soy un hombre del siglo XVII que oculta el hecho de que soy hosexual para no ser encarcelado o asesinado, sin embargo, mientras voy por la calle veo una hermosa librería a la cual entro para buscar un libro, pero mientras estoy en mi búsqueda veo algo extraño en los estantes, meto mi mano y de la nada soy jalado a un mundo extraño el cual se parece mucho a lo que había leído sobre la china antigua, luego de levantarme y sacudirme un poco el polvo, un hombre llega en su caballo y de la nada pone su espada en mi cuello.
¿ Quién es este hombre?
¿ porque me apunta?
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Primer encuentro
Mientras estaba deprimido a causa de una decepción amorosa, decidí ir al único lugar donde me sentía en paz y tranquilo, ese lugar era una biblioteca o una librería, así que mientras iba caminando fui mirando por las calles para encontrar algún lugar donde hubiese libros, luego de unos 5 minutos encontré una pequeña librería muy bonita, entré allí, busqué algunos libros y mientras estaba en mi búsqueda, algo en un estante llamó mi atención, asi que me acerque y lo que vi fue una pequeña libreta que brillaba,así que por curiosidad intenté tomarla, pero en cuanto extendí mi mano hacia la pequeña libreta sentí una fuerza que me jalaba, intenté soltarme de ella, pero mis intentos fueron en vano, ya que la fuerza que ejercía era mayor a la mía, luego de forcejear un rato finalmente estaba en un y pasé de estar en una tranquila y bella librería a un cálido y casi hirviente desierto, a qué lugar era inhóspito y mi cuerpo no tenía energía, así que en ese preciso momento me acosté en la arena hirviendo cerré los ojos y esperé a morir, pensé que este era mi castigo por gustar de personas de mí mismo sexo, ya que todos a mi alrededor me habían dicho en repetidas ocasiones que sería castigado por ir en contra de todas las reglas, puesto que el lugar y la época en la que vivía era un delito gustar de alguien de mí mismo sexo.
Antes de seguir con mi historia le relataré un poco de lo que pasó antes de ser absorbido por aquella libreta. Mi nombre es Franco, vivo en Inglaterra y nací en 1811 en una familia católica de clase media, desde que nací, mis padres pusieron toda su fe y esperanza en mí, ya que deseaba que yo hiciera que la familia pasara de la clase media a la clase alta, por eso invirtieron todos sus ahorros en mí para darme las mejores oportunidades en cuanto estudios, obviamente yo las aproveché y estudié con esmero, sin embargo, cuando estaba culminando mi carrera me enamoré profundamente de un abogado él era mi superior en la firma donde haría mis pasantías, era adorable y muy amable conmigo, pasamos de ser buenos amigos a tener una relación romántica; mis padres se dieron cuenta de que yo actuaba de manera extraña frente a aquel abogado por lo que me advirtieron una y otra vez que no era sana ese tipo de interacción, me repitieron una y otra vez que dios no estaba de acuerdo con las relaciones entre personas del mismo sexo, pero yo simplemente asentí con la cabeza y seguí con mi vida, disfrutando de cada momento junto a mi querido y amado abogado, sin embargo, luego de unos meses nuestra relación salió a la luz, por lo que todo el mundo se enteró de nosotros, yo estaba dispuesto a lo que fuese con tal de salvar mi relación, sin embargo, él no, ya que en cuanto nos descubrieron y nos acusaron, él dijo que todo era mentira, que yo era un simple empleado más de su empresa, dijo que me trataba como a un hermano, que jamás podría verme como una pareja, puesto que él estaba comprometido con la hija del gobernador, en cuanto escuché eso mi corazón se rompió y por eso comencé a vagar por las calles buscando una librería y es ese evento el que me llevó a lo que está sucediendo ahora.
Bueno mientras esperaba mi fin, escuché un golpeteo así que intenté abrir los ojos, pero la luz del sol me cegaba, luego de un momento a otro una sombra cubrió el sol y pude finalmente abrir los ojos vi a un hombre alto guapo y robusto sobre un caballo me quedé embelesado mirándolo y sin darme cuenta este bajó de su caballo y se acercó a mí, de momento pensé que él sería mi salvador, pero luego desenfundó su espada y la puso en mi cuello después con el ceño fruncido dijo:
-quien demonios eres?
En cuanto lo escuche supe que ya no estaba en inglaterra ya que él estaba hablando en chino, asi que con las pocas fuerzas que tenia le dije:
-fui absorbido por un libro, no sé donde estoy, me pude ayudar?
¿-que dijiste?
En ese momento me di cuenta de que no nos entenderíamos en lo absoluto, ya que no podíamos comunicarnos, yo sabía cuál era su idioma a causa de un empleado de la firma que era chino, él me enseño algunas frases, pero eran muy básicas, pero aun así lo intente.
-soy Franco, necesito ayuda.
En cuanto él me escucho dijo:
¿-así que si puedes hablar de manera normal, quien rayos eres?
-mi nombre es Franco.
-ese nombre es extraño, ¿de donde vienes?
-inglaterra.
-cuál provincia o reino es ese?
-Inglaterra.
-habla bien carajo, estás agotando mi paciencia.
-hablo otro idioma, mi chino es malo.
El volteo hacia quienes lo seguian y dijo:
-carajo, esta burlándose de mí, agárrenlo y llévenlo a los calabozos a ver si así aprende su lección.
-me vas a ayudar?
