Renzo entra sonriente al restaurante para encontrarse con su hermano, al estar frente a frente, se abrazan, pues a pesar de llevar vidas tan diferentes, su amor fraterno sigue intacto y por eso, a Roberto le duele la vida de desorden que lleva el menor y cuán lejos ha llegado engañándolos.
—Mi padre acaba de llamarme, dice que mañana le presentarás a tu novia— comenta después del saludo.
—Si, mañana después de que Laura llegue de viaje la llevaré a cenar ¿quieres unirte?, así conoces a tu cuñada— dice con una naturalidad impresionante, propia de quién ha dedicado su vida a mentir.
—No lo creo, tengo pautada una reunión una Alemania para dentro de dos (2) días y prefiero viajar mañana temprano— responde.
—Es una lástima, me hubiera gustado que estuvieras presente— responde.
—De todos modos has sabido elegir y pronto no necesitarás de nosotros, pues trabajarás para Maximiliano Villamizar.
—Cállate, Roberto, no pretendo hacer crecer la fortuna de otros que no sean los Costa— responde con enfado.
—¿Qué te pasa? Si estás apurado de dinero conmigo no cuentes, tampoco con nuestros padres, esta vez papá autorizó a que te diera una cantidad generosa para que atiendas a tu novia, si es que esa novia existe, pero no te dará dinero para que regreses a Las Vegas y eso ya lo sabes— Sentencia el mayor...
Comienza un nuevo día y Dinorah se abre camino por las bulliciosas calles de Manhattan, con la desesperación de quien le urge un empleo, pero con las aspiraciones frustradas; sin embargo, no se rinde, la necesidad es más grande que las ganas de tirar todo por la borda.
Después de días de rechazos implacables, desde las recepciones de cristal hasta las cocinas ruidosas y las boutiques de alta costura, se siente como una hoja a la deriva. Lleva un atuendo impecable con el que camufla a la perfección sus problemas financieros, pero cada fibra de su ser grita cansancio y derrota.
Renzo está desayunando en un exclusivo restaurante de Midtown, ya ha pensado una excusa para no presentar a su supuesta prometida hoy; entonces, ve entrar una figura esbelta, de cabello oscuro recogido con una sencillez chic, y el traje perfectamente cortado que le hacen pensar que se trata de una joven heredera o una mujer de negocios exitosa. La observa mientras se acerca a la recepción, con un folder en la mano, no la pierde ni un momento de vista, ve como habla brevemente con la anfitriona, para que luego su sonrisa se desvaneciera.
La chica sale del restaurante, no con la altivez que su porte sugiere, sino con los hombros ligeramente caídos y la cabeza gacha. Esta imagen lo sorprende, es la segunda vez en dos (2) días que la ve; en ese momento, la mente astuta de Renzo une los puntos, esa mujer elegante, que parece tenerlo todo, en realidad está buscando algo desesperadamente, así que sale del café y la sigue a una distancia prudente.
Ahora, viéndola de nuevo en la calle, Renzo confirma sus sospechas, cuando nuevamente entra en otro café y a los pocos minutos sale, se detiene a un lado de la entrada y cierra los ojos, mostrando con ese gesto su frustración.
Renzo recorre a Dinorah, no fijándose en el cansancio que muestra en su rostro, sino en el porte inmaculado, en el modo en que el traje se ajusta a su figura esbelta, en la forma en que su barbilla se mantiene alta incluso en la derrota.
—Es perfecta— piensa en voz alta, así que entra al último lugar que visitó la chica y consigue su nombre...
Con la mirada perdida, Dinorah apenas nota el auto oscuro que se detiene junto a la acera, la ventanilla del chofer se desliza hacia abajo revelando el rostro de un hombre joven, de unos veintitantos, con una sonrisa que no llegaba a sus ojos.
—Disculpe, señorita— dice Renzo y Dinorah sorprendida, se detiene y lo mira —¿Podría concederme un minuto? Creo que podría tener una propuesta que le interese.
la chica frunce el ceño, no está para propuestas indecentes —No gracias, no estoy interesada en nada— responde e intenta seguir su camino.
Renzo no se inmuta, baja un poco más la ventanilla, revelando parte de su traje de diseñador y el interior lujoso del vehículo.
—No es lo que piensa, no es una venta, es un— hace una pausa dramática y la mira de pies a cabeza —acuerdo de negocios.
—Creo que se equivocó de persona— responde ella apresuradamente.
—No es así, créame, el pago es lo suficientemente considerable para resolver cualquier problema que pueda tener en este momento— el tono de voz que utiliza es tan directo que raya en lo cínico, como si leyera el desespero en su alma a través de su fachada, pero la mención de "cualquier problema" y "pago considerable" toca una fibra sensible en ella, por lo que decide detenerse totalmente y prestar atención con un nudo en su estómago.
—¿De qué está hablando?— cuestiona con una voz que, a pesar de su esfuerzo, suena débil.
Renzo esboza una sonrisa de depredador, sabe que ha encontrado a su presa perfecta.
—Necesito una prometida, una mujer elegante, con clase, que pueda engañar a mi familia y usted, señorita— sus ojos la recorren de nuevo de forma insolente —parece la candidata ideal para el papel—Dinorah frunce el ceño, aún no entiende cuál es la finalidad de la propuesta —Le pagaré lo que necesite y más por su actuación. ¿Qué dice, señorita Dinorah Vega?
A Dinorah el aire se le va de los pulmones, ¿cómo sabe su nombre?, el impacto de ese ofrecimiento es brutal y hasta indecente, pero al mismo tiempo, una chispa de esperanza se enciende en lo más profundo de su ser. Ella mira el vehículo de alta gama, luego a su alrededor; siente las facturas de su madre quemándole en los bolsillos piensa en su dignidad y principios, todo eso pasa por su mente a una velocidad vertiginosa y rápidamente coloca eso en la balanza contra la vida de su madre y el futuro de su hermana, será una decisión difícil, pero las circunstancias la están empujando casi al límite.
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Updated 25 Episodes
Comments
Carolina Aracelys
que buen capitulo Renzo cree haber conseguido a la chica que lo sacara del embrollo que él sólito se metió y ella con la esperanza de conseguir la forma de pagar las cuentas acumuladas por la salud de su madre
2025-07-01
2
RiYue87🇻🇪
aaaa q rabia no es justo pobre dinhora caer en esas garras 😭
2025-08-03
1
Maria Mongelos
No caigas Dinorah, él es un sinverguenza, aunque estas muy necesitada
2025-07-01
3