquezas!, ¡Honor!, ¡Estatus!, por favor, por favor sálvalas.

El hombre lloriqueo. Y la mujer falleció.

*‘*Sentimientos, quiero tus sentimientos.’

Y el hombre asintió.

.

Era de noche, la hora era desconocido pero el viento helado se colaba por las ranuras de la ventana y hacía doler sus huesos. Quizás era muy exagerado pero sentía un cansancio extremo y una pesadez infernal.

Pero más allá de eso. Tenía sed. E iba a morir por ella.

Apresuradamente el vaso a un lado de su cama fue llevado a su boca y bebido con brusquedad, aún sintiendo el ardor quemar el líquido que bajaba por su garganta bebió con necesidad.

— ¿Qué- Que pasó?

Una pregunta al aire porque visualizo su entorno. El cielo estaba tan oscuro que era imposible que alguien estuviera despierto y fuera capaz de darle explicaciones.

Sus pies descansaron en el suelo y avanzaron algunos pasos, sintiendo la pesadez hundir cada uno de sus pasos mas profundo en el suelo.

Debía comer algo y dormir de nuevo.

Porque el cansancio dominaba y ella no era capaz de derrotarlo.

La cocina se visualizó en el rabillo de su ojo y la comida guardada fue devorada por su boca. Olvidando los modales, olvidándo los estribos Anneliese Ross comió con desespero.

Porque no sabía cuánto tiempo había estado dormida, porque no sabía cuánto dormiría la próxima vez. Y porque no sabía cuándo volvería a comer.

El pan y la carne eran desgarrados por su boca y embutido con fuerza. Porque tenía hambre. Demasiado y no era capaz de ser saciada.

— Liesse.

Pero su boca seguía mascando, la comida seguía siendo devorada y sus manos llenadas.

— ¡Anneliese!

El conde de Ross sostuvo sus hombros y la aferró a su pecho.

¿Por qué él estaba allí?

.

.

Atte: Amelie Ross.

1
yuri
este capítulo estuvo intenso,espero que puedan sacar a Anne de adentro antes de que el humo le afecte
y como Anne no se dió cuenta de la sangre oscura antes cuando la seguía?
ojalá Zack no tenga que usar magia de vuelta,pueden que lo castiguen.
que sucedió con el monstruo o demonio ,la caída de los escombros lo mató o fue Anne ?por otra parte es bueno que la hermana aún estuviera ahí ,aunque se esté muriendo.espero que descanse en paz
gracias por el capítulo
Amelie_Ross: Yo también espero que descanse en paz
total 1 replies
yuri
Anne se está metiendo en algo peligroso y lo peor es que no sospeche de la hermana hasta ahora
por lo que ese demonio,se oculto bien
por otra parte si el principe Zack llega a ver qué se fue Anne ,de preocupara mucho
y la Anne anterior ya le dió una advertencia a la actual protagonista,
pero por qué el principe Zack mataría a Anne ,si parecen llevarse bien ?
yuri
ojalá se le pueda aclarar esa duda a Anne ,porque no comprendo porque debería alejarse del principe Zack si, al parecer se llevan bien y incluso puede que se amen entre si.pero estoy alerta ,cómo dijo la prota,todo está muy tranquilo,pueden que las ratas se estén escondiendo para atacar de sorpresa
yuri
no sabría que decir exactamente,quienes eran esas personas que amenazaban a la protagonista?
que hacía el principe Zack allá ?
y por último que vio la adivina que las echo
gracias por el capítulo,espero que nuestra protagonista esté bien. me ausente por estudios pero hace tanto que no leo el libro que me pareció un escenario con mucho peligro para la prota.
Graciela Guzman
me está gustando mucho, pero me cortan la lectura porque engañan diciendo que es gratuita la novela desde el principio hasta el final ,pero mienten.
Amelie_Ross: ¡Hola! Discúlpame tengo entendido que la novela es gratuita. Puedes leerla gratis ya que los capítulos no tienen ningún costo ni necesitas puntos para desbloquear los capítulos. ¿Hay algún problema respecto a eso? Si es así te agradecería que me lo comentaras y yo trataré de solucionarlo
total 1 replies
~
Estos dos niños apapachan mi corazón ㅠㅠ
Jeon Sarai
Muy buena 👍 me llamo la atención ❤️
Khe. Creo que ya explotó el sol. JAJSJSKJS.
Pero. ._.
Tan bello ese varón.
Creí que era bromita.
Amelie_Ross: Yo también
total 1 replies
Que bonito.
Khe.
Ufff. Todo porque Dios lo abandonó, nooooo. Denle un pañuelo que va a llorar.
La estabilidad emocional para los hijos estaba sobrevalorada.
Y más factos.
Tiró factos.
Amelie_Ross: Ella siempre
total 1 replies
Por fin sentido común. Creo que lo tiene cuando le entra la gana.
Amelie_Ross: JAJSKSJLSSKKSA Creo que nos pasa un poco a todos
total 1 replies
Caes mal, muy mal. Por si no quedó claro.
Amelie_Ross: Que mal
total 1 replies
Yo te quería defender, pero ya me caes mal. ¿Ves lo que haces? Toda la razón a la Muñequite pendejete. Mal, mal.
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play