Cp 003

^^^Despacho de Estefani^^^

(Estefani ) - Una noche.

(Cecilia ) - Es lo suficiente para que me dé al menos un envase de pastillas.

(Estefani) - ¿Y que te asegura que después no te voy a obligar a seguir trabajando para mí?.

(Cecilia) - No lo hará, le hizo una promesa a mi madre y no la ha roto en años, confío que no lo hará ahora.

(Estefani) - Bien, en este momento me siento generosa, por cierto, los espectáculos que daba tu madre eran espectaculares, cuando éramos compañeras todos los hombres se morían por ella.

( Cecilia ) - ....

(Estefani) - Era una bailarina inigualable, tú podrías ser igual.

(Cecilia) - ...

(Estefani) - ¿No lo crees?.

^^^Palacio imperial^^^

La noche había caído y todos los aristócratas estaban en el gran salón del palacio celebrando la victoria de la fuerza imperial.

(Marqués de López)- Su majestad que suerte tiene, debe de estar orgulloso del heredero de la casa imperial.

( Emperador) - ....

(Conde Enrique) - Hasta ahora ha demostrado ser el más digno para el trono.

(Emperador) - Efectivamente, por algo Alfonso es mi hijo.

Otra vez el emperador se daba el gusto de presumir las victorias de su hijo, mientras, Alfonso se encontraba rodeado de mujeres.

( Hija del conde ) - ¡Su alteza!.

(Segunda hija del marqués) - ¡Su alteza!.

Ambas hijas de amigos cercanos del emperador.

Dos de las más hermosas doncellas del salón.

Ambas iban vestidas elegantes, Pero al mismo tiempo provocativamente, al final ese era el objeto de ambas doncellas, conseguir llamar la atención del príncipe heredero.

Sin embargo...

(Alfonso) - Gracias, Pero si me disculpan debo retirarme.

....Eso iba hacer muy difícil.

(Segunda hija del marqués) - ¿ Pero adónde va?.

(Hija del conde) - Danila, ¿acaso se está acercando a Elizabeth de Leopol ?.

(Segunda hija del marqués) - Eso parece, Sofía.

 Porque Alfonso ya tenía una doncella que había robado toda su atención.

Y no iba a perder el tiempo de bailar el primer baile...

(Alfonso) - Señorita Elizabeth de Leopol, ¿ me concede está pieza?.

... Con su amiga de la infancia.

(Elizabeth)- Por supuesto.

Por otro lado, en la entrada del gran salón.

(Mayordomo principal) - ¡¡¡Una bienvenida para sus altezas!!!...¡¡¡ El príncipe Estaban!!!..

(Mayordomo principal) - .... ¡¡¡ Y la princesa Anastasia Alcalá de la Alameda!!!.

Ambos entraron al salón robando las miradas de los invitados tal y como lo haría cualquier hijo del emperador.

Anastasia en especial, brillaba más que nunca, después de todo tenía un plan genial que ejecutaría esa misma noche.

Y Esteban se percató de su emocion.

(Esteban) - Parece que estás muy emocionada.

(Anastasia) - ¿Cómo no estarlo?, es la fiesta de celebración de la victoria de nuestro querido hermano, dime, ¿ tú no estás feliz o emocionado hermanito?.

(Estaban) - Oh, lo estoy, pero algo me dice que tú emoción no se debe solo por la música.

(Anastasia) - Ah si, ¿ Sabes ?, algo me dice que tú estás exagerando otra vez hermanito.

En ese momento, Esteban la agarro del hombro.

(Esteban) - Mira hermanita.

( Anastasia) - ....

(Estaban) - La verdad es que poco me importa con quién vallas a pasar hoy la noche, no me incumbe, mientras, no se trata de ese cardenal, ¿ entendí...

Anastasia quita la mano de él de su hombro.

(Anastasia) - No te preocupes, puedes estar seguro de que está noche eso no va a pasar.

( Estaban ) - Eso esperó.

(Anastasia) - { Va a pasar algo muchísimo mejor.} - ...

...~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~...

Un día, llegó a la capital una mujer hermosa y peculiar, su cabello era blanco como la nieve y sus ojos eran color azules como el cielo, todo el mundo en la ciudad habían quedado cautivados con su belleza, sin embargo, está mujer no venía sola, en su vientre reposaba una criatura, un regalo de Dios.

La mujer llegó casi desesperada, estaba sola y necesitaba un techo para sobrevivir, así que de alguna manera llegó a buscar trabajo al bar de las cavernas, un bar de mala muerte.

Hay fue recibida por el dueño del lugar, él también quedó cautivado con su belleza, pero cuando vio que estaba esperando un hijo se negó rotundamente, el trabajo que él podía ofrecerle no era como para una madre en espera, era como para una mujer sin ninguna responsabilidad.

Así que no dudó en cerrarle la puerta en la cara, nadie podía ayudar a la pobre mujer, hasta que un día mientras pedía dinero en la calle, una mujer le habló.

Una mujer hermosa al igual que ella, de cabello amarillo como los rayos del sol y ojos rojos carmesí, esos ojos que la miraban con lastima llenaron la mente de la pobre albina con recuerdos dolorosos y sus ojos empezaron a llenarse de lágrimas.

La rubia de ojos carmesí le dió tanta pena que decidió ayudarla, aprovechando sus ventajas como amante para convencer a su hombre, ese hombre era nada ni nada menos que el dueño del bar de las cavernas, el mismo que ya le había cerrado la puerta en la cara a la pobre mujer de ojos azules.

Ellos decidieron mantener a la pobre mujer a cambio de que después de dar a luz trabajara en el bar para saldar la deuda.

Y efectivamente así lo hizo.

Tiñó su pelo de un marrón castaño para ocultar su cabello plateado.

Y sin más que decir salió a bailar.

La primera vez que se presentó adoptó el nombre

 "Aisha ".

Nadie conocía su verdadera identidad.

Y desde hay la gran Aisha se volvió el show más popular del bar.

Hasta el día de su muerte.

^^^El bar de la Cavernas^^^

Ahora en el presente su hija la iba a suplantar.

(Rodolfo) - ¡¡¡Señores un aplauso para el regreso de la fascinante y radiante Aisha!!!.

Y así lo hizo.

Brillo, de la misma forma que lo hizo su madre.

¡¡¡plas, plas!, ¡plas, plas!!!

Todos habían quedado impactados con el espectáculo, pero había alguien en especial que no le quitaba la vista de encima.

Y ese alguien era...

(Lacayo) - Veo que ha quedado embobado por esa mujer su majestad.

...El príncipe tercero de Balgonia.

(Iván) - No lo voy a negar, es muy hermosa.

Iván Dudamel.

(Lacayo) - Tiene razón, aunque lo que si me sorprende es que alguien como usted haya insistido en venir a un lugar tan bajo como esté.

(Iván) - El baile por la victoria de esta nación, de entre todos mis hermanos precisamente yo tenía que ser el que vino a representar a Lendor, la gente de aquí es muy aburrida, necesitaba salir y divertirme.

(Lacayo) - Si es así, aquí se va a divertir mucho se lo aseguro.

(Iván) - Eso espero, eso espero.

(Lacayo) - ¡¡ Señorita una botella más!!, uy pero mírela nada más.

...~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~...

^^^Palacio imperial^^^

La melodía de la música de la fiesta en el palacio se escuchaba en el aire, el piano, el violín, incluso los pequeños pasos de los tacones que caminaban rápidamente en el jardín.

(María) - ¡Nancy!, ¡Nancy!, ¡¡ Anastasia!!.

María caminaba caso corriendo atrás de Anastasia.

( Anastasia) - Ya basta, ¿ porque gritas ?.

(María) - ¿Porque vas tan rápido?, o no mejor dicho, ¿ a dónde vas?.

(Anastasia) - Tengo algo que hacer.

(María) - ¿Vas a la capital?.

(Anastasia) - Así es.

(María) - ¿ A qué?.

Anastasia volteó la cara para un lado.

(María) - Anastasia, es muy tarde para que vayas sola a la capital, me voy a preocupar y además si Estaban se entera de que saliste sola se va a enojar y me va a interrogar hasta que le diga a dónde fuiste.

(Anastasia) - No te preocupes yo me sé cuidar sola, además esto es parte de mi plan.

Anastasia se montó en el carruaje.

(María) - ¿Y que hago con Esteban?.

(Anastasia) - Confío en ti.

( María ) - ¡¡ Anastasia!!.

Con esas palabras Anastasia cerró la puerta y el carruaje arranco.

(María) - ¿Y ahora que hago?.

María se dio la vuelta y empezó a caminar hacia el salón.

(María) - ¡Ay!.

Cuando su tacón quedó incrustado en una ranura del piso y tropezó.

(María) - Dios, mi zapato.

El tacón había quedado atascado.

Ella trato de sacarlo pero estaba muy atorado y no tenía la fuerza suficiente.

(María) - ¿ Cómo lo sacó?.

En ese momento alguien que se acercaba a ella le hablo.

( Esteban) - Mira nada más.

(María) - ¡!.

Era Estaban, quien iba pasando y al ver a María en el piso se acercó.

(Esteban) - Hoy mi Lady está más distraída que nunca.

Esteban se agachó y le dio un beso en la mano.

(María) - Su majestad, ¿ Qué hace aquí afuera en vez de estar en el salón bailando?.

(Esteban)- Salí a tomar un poco de aire fresco y usted bien sabe que la que siempre invito a bailar es a usted misma, my Lady.

(María) - Bueno, yo también salí a buscar, d-digo a tomar un poco de aire fresco.

Exclamó María nerviosa.

Esteban sacó con facilidad el tacón atorado y se lo paso.

(Esteban) - Este debe ser suyo.

(María) - Gracias.

(Esteban) - Deme la mano.

Esteban le dio la mano y María se sostuvo de él para levantarse.

(Esteban) - Por cierto, ¿de casualidad ha visto a mi hermana?.

(María) - ¿Qué ?, ¿Nancy?, no… Bueno, ¡Ay!.

María se puso tan nerviosa que no se había dado cuenta de los rasguños que se había hecho en las rodillas al tropezar.

(Esteban) - Estás herida.

(María) - No, no se preocupe, no es nada, estoy bien.

María le respondió con una sonrisa.

( Esteban) - Sonríes, pero te duele.

(María) - ¿ Qué?.

Esteban la alzó en sus brazos.

(María) - ¿Q-que hace?.

(Esteban) - Ya se lo dije, está herida y si no hace algo le va a seguir doliendo.

(María) - Pero lo deben de estar esperando en el gran salón, además le dije que no se preocupe que no es para tanto, es más no le di importancia así que por favor, suéltame.

( Esteban ) - Para mí si es algo, deje de moverse y la llevaré a un lugar donde pueda sentarse y pueda curarla.

(María) - Oiga, ¿ en serio esa es su prioridad en este momento?.

(Esteban ) - Si, para mí tu siempre has sido y serás mi prioridad.

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***