Carol en lugar de responder voltea a ver a Basilisa quien pone sus ojos en blanco, Basilisa también está en total desacuerdo con la forma en que su padre trata a los esclavos y a los que alguna vez se fueron. Ella intentó en varias ocasiones conversar con él, pero no sirvió de nada, ya que lejos de escucharla le da un pequeño discurso sobre su clase social alta y su posición acomodada.
-Basilisa... -Exclamó Samuel volteando a ver a su hija.
Basilisa volteó a verlo sin pronunciar palabra a lo que él le dijo:
-¿Le puedes mostrar a Carol su habitación? -Le preguntó Samuel a Basilisa.
-Si, yo se la muestro. -Le respondió Basilisa con una sonrisa algo forzada por el incómodo momento por el que acaban de pasar.
Samuel voltea a ver a Carol para informarle:
-Ahora Basilisa te llevará a tu habitación y mientras yo hablare con las esclavas para que preparen algo de comer, el viaje seguramente te abrirá el apetito.
Carol asiente con su cabeza.
-Vamos te mostraré dónde está la habitación. -Le dice Basilisa a Carol.
-¿Qué haces aquí aun? Que lento eres ya deberías haberte ido. -Le reclama Samuel a Hugo
-Si, señor. -Le responde Hugo a Samuel antes de darse media vuelta para irse.
Carol y Basilisa pasaron por el pasillo donde se encontraron con Berta (la madre de Basilisa), ella estaba muy contenta de ver a Carol.
-Hola tía -Saludo Carol a su tía Berta con una sonrisa.
-Carol, mi sobrina favorita. -Respondió Berta al saludo. -Estábamos esperándote.
-Voy a mostrarle su habitación. -Le dijo Basilisa a su madre.
-Yo las acompaño así me dices si hay algo que no te guste y le digo a las esclavas que lo arreglen. -Le sugirió Berta a Carol.
-Está bien, tía. -Le respondió Carol.
Luego de enseñarle a Carol Walker su habitación fueron a almorzar, claro que a pesar de que Carol se divertía estando haya a ella no le gustaba mucho ver cómo trataban a los esclavos. Tampoco le gustaba el hecho de que tuvieran esclavos ya que en su casa todos eran empleados y eran bien tratados además de que sus barracas eran pequeñas casas donde podrían vivir tranquilamente a diferencia de las barracas del hacienda Parris.
Samuel y Antonio habían discutido en repetidas ocasiones por eso ya que Samuel no estaba de acuerdo con que Antonio hay liberado a sus esclavos y claro que Antonio tampoco estaba muy contento de que Samuel aún tuviera esclavos. En una ocasión Antonio le ofreció a Samuel comprarle algunos de sus esclavos pensando que al verlos que libres podrían trabajar mejor pero sabiendo que querría liberarlos Samuel se negó ya que piensa que es peligroso darles demasiada libertad porque los considera personas peligrosas.
-Pescamos muchos peces ese día. -Les comento Carol emocionada.
-Si quieres podemos ir de pesca también. -Le dijo Samuel con una sonrisa.
-¿Enserio? -Pregunto Carol con una sonrisa.
-Eso sería divertido. -Exclamo Basilisa.
-Si y te divertirás más con tu familia que con unos esclavos. -Le dijo Samuel.
Luego de almorzar juntos Carol y Basilisa fueron a jugar al jardín de detrás de la casa, pensaron en cortar algunas flores para ponerlas en agua en su habitación como decoración.
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 20 Episodes
Comments