ana estaba en su nueva habitación aún aterrada de haber caminado al lado de la persona que más odiaba y aunque sabía que Michelle no estaba enterada de quién era, eso no dejaba atrás las preguntas que ha cada rato se hacía una de ellas fue el porque se le acercó, ¿acaso de verdad sintió compasión por ella? o ¿solo aprendió un nuevo método para burlarse de la gente que a la vista se ven vulnerables? ya ni sabía que pensar definitivamente Michelle le resultaba alguien muy complejo de entender, al principio estudiarla le resultaba fácil creía que con el solo aparentar los mismos gustos podrían llegar a ser amigas, pero como siempre estaba muy equivocada, sentía realmente un peso de encima necesitaba un descanso cada vez el plan se hacía más extenso lo cual no es que la animara del todo la realidad es que quería acabar con todo de una vez y poder volver a la vieja rutina con sus padres es lo única que deseaba.
empezó a sentir cansancio sus ojos ya pesaban, tenía mucho sueño y sin darse cuenta se había quedado dormida, el reloj sonó avisándole que era otro día al despertar su primera impresión fue de susto y no solo por el hecho de haberse parado tarde sino que al otro lado donde se encontraba otra cama había una persona recostada, es normal que en el internado se comporta habitación lo que no es normal es que de la nada aparezca una persona sin previo aviso y resultaba más extraño en el hecho de que supuestamente iba encontrarse sola en la habitación hasta encontrarán una compañera nueva con quién compartirla esto si que la ponía inquieta, pero lo que mas la aterró es que la persona del otro al parecer ya se había despertado. Ana se quedó quieta esperando que le dieran una explicación, pero lo único que escuchaba era bostezos y quejidos. cuando fue acercarse recibió un susto de muerte de la nada salió de entre las cobijas una chica de cabello corto y mirada amenazante la cual se percato de el susto que había causado a su compañera que se encontraba sentada en el piso, luego de cinco minutos incómodos decidio hablar:
-oye es que acaso no piensas hablar o esperas una bienvenida? -hablo groseramente la infiltrada de cabello corto.
-primero que todo esté es mi cuarto y yo llegue primero que tú así que no me vengas con sermones te quedó claro -contesto ana de manera muy atrevida.
-jajaja que interesante según yo este es mi cuarto desde hace dos años querrás decir que tú eres la infiltrada, pero bueno ya que yo soy la mayor me voy a comportar como tal.
Ana no entendía a lo que se refería creyó que todos las compañeras de cuarto tenían las misma edad así que decidió preguntar.
-tu ¿cuántos años tienes? -pregunto con mucha curiosidad.
-tengo 18 es obvio aunque debo decirlo me veo mucho más joven que tu -dijo en tono de burla.
Ana en vez de molestarse comenzó a reír su comentario le parecía divertido no estaba nada ofendida y al parar de reír volvió a hablar.
-sabes debo admitir que me causo gracia lo que dijiste, solo por eso te voy a disculpar. -al decir esto la chica con mirada rebelde comenzó a reír aceptando la petición Dada.
-bien vamos a comenzar de nuevo primero como te llamas?.
-me llamo Erika es un placer conocerte -contesto ana a la pregunta de la chica
-lindo nombre, ahora me presento soy Lauren es un placer pelirrojita.
Ana no dijo nada solo sonrió aunque tenía que admitir que detestaba que le dijeran pelirroja le hacía acordar su desagrado al color, pero decidió dejar así y no comentar nada al respecto más bien se apuro para alistarse para la clase pues al parecer la presentación llevo más de medio hora.
trato de ser lo más rápida posible ya cuando iba a salir se dió cuenta que Lauren seguía acostada como si nada. iba a decir algo, pero decidió callar no quería dar sermones en su primer día además la clase ya casi empezaba salió corriendo lo más rápido posible y casi llegando le cerraron la puerta en su cara definitivamente esto molesto muchísimo a Ana, pero ni modo la culpa era de ella por haberse quedado discutiendo con su compañera. pasaron alrededor de 20 minutos cuando por fin la profesora se digno abrir, movió las cejas dando a entender que pasará al pasar se encontró con Michelle la cual ni siquiera le había dirijido la mirada, se quedó parada esperando a que la profesora le asignará un puesto sin embargo está le dijo que se presentase. Ana empezó hablar con cierta inseguridad no estaba acostumbrada a hablar en público.
- hola me llamo an- perdón es erika es un placer conocerlas espero nos llevemos bien y seamos amigas.
Ana todavía no se acostumbraba a su nuevo nombre eso le preocupaba no podía cometer errores además falsificar fue algo complicado tendría que ser más cuidadosa en el futuro.
la profesora rápidamente le asignó puesto al lado de una chica un poco desaliñada. la clase paso rápidamente Ana casi no entendía las explicaciones tendría que estudiar más en la biblioteca.
había acabado la clase fue un poco agitado el comienzo, se paró de su puesto para dirigirse a su proxima clase seguía al resto de compañeras las cuales parecían robots sin expresiones pensó que ya estaban acostumbradas a esa rutina entro clase un poco desorientada no tenía asiento sin embargo vio una vacío y decidida fue a sentarse en el nadie le dijo creyó que no tenía dueño justo cuando estaba acomodándose una voz muy conocida le susurró al oído.
-pelirrojita ¿qué haces en mi puesto?
Ana se ruborizó, sus orejas eran muy sensibles giro rápidamente buscando al culpable al ver a Michelle se sorprendió además está sonreía muy resplandeciente.
-oye ¿por qué te pusiste roja? no me digas que eres sensible al tacto.
-si lo soy por eso no lo vuelvas a hacer. -dijo Ana tratando de mostrarse tranquila
-crei que estabas en otra clase tu rostro parece el de una chiquilla, aunque tus atributos fisicos si parecen los de alguien mayor - hablo sarcásticamente Michelle y de manera divertida.
-eres muy pesada no creí que te burlaras de las nuevas.
-oye calmante solo estoy molestando, solo venía a que me delvovieras mi puesto no a qué pelearamos.
Ana estaba molesta y avergonzada al mismo tiempo se paró rápidamente del puesto sin ni siquiera dejar hablar a Michelle la cual la seguía mirando de forma muy apagada.
después de dar varias vueltas al fin encontró su lugar como la anterior clase también se encontraba al lado de la chica desaliñada. esta no dijo nada en toda la clase hasta que de la nada empezó a hablar.
-¿eres amiga de Michelle? -pregunto sin vergüenza alguna.
Ana no sabía que responder pues Michelle había dado entender que lo eran sin embargo sólo en las dos ocasiones que hablo con ella fueron para molestarla.
- nosotras somos una combinación de amigas y enemigas en el buen sentido de la palabra. - respondió.
-ya veo, sabes siempre sentí curiosidad de Michelle llegó hace dos años parecía muy agresiva sin embargo al conocerla sentí calidez.
-¿son amigas? -pregunto ana.
-jajaja no lo somos nuestro es muy diferente además ella destaca en todo, no solo en belleza sino también en inteligencia.
ana se sintió molesta por un instante, pues tenía que admitir lo hermosa que es. cuerpo esbelto, de estatura alta, piel pálida, cabello rubio y lo que mas destacaba sus ojos azules cielo que la hacían parecer un ángel definitivamente es el estereotipo de mujer perfecta además con una actitud atrayente sin embargo eso no cambiaba en el hecho de las cosas que hizo en el pasado era un lobo disfrazado de oveja luego de un instante se dió cuenta que estaba otra vez en sus pensamientos hasta que su compañera la hizo volver en si.
-oye, oye ¿estás bien? Erika.
-que, ah perdón en qué estabamos. -su voz sonaba pérdida.
-me preguntaste si era amiga de michelle.
-o es cierto, discúlpame me perdí entonces si lo soy?
-sabes te voy a ser sincera hubo tiempo que nos llevamos super, pero un día de la nada me dejó de hablar siempre quise saber el porque, pero no recibe respuesta alguna.
-ya veo entonces qué pasó después ¿no tienes más amigas?
-a menudo se burlan por mi apariencia desaliñada, pero oye no hay problema conseguí unas amigas muy unicas.
-enserio pues es que... te quería preguntar si podíamos ser amigas.
-claro te ves muy agradable a ellas les encantaras. sabes te las voy a presentar en el desayuno.
-listo entonces es promesa, pero primero como te llamas jajaja.
-soy Elisa un placer.
Ana se sintió complacida al conocer a Elisa eso le haría más fácil su plan de verdad que no quería utilizarla, pero no quería alargar las cosas tenía que actuar rápido y además de eso iba ser más fácil sacar información valiosa de una persona herida las cosas se estaban poniendo más interesantes evidentemente todo se iba a poner mejor.
la clase apenas comenzaba Ana dejó de hablar con Elisa y empezó a poner atención no podía darse el lujo de bajar las notas lo único bueno fue que se trataba de su materia favorita quimica, estuvo concentrada en todo momento sin embargo a cada instante se sentía observada giro a diferentes direcciones, pero no vio a nadie tal vez solo fue impresión de ella. las dos horas pasaron con un abrir y cerrar de ojos esto desilusionó un poco a Ana lo bueno es que conocería chicas nuevas llamo con entusiasmo a Elisa dándole a entender que quería conocer a sus amigas.
las dos salieron con velocidad del salón para dirigirse al comedor y así conocer a las chicas nuevas cuando fueron a la mesa donde se encontraba Ana definitivamente se llevó una sorpresa eran tres chicas cada una le resultó unica, pero decidió mejor que Elisa las presentase.
-hola chicas, traje a una nueva compañera de clase.
-mucho gusto me llamo erika gallegos.
-pareces una princesita a la sirenita para ser exactos mucho gusto Erika me llamo andrey.
-mucho gusto me llamo elaine.
-eres muy bonita debo admitirlo jajaja perdón me presento soy daniela, pero prefiero que me digan Dani.
no había ninguna duda en Ana cada una le resultó unica la primera se veía lo atrevida que era, la segunda demostraba sienta frialdad y la última parecía muy tierna se veía lo diferente que eran, pero se notaba una amistad fuerte entre las cuatro chicas fue calidad la bienvenida y abrieron un espacio para que ella se sentase y ahí fue que empezó una gran conversacion.
-sabes te voy a decir lo curioso de este grupo aqui aceptamos abiertamente todos nuestros defectos tratando día a día de superar las inseguridades que nos calcomen. -hablo Andrey sin pena alguna.
-ya que eres nueva en el grupo quisiéramos saber cuáles son tus defectos no sientas miedo de decirlos no te vamos a criticar -dijo tranquilamente dani.
-pues... jaja perdón no se con qué empezar, ahhh bueno aqui vamos. perdón la pregunta físicos o emocionales? -pregunto tímidamente Ana.
las cuatro chicas empezaron a reír como si la pregunta resultará ambigua y después de un rato de risas Elaine empezó hablar.
-supongo que eres nueva en esto te voy a mostrar un ejemplo daré una breve descripción de mi señalando mis imperfecciones tanto físicas como emocionales bueno aqui voy. soy de piel demasiado pálida lo cual no me agrada del todo, pero lo trato de aceptar, mi cuerpo nos del todo esbelto ya que no me encuentro con un abdomen tonificado o perfecto y a nivel emocional no soy buena expresando lo que siento haciéndome un poco amargada.
al terminar todas las chicas la miraron de manera de aceptación excepto Ana la cual no se acostumbraba a la temática se sentía en un psicólogo un poco le resultaba parecía que estuvieran en rehabilitación.
-bueno Erika ahora que ya te dimos un ejemplo vas a a hacerlo tu -dijo Elisa seriamente.
Ana estaba desconcertada, pero trato de mostrar un rostro amigable y así empezó a hablar.
-bueno me siento un poco acomplejada por las pecas de mi rostro y mis abundante busto y a nivel emocional detesto lo muy vulnerable que puedo ser.
las chicas se quedaron callados pasaron trainta segundos hasta que por fin alguien hablo.
-para no alargar la charla te daré una breve explicación de todas menos de Elaine ella ya dijo todo, bueno... a mí no me gusta la nariz que tengo siento que es muy grande y pues odio tener que comportame muy femenino ahora prosigo con Dani ella no le gusta su estatura siente que es muy bajita y ella odia su falta de amor propio ya para terminar vamos con Elisa definitivamente detesta su cabellera desaliñada y lo enamorados qué es.
Ana casi explota era demasiada información que trataba de procesar rápidamente, definitivamente había conocido al grupo más raro del mundo sin embargo sintió alivio de pertenecer a un grupo debía admitir que no quería volver a quedarse sola.
la campana sonó avisando que la próxima clase ya empezaba apenas y eran las 12:30 Ana se dió cuenta de lo loco que resultó toda la mañana ya tenía cinco nuevas amistades cada una diferente a la otra.
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