En Tus Brazos

Ya han pasado tres meses desde el fallecimiento de Mike y de enterarme de mi embarazo.

Hoy un investigador privado vendrá para darnos su reporte.

-Bienas tardes señores.

Buenas tardes Rogers -salido Máximo -sientate e infórmanos

-Señores, mi reporte será lo más detallado posible, en esos documentos consta que el señor Duran llegó al hospital Saint Tomás, con signos vitales leves, pero un par de horas después falleció a pesar de los intentos de reanimacion. Un hombre - mostró la fotografía - Este hombre ess el primo del joven Duran, Oscar Duran, hizo todos los papeles para repratriar el cuerpo. Sus restos reposan en el Cementerio San Pedro en la Capital Antioqueña. La familia a estado callada. el señor Oscar maneja los bienes que el joven dejo. ha hecho un gran manejo de ellos durante estos meses.

-Por que sepultarán a Mike en ese cuidad?

-Esa es la cuidad Materna del Joven, la madre del señor Mike es horiunda de Medellín.

-Comprendo, Puedo saber si existen restricciones para entrar al lugar.

-Hasta el momento, no existen restricciones para entrar. Pero señora usted no debe ir en su condición.

-iremos, no es así Máximo, podemos ir.

-Iremos, mañana hablaremos con la doctora y le preguntamos si te hace mal ir a esos lugares. pero si te voy a pedir algo. trata de no llorar, mi pequeño ángel se puede ver afectado y no quiero que a ti o a él les pase nada.

Máximo como siempre tan protector. El investigador se fue.

-No te parece que es una información muy súperficial para tardar tanto consiguiendola.

-No cariño, la madre de Mike se ha mantenido alejada del foco público. Casi no visita el panteón pese que la tumba está bien cuidada, casi nadie lo visita. y nuestro círculo social les tiene las puertas cerradas, nadie se interesó por investigar más allá. Por eso fue complicado saber la verdad.

-Comprendo, aque horas iremos con la doctora.

- a primera hora, quiero que si es posible viajar lo hagamos pasado mañana y que estemos aquí temprano, nos iremos en la avioneta. para que viajes tranquila además los vuelos comerciales No me dan tranquilidad.

-No puedo estar más de acuerdo.

-Mi niña es hora de cenar -Tata nos interrumpió. -como les fue con el investigador?

- bien Tata -Maximo me dejó responder. La verdad me consentía de sobre manera.- Mañana iremos de viaje, vamos a visitar la tumba de Mike.

-Mi niña es tu estado no es muy bueno ir a los cementerios, el frío le puede hacer daño al bebé.

-No me pasara nada Tata, ire muy bien cubierta.

y así fue, a la mañana siguiente visitamos a mi médico, quien dió su visto bueno para ir de viaje y entrar al lugar, me pidió que no usará tacones altos. que no estuviera de pie y que mi estado de ánimo estuviera lo más estable posible.

Tata me ayudó a empacar. y eligió la ropa que debía usar, nada muy ajustado, nada muy suelto, nada muy expuesto.

Eligio un vestido color crema, señido al cuerpo, unas botas bajas y altas y un abrigo negro, junto con una bufanda.

Decía que debía protegerme del frío. La verdad es que tata tenía muy buen gusto de la moda. Pero la verdad no era una ocasión para verme elegante.

A la mañana siguiente abordamos el avión, Según Máximo era una avioneta.

Era un jet privado, tenía bar, una habitación cómoda. un lavado y una ducha, Tata iría con nosotros y los escoltas, decía que mi seguridad era lo más importante. Dormí durante todo el vuelo, en ocasiones mes enrtia muy cansada en otras muy enérgica. llevaba dos meses trabajando en la empresa y aunque habían cositas por aprender me sentía satisfecha con mi avance.

Mi relación con Máximo ha Sido muy agradable, en ocasiones duerme conmigo en mi habitación. abriga mi vientre con mucho amor. Y me siento muy agradecida por ello.

El amor que siento por Mike sigue vigente, aún no puedo creer su muerte. Decidí dar una ojeada a su información, entre las fotografías tomadas, habían unas de la madre de Mike en el cementerio, lloraba de forma amarga. Mi corazón se apretujo.

Atesoraba los momentos con el, lo que no vivimos, anhelaba tenerlo junto a mi, que disfrutará de su paternidad, que le hablara a nuestro hijo.

Pero nada de eso sería posible.

Máximo me despertó informándome que el avión ya habia aterrizado, primero tomariamos un pequeño desayuno y después iríamos a visitar la tumba del hombre que tanto ame.

El viaje en auto fue eterno. sentía que la distancia no se acortaba con el paso de los minutos. Cuando por fin llegamos a las puertas del cementerio sentí mi corazón acelerado, no quería llegar hasta esa tumba y ver el nombre Michel en ella, pero debía cerciorarme. Debia saber la verdad.