¡Otra Vez Tú!

Ben:

Salgo de mi junta, mientras me dirijo nuevamente a mi despacho para seguir con la pila de papeles que debo revisar, todo gracias a mi ex secretaria, la cual acabo de despedir. Resulta que no era de confiar, salía con el enemigo y como si eso no fuera suficiente le contaba todos nuestros planes o tratos, para que esté robara mis clientes, gracias a mi desconfianza por ella, la descubrí y justo a tiempo, ya que sino lo hacia arruinaría el trato con la familia Market, una de las familias más conocidas y poderosas, sus edificios son una locura, obvio que como arquitecto, es un sueño cumplido poder trabajar con ellos.

La cagada es que ahora debo buscar otra secretaría, agregando otra tarea más, de la cual debo ocuparme, ya que los idiotas del área de recursos humanos no se encargaron de investigar sobre las personas que forman parte de nuestra empresa, como paso con la que era mi secretaria, por suerte yo no confíe en ella desde el comienzo. Soy un hombre muy desconfiado esa es la clave de mi éxito, mientras que recursos humanos la contrato sin más, yo desde el principio me pareció una persona que no era eficiente, ni que sus aptitudes daban para ser una secretaria de una persona importante, no cualquiera puede hacerse cargo de mi agenda y ella no era una persona capaz.

El tiempo me dio la razón, averigüe que se encontraba con un chico todas las semanas, cuando investigue al susodicho, todo tuvo más sentido, se trataba de Erick Morgan, un tipo sin escrúpulos, desde que nos conocemos, ha estado en mi contra.

Este tipo ha sido una piedra en mi zapato desde que cree mi compañía, aunque nuestra rivalidad comenzó mucho antes, cuando éramos unos críos, desde que íbamos a la secundaria.

Cuando nos encontramos en fiestas, galas, congresos o conferencia, siempre suelta algún comentario fuera de lugar dejando en evidencia su clara envidia hacia mi.

-Hola cariño!!!- saluda mi novia Rebeca, mientras ingresa a mi oficina, siempre con esa sonrisa que la caracteriza, hasta que ve mi rostro cansado -¿Qué ocurre cariño?-

-Nada cariño, despedí a la incompetente de mi secretaria- sólo le digo una pequeña parte de lo ocurrido, no quiero que se involucre en mis asuntos.

-ohh y yo que venía a rescatarte de tanto trabajo-

-Lo siento cariño pero no puedo, tengo muchos papeles que debo revisar y también juntas a la que debo asistir-

-Entiendo cariño- suelta mientras se acerca hasta quedar a mi lado -Pero ¿no crees que es injusto que me vaya con las manos vacías?-

-Tienes razón, es injusto¿que tienes en mente?- suelto siguiendo el juego, esta procede a colocarse entre mis piernas.

-Para empezar, tus labios- besa los mismos de forma intensa mientras mueve sus caderas realizando fricción entre nuestros sexos, coloco mis manos en su cintura ejerciendo mayor presión, está suelta uno que otro gemido, voy bajando mis labios por su cuello, quitando su blusa con su ayuda, devoro sus pechos y los masajeo, mientras esta aumenta los movimientos de cadera, haciendo que mi m****** palpite por querer estar dentro de ella, y como si leyera mi mente levanta su pollera, yo bajo mi pantalón y boxer, busco un preser****** del cajón, para luego pene*** de una haciendo que sus gemidos sean aún más fuertes, Rebeca intenta tapar sus labios evitando que oiga sus gemidos, pero aumentó los movimientos haciendo imposible que pueda callar sus gemidos…. Tuvimos varias sesiones antes de que la misma se retirara y yo siguiera con mi agenda.

15:00 pm

Suena mi celular, veo la pantalla y se lee “madre", después de unos segundos decido contestar.

-Madre¿qué ocurre?-

-Esa es la forma de contestar, ¿acaso no puedo llamar a mi único hijo para saber cómo va su día?- niego por lo dramática que suele ser mi madre.

-Madre estoy bien, puedes dejar de ser un poco dramática- no quiero sacar en evidencia que constantemente hablo con ella.

-Definitivamente tú y tú padre me tienen abandonada-

-Sabes que debo trabajar por eso no pude ir a verte-

-Es por eso que este finde no puedes faltar, quiero que vengas a casa y así pasamos tiempo juntos ¿acaso es mucho pedir?-

-Esta bien madre, iré este finde al pueblo, pero ahora debo cortar estoy por entrar a una junta-

-Bueno hijo, te espero, ve tranquilo a tu junta y recuerda comer bien- despues de despedirnos corta la llamada.

Por suerte no me dijo que lleve a Rebeca, ella adora a mi novia, desde que la conoció no paro de halagar su belleza y delicadeza, básicamente la ama, yo estoy contento que se lleven bien, ya que mi madre era muy quisquillosa con mis novias, siempre les encontraba un pero hasta que conoció a Rebeca. Ella pertenece a una familia acomodada, mis suegros son personas muy poderosas son dueños de varias aerolíneas, en varios países. Algo que claramente no me importa, ya que a mi nunca me faltó.

Mi familia es una de las más adineradas del pueblo pero eso nunca me importó, salí de ahí y busqué mi propio camino, creando mi empresa con mi propio esfuerzo y sin utilizar el apellido de mis padres, es algo de lo que me siento muy orgulloso.