FRÁGIL

ENRIQUE

Solo hasta que llegó la policía, deje de patear al infeliz ese, me hice a un lado para que lo levantarán y esposaran, me puse a su lado, simplemente para que sintiera mi apoyo, cuando empezó a dar su declaración, volteé hacia atrás y levanté su bolsa que estaba tirada, fue cuando le dijeron que tenía que ir a la estación a poner una denuncia formal, que me di cuenta que podía irme, pero cuando me volvió a ver con esos bellos ojos y me dijo - Muchas gracias por ayudarme. Adiós- No se que me hizo decirle -Yo te llevo, yo soy tu testigo- Tal vez sea el hecho de que se ve tan indefensa que no quiero que nadie distorsione sus hechos.

Y aquí vamos, rumbo a mi coche, caminando en total silencio, cuando le señaló el auto y le abro la puerta para que entre, no puedo evitar mirarla por detrás e imaginar cómo sería tocar ese cuerpo, saborear su piel, y sentir esas piernas, cierro la puerta enojado conmigo mismo, si ella supiera lo que pienso, solo diría que pasó de un pervertido a otro.

Rodeó el auto, y me siento en el asiento del conductor, la veo y no se que piensa, será que sigue en shock por lo que acaba de pasar, enciendo el motor y le doy su bolsa diciéndole -Toma, encontré tu bolsa- me mira tímida y toma la bolsa y mientras revuelve las cosas dentro, saca su teléfono y me contesta con un - Gracias- apenas audible.

Apenas prende el teléfono se pone pálida y empieza a removerse en el asiento, será que espera la llamada de alguien importante para ella? Siento una punzada en la boca del estómago que no se decir que es, mientras ella mira fijamente la pantalla del teléfono, nunca me puse a pensar que puede tener pareja, hijos, una vida, pero ya estamos aquí, mientras conduzco, pienso en como preguntar para sacarme está maldita duda, la veo y le pregunto, - Estás bien? Quieres llamar a alguien?- Ella voltea y se me queda viendo, como pensando si contestar o no.

-Si cuando lleguemos a la estación, voy a llamar a mi mamá, debe estar preocupada y mis hijos también.-

-Y tu esposo?- Pregunté despacio, ella me miró y dijo encogiéndose de hombros, -Hace mucho que estoy sola-, Me sentí un patán, por qué me dio alegría cuando me dijo eso, la mire nuevamente, y se veía tan pequeña y frágil en el asiento, que sentí una ternura inmensa y unas ganas de protegerla, que me hacen pensar que también estoy en shock, por qué ella es una completa desconocida.

-A que te dedicas?- Pregunté solo por seguir hablando con ella, - Soy costurera- contestó, - Y en donde trabajas?- pregunté otra vez, ya que ella no daba ninguna información además de lo que le preguntaba- Trabajo en casa, así tengo tiempo de cuidar a mis niños- Me dijo, - Y cuántos niños tienes?- le dije, - Tengo 4- Volteé a verla con susto, 4 niños, en serio?? La mire a de arriba a abajo y no podía creerlo, no parece que tenga ninguno, como le hizo?

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